Dentro de los últimos lanzamientos realizados por Razer los accesorios para Xbox han tenido un lugar destacado. Entre ellos la compañía de las tres serpientes cruzadas ha lanzado una edición en color blanco de los auriculares Kaira, Kaira Pro y del mando Wolverine V2, los cuales están pensado para un público que cada vez demanda más salirse de los colores oscuros en favor de opciones blancas o de distintos colores.
A pesar de haber salido hace solo unos días, hemos tenido la oportunidad de probar el Razer Wolverine V2 White Edition tanto con nuestra Xbox Series X como en PC, experiencia que hoy os detallamos en este review al tiempo que os brindamos nuestra opinión sobre el nuevo mando de Razer.
Razer Wolverine V2 White Edition, especificaciones:
- Botones de acción táctiles mecanizados Razer y cruceta táctil mecanizada Razer
- Dos botones multifunción reasignables
- Modo de gatillo sensible con topes en los gatillos
- Conector analógico de audio de 3,5 mm
- Conexión por cable de 3 m con alivio de tensión
- Medidas: 161,5 mm x 105,8 mm x 65 mm
- Peso: 274 gramos
- Compatible con : Xbox One/Xbox One S/Xbox One X/Xbox Series X|S y PC (Windows 10 o posterior)
Tabla de contenido
Unboxing y primeras impresiones
El Razer Wolverine V2 es un mando que se ha desarrollado especialmente para las nuevas consolas de Microsoft, aunque también podemos usar con Xbox One y PC con Windows 10 o superior. En la caja donde nos llega Razer no deja pasar la oportunidad de señalar no solo la certificado de producto “Diseñado para Xbox”, si no que destaca su diseño para Xbox Series X y Series S.
En la habitual caja negra con la línea verde en la parte inferior que indica un producto Xbox destaca la imagen del mando en un blanco inmaculado,
Dando la vuelta a este caja tenemos un detalle de las principales características del Wolverine V2 White Edition, con especial detalle al echo de que es un mando cableado que incorpora dos botones extra en su frontal y un diseño ergonómico para largas jornadas de juego. También destaca los botones meca-táctiles, uno de los aspectos más distinguibles de este mando.
Al abrir esta caja encontramos un base de color blando donde se aposenta el mando bien asegurado.
Junto con el mando y su cable de 3 metros, el cual por cierto no es extraíble y cuenta con una acabado de plástico y no de tela mallada como en modelos superiores como el Wolverine V2 Chroma. Junto a ello tenemos la habitual guía rápida de uso un una pegatina con el logo de la marca.
Las sensaciones en la mano son la de tener un mando con un buen diseño en lo que a ergonomía del agarre se refiere, donde los agarres cuentan con un diseño en “forma de L” que nos permite un agarre más natura. Esto se une a un peso de 274 gramos, lo cual hace que no sea pesado, pero si que ayuda a dar la sensación de producto calidad y gran resistencia.
Un diseño que en blanco luce mejor
La gama Wolverine V2 no guarda grandes diferencias entre sus distintos modelos, aunque las hay. En este caso tenemos un mando con unas medidas de 161.5 mm x 105.8 mm x 65 mm totalmente blanco, solo roto por los acabados negro de los sticks y botones, además de por dos líneas negras que contornean los agarres y el nombre de la marca bajo el botón Xbox.
Este sistema bicolor hace que el aspecto general sea realmente atractivo, pero al mismo tiempo elegante. No tenemos colorines ni luces LED, pero sin duda esta edición en blanco enamorará a mas de uno.
En lo que a diseño general se refiere se ha mantenido la distribución de botones que vimos con el resto de la gama Wolverine V2, con un botón bajo el de “Share” que nos permite regular el sonido junto con los botones direccionales, además de haber elevado y girado la posición de los botones de vista y menú.
En la parte inferior se mantiene el mismo diseño, con un blanco inmaculado que solo se rompe por la continuación de las lineas que separan los agarres y por el negro de dos conmutadores que permiten regular la distancia de acción de los disparadores.
Uno de los puntos distintivos de este mando está escondido bajo sus botones de acción y la cruceta, donde Razer ha incorporado unos interruptores meca-táctiles que logran un tacto almohadillado reduciendo la distancia de accionamiento a solo 0.65 mm. Esto e sun 35% menos que la distancia de un mando de membrana estándar y aunque puede parecer una nimiedad, lo cierto es que a la hora de jugar cualquier reducción del tiempo de acción se agradece.
Otro de los puntos destacados de este mando es que cuenta con dos botones extra, los M1 y M2, que se han situado en la parte frontal junto a los habituales LB, LT, RB y RT. Estos dos botones extra se puede mapear para añadir funciones extra a la hora de jugar, incluyendo la posibilidad de adaptar la sensibilidad de los sticks.
Todos los botones situados en el frontal cuentan con una acabado libre y brillante, lo que visualmente queda muy atractivo pero que a la hora de jugar se hubiera agradecido algún acabado que mejorara la sensación de agarre.
Para mejorar la velocidad de acción en juegos como shooters los Razer Wolverine V2 White Edition cuentan con dos conmutadores que nos permite reducir la distancia de acción de los disparadores, algo que permite que podamos disparar más rápido y por ende más veces con el consiguiente beneficio en nuestras partidas. Basta con deslizar estos conmutadores para variar entre una respuesta “normal” a una reducida, simple, pero de gran impacto en el juego.
Finalizando el repaso a su diseño llegamos a la zona de los agarres, que con un acabado bastante rugoso nos permite jugar horas y horas, y aunque seamos de manos sudorosas el agarre seguirá siendo impecable. Por desgracia el acabado blanco tiene la pega de que esta zona se ensucia bastante, pero un simple paño húmeda de vez en cuando soluciona el problema.
En lo que a diseño se refiere el Wolverine V2 tiene pocas pegas, menos aún en un acabado blanco que le da un aspecto elegante realmente bonito. Si tenemos que ponerle algún pero sería a la situación del botón vista, que no es el más accesible al tener en medio de la acción el stick izquierdo, y los acabados brillantes de los botones frontales, unos simples “puntos” hubieran mejorado el agarre sin afectar en exceso al diseño.
Razer Controller Setup for Xbox (y PC)
Para configurar el Wolverine V2 Razer nos ofrece “Razer Controller Setup for Xbox”, la cual a pesar de su nombre está disponible para consolas Xbox, pero también para PC Windows 10 o superior. Esta aplicación nos permite crear varios perfiles, cada uno de ellos con una configuración distinta para el mando. Entre las opciones que nos brinda para personalizar cada perfil tenemos la de mapear los botones del mando y entre ellos poder asignar el control de la sensibilidad de los sticks, es decir unos botones que mientras los pulsamos modifican la sensibilidad de los sticks. Esto es algo que también nos deja hacer esta aplicación , escogiendo entre 10 niveles de sensibilidad para cada stick.
Imagina que estás jugando a un juego y que en determinadas ocasiones necesitas realizar movimientos suaves y precisos, con una sensibilidad menor esto es más sencillo y con el Wolverine V2 lo puedes hacer mientras pulsas los botones asignados, y volver a la normalidad con solo soltar estos botones.
Junto con ello esta aplicación nos permite ajustar el nivel de vibración háptica, para que esta sea menor o mayor en función de nuestros gustos.
Experiencia de uso
Con los Wolverine V2 razer ha logrado una mas que significativa mejora en la ergonomía de sus mandos, siendo muy cómodos de sujetar y que, con la salvedad del botón de “vista”, nos facilita el acceso a los distintos botones y gatillos para tener una mejor experiencia de juego.
Con su agarre texturizado el mando permite una excelente sujeción en las manos por horas, mientras que sus botones meca-táctiles ofrecen un tacto suave que no tiene ese “salto” que notamos en el mando de Xbox cuando llegamos al punto de activación, siendo más silencioso en su uso pero preciso en su respuesta.
Los sticks no cuentan con recambios incluidos, por lo que nos tenemos que conformar con el habitual diseño convexo con un aro exterior y una “diana” en relieve en su interior. Personalmente me gustan que los bordes tengan algo de relieve ya que me ayuda a controlarlos con más precisión en movimientos bruscos, siendo en este caso algo lisos para mi, aunque eso es algo personal y ya va en cuestión de estilos y gustos.
Donde no se le puede poner pegas es en el rendimiento, siendo rápido y preciso, tanto en sus sticks como en sus botones, lo que al fin y al cabo es lo más importante que le podemos pedir a un mando.
Conclusiones
El Wolverine V2 White Edition no guarda más diferencia con el modelo que inauguró la gama que el color, aunque visualmente la diferencia es notoria ya que mientras el negro guarda un estilo gamer más “tradicional”, el acabado blanco es más fino y elegante. Es decir una diferencia meramente estética. Donde no hay variación es el precio de 119,99€ ni en el rendimiento que proporciona.
Razer nos ofrece una experiencia de juego de primer nivel, para estar horas jugando sin que nuestras manos sufran, manteniendo un agarre firme y una respuesta rápida que nos permita competir a nuestro mejor nivel desde el minuto uno hasta que último. Aunque hay puntos a mejorar como la situación de botón “Vista” o incluso que se siga usando un cable fijo en estos rangos, lo cierto es que sin duda su principal pega es el precio, algo que la marca justifica por la calidad de construcción y rendimiento, argumentos que puede que no convenzan a todo el mundo dado que la competencia ofrece por menos opciones con incluso incluyen palancas inferiores.
Razer Wolverine V2 White Edition
119,99€
Pros
- Un diseño que resalta en la White Edition
- Excelente rendimiento
- Botones y cruceta meca-táctiles
- Opciones de personalización
- Calidad de construcción
Contras
- Precio
- Algunos "problemas" de diseño
- Cable fijo
- Los agarres se ensucian bastante
