Cuando hablamos de Dyson pensamos en multitud de productos, pero el que hoy os traemos se sale por completo del espectro donde estamos acostumbrados a verlos. Demostrando que no tienen miedo a la hora de adentrarse en nuevos mercados, la compañía ha entrado en el mundo de los auriculares con los nuevos Dyson Zone, unos dispositivo que no solo apuestan por la calidad de sonido, sino que lo hacen con un diseño que incluye una visera con sistema de purificación de aire. Tranquilos, si no te gusta o no quieres usarlo, esta visera es removible.
Dyson Zone, especificaciones:
- Peso: 585 gramos
- Altavoces: controladores de neodimio de 40 mm y 16 ohmios
- Frecuencia de respuesta de 6 Hz a 21 kHz
- ANC: hasta 38 dB con distorsión ultra baja
- Modo transparencia y sensor de presencia
- Micrófonos: 11
- Bluetooth 5.0
- Visera imantada con purificación sin contacto
- Purificación: Sistema con filtro de carbono activo que elimina el 99% de las partículas de humo, los virus y contaminantes ultrafinos de hasta 0,1 micras
- Autonomía:
- Hasta 50 horas con ANC
- 4 horas con audio ANC y purificación activa
- Tiempo de carga: 3 horas
- Compatible con la app MyDyson
Tabla de contenido
Unboxing
Dyson cuida los detalles al máximo, algo que hacen desde el propio embalaje. Los auriculares de Dyson nos llegan en una caja con una cubierta exterior en color negro, donde dejan claro que el elemento diferenciador es el sistema de purificación del aire. Tanto en el frontal como en la trasera y en los laterales se centran en mostrarnos el funcionamiento de este sistema, destacando la calidad de su filtrado.
Detrás de esta cubierta se esconde una caja de color blanco con un esbozo del diseño de los auriculares
Esta caja oculta en su interior un estuche rígido con un curioso sistema de cierre que nos recuerda a un cofre, debiendo girar un dial para abrir o cerrar el estuche. También encontramos el habitual folleto informativo, un cable de carga, una herramienta de limpieza y un filtro para los auriculares.
Una vez abierto el estuche encontramos un interior forrado para mantener los auriculares siempre en perfecto estado, los cuales vienen colocados en un habitáculo que lo sujeta y evita que se mueva. También vemos una pequeña bolsa de color azul en cuyo interior se esconde el visor plegable, siendo todo lo que encontramos en este estuche.
Diseño innovador con visera desmontable
Al contrario que otras marcas como Razer, Dyson no comenzó el desarrollo de este dispositivo por ningún motivo relacionado con la pandemia del COVID-19 sino que lo hizo varios años antes, como una forma de protegernos contra la cada día peor situación de contaminación que padecen muchas ciudades. Esto es algo que ya vimos en dispositivos como el LG PuriCare Air, pero que en el caso de Dyson lo han unido a unos auriculares para hacer de ellos un producto más ponible.
El Dyson Zone cuenta con un diseño que la marca califico en su presentación como industrial, pero que personalmente lo asocio más con lo que me esperaría ver en Blade Runner. Esto no es solo por el tema de la visera, sin duda el más llamativo, sino también por un diseño de diadema dividido en tres zonas separadas, dos de las cuales albergan las baterías, y unas gruesas copas que pivotan sobre unos soportes metalizados. Todo ello se traduce en un dispositivo con un considerable peso de 585 gramos, prácticamente el doble que otros modelos de auriculares de diadema, pero que curiosamente no es tan apreciable una vez lo llevamos puestos.
Los Dyson Zone ofrecen un sistema de visera, nombre que por cierto le da la marca. Seguramente porque llamarle bozal no quedaba nada bien. Sea como fuere es un accesorio que se coloca de forma magnética pegada a las copas, quedando situado en frente de nuestra boca y nariz, pero sin entrar en contacto con ellas. Esta visera es sumamente flexible, pudiendo ajustarse en distancia con un sistema deslizante que cuando lo tenemos correctamente colocado logra crear una corriente de aire que nos envuelve la nariz y boca.
Las copas del Dyson Zone son de un gran tamaño y tras ellas se esconden unos grandes drivers de neodimio de 40 mm, pero también un sistema de purificación con filtro de carbono activo. Este sistema logra purificar el aire que luego nos llega a través de la visera, logrando eliminar el 99% de las partículas de contaminación como humo y gases urbanos, los virus, alergenos y contaminantes ultrafinos de hasta 0,1 micras. El aire purificado se envía al sistema de la visera mediante un compresor que gira a mas de 9.000 RPM, algo que se aprecia desde fuera pero que cuando lo llevamos puesto apenas es perceptible.
Se trata de un sistema pensado sobre todo para personas que padecen algún tipo de problemas respiratorio o alergia, pero que tras los meses que hemos vivido en pandemia adopta muchísimos otros usos. Lo hace además sin tocar nuestra piel, lo que nos da un plus de comodidad y confort que accesorios como las mascarillas no logran.
Dyson ha usado unos controladores dinámicos de neodimio de 40 mm y 16 ohmios, que demuestran lo en serio que se toma la empresa la calidad de sonido cuando vemos que son capaces de ofrecer una frecuencia de respuesta que va desde los 6 Hz hasta los 21 Khz. Esto es muy superior a lo que ofrece la mayoría de auriculares, alcanzando incluso frecuencias que están fuera del rango de espectro audible por un ser humano para lograr una mayor nitidez y detalle.
A la hora de controlar los Dyson Zone contamos con varias formas de hacerlo, incluyendo varios botones y un joystick que nos permite controlar el volumen y reproducción, pero también la velocidad de giro del sistema de ventilación del purificador. También podemos pasar de la cancelación activa de ruido al modo transparencia mediante un sistema de golpes en el lateral de la copa, algo que requiere de un gesto enérgico para que funcione.
En lo que a puertos se refiere contamos con un puerto USB C con el que podemos realizar la carga, aunque también podemos usarlo para conectarlo al smartphone.
Junto con varios de los 11 micrófonos con los que cuenta estos auriculares ocultos tras un sistema de mallado, en los contornos de las copas encontramos unas grandes aperturas que son las que condicen el aire desde las copas a la visera. Como detalle decir que me hubiera gustado disponer de algún tipo de «tapas» que poder colocar en estas aperturas cuando no uso la visera, aunque de momento no contamos con ello.
Hay que decir que esta visera se ajusta de forma magnética, lo que hace que ella misma se guie hasta su posición con solo acercar la visera a las copas. El ajuste también permite abatir la visera, de forma que esta queda por debajo de nuestra barbilla, algo que nos permite retirarla para hablar cara a cara, sin tener que retirar por completo la visera.
A pesar de su peso y dimensiones el Dyson Zone es realmente cómodo, mucho más de lo que esperaba cuando lo cogí por primera vez, y es que el peso inicialmente me echaba para atrás, pero la experiencia ha desmentido esta primera impresión. Dyson sabe como diseñar sus productos, algo que nos ha demostrado que no se limita a las aspiradoras o los purificadores, si no que es capaz de llevarlo hasta formatos compactos como unos auriculares.
Mantenimiento
Las Dyson Zone cuentan con un filtro en la parte exterior de sus copas, algo que nos permite realizar un mantenimiento del sistema de purificación con solo girar la parte exterior mallada. También contamos con una herramienta en forma de pincel que nos permite limpiar las zonas de peor acceso, como pueden ser los conductos del aire que lleva a la visera.
Las almohadillas también cuentan con un sistema de giro para retirarlas, lo que nos permite su limpieza y nos deja ver el driver que se esconde tras ellas.
Junto con el filtro de las copas, el sistema de purificación permite un despiece total de la visera. Esta visera cuenta con un filtro en la parte interna y un cuerpo de plástico muy maleable que podemos limpiar sin mayores problemas.
La visera se divide en una parte frontal y dos laterales que se retiran con solo tirar de ellas, aunque primero debemos retirar un filtro mallado que se encuentra colocado en su interior. Una vez retirado este filtro podemos ver su fino mallado, siendo la última fase del sistema de purificación de Dyson.
La herramienta de limpieza también nos va a ser muy útil aquí, ya que nos va a permitir llevar al interior de los rieles de la visera, y es que Dyson no ha dejado margen de error a la hora de lograr una completa higiene del dispositivo.
MyDyson, una aplicación «todo en uno»
Al igual que en otros dispositivos, el Dyson Zone es compatible con la aplicación MyDyson, disponible tanto para Android como para iOS. En este caso la instalación comienza por una búsqueda del dispositivo, el cual se conectará a nuestro smartphone mediante una conexión Bluetooth 5.0. Una vez completada la conexión y reconocido el dispositivo, la aplicación nos va a ofrecer una tutorial para que aprendamos a conocer nuestro dispositivo y como usarlo.
Esta aplicación nos permite configurar el sonido de los auriculares, incluyendo la cancelación activa de ruido y el modo transparencia. También podemos ver en una gráfica los niveles sonoros de los últimos 30 segundos, incluyendo saber si en algún momento hemos sobrepasado el limite recomendable.
Junto con ello esta aplicación nos permite conocer el estado del aire que nos llega a través de la visera, con un sistema muy similar al que vimos en el purificador de Dyson. En él se nos muestra la calidad del aire NO2 y se nos indica la velocidad a la que funciona el sistema de flujo de aire. También nos sirve de indicativo sobre cuando cambiar los filtros o si estos están mal colocados.
Experiencia de uso
Aunque el tiempo durante el que lo hemos podido probar ha sido corto, la experiencia con los Dyson Zone nos ha dejado unas impresiones muy claras, comenzando por lo bien diseñado que están de forma que logran amortiguar su peso para que no sea molesto en el uso.
Cuando hablamos de unos auriculares que superan el medio kilo de peso es inevitable pensar es que se harán pesados cuando le tenemos puesto. No podemos decir que no notemos ese peso, pero la calidad de construcción de la diadema y las almohadillas hacen que no sean más molestos que otros modelos de diadema que hemos probado. Se nota la calidad de los materiales usados, así como el grueso acolchado que hace que amortigüen el peso de forma que no sea incomodo.
Dyson ha usado un conjunto de botones y toques para controlar sus auriculares, lo que nos va a llevar un tiempo de aprendizaje. El principal escollo que vamos a encontrar es el uso del joystick, algo que no es del gusto de todos, y el cogerle el pulso al sistema de toques para cambiar entre ANC y el modo transparencia. Acostumbrados a ligeros toques, en el caso del Dyson Zone requiere un toque firme para que lo detecte, aunque una vez le cogemos el punto este movimiento obtiene una excelente respuesta.
En la cuestión del sonido sus drivers de neodimio no solo alcanzan un rango de frecuencias muy superior a lo que estamos acostumbrados, sino que lo hacen ofreciendo un sonido muy equilibrado, algo que Dyson ha hecho con toda la intención para evitar que haya una rango que pise el resto. Esto es algo de lo que muchas marcas adolecen, ofreciendo un sonido que prima los graves para lograr un sonido más contundente, pero que repercute en que estos priman sobre los medios y agudos.
La marca se ha esforzado por lograr que el sonido nos llegue en las mejores condiciones, apoyando a sus controladores con un diseño acústico que minimiza la distorsión hasta lograr un nivel ultrabajo conseguido a través de un sistema inteligente de procesado de la señal. El resultado es que la calidad de sonido de los Dyson Zone poco tienen que envidiarle a dispositivos como los Sony WH-1000XM5, con un audio que sorprende por su detalle y nitidez, haciendo de esta una experiencia sonora de primer nivel acorde a lo que esperábamos de un producto de la marca.
Otro de los puntos a destacar de los Dyson Zone es su cancelación activa avanzada de ruido, la cual usa nada menos que ocho micrófonos para su funcionamiento y dos más para cuando realizamos llamadas o usamos el modo transparencia. Este sistema funciona controlando constantemente el ruido que nos rodea, según la marca lo hace nada menos que 384.000 veces por segundo para lograr anular el sonido de forma constante en todas las frecuencias. Esto es algo que se nota en situaciones de sonido cambiantes como puede ser una calle con mucho tránsito o el metro, zona donde muchos sistemas de cancelación dejan ver sus limitaciones pero que el Dyson Zone solventa con seguridad.
Las cifras que nos da Dyson hablan de una cancelación de hasta 38 dB con distorsión ultra baja y la experiencia apoya estas cifras, siendo una cancelación muy eficiente que en buena medida se debe también la excelente cancelación pasiva que ofrecen las almohadillas.
Si cambiamos la cancelación activa de ruido por el sonido ambiente obtenemos un sonido de muy buena calidad y potencia, aunque como también cuenta con sensor de presencia otra opción es quitarnos los cascos para hablar, haciendo que el sonido se pause y reanude de forma automática cuando nos lo volvemos a poner.
Una visera «Cyberpunk», pero muy cómoda de usar
Ponernos la visera es toda una muestra de que no nos importa ser el centro de las miradas y es que su estética futurista/cyberpunk hace que inmediatamente seamos el centro de atención. Sin embargo esto también nos pasaba hace no mucho con las mascarillas y ahora ver a alguien con unas apenas hace que alcemos la vista. Si eres una persona que sufre de alguna alergia, sensibilidad a la contaminación o simplemente te gusta respirar un aire lo mas puro posible, los Dyson Zone te ofrecen eso y al que no le guste que no mire.
Su sistema de filtrado sin contacto es muy cómodo y más aún cuando el peso lo soporta la diadema. Inevitablemente he recordado mi experiencia con las LG PuriCare Air, toda una tortura para las orejas. En el caso de las Dyson Zone llevar la visera es solo una cuestión de preferencia, por lo que es en relación a comodidad no podemos ponerle mas que el pero de como limita el campo visual inferior.
Puede que no sea el diseño más discreto, pero desde luego cómodo es y esa sensación de tener un «colchón» de aire es tan agradable como refrescante.
No debemos olvidar que hablamos de unos auriculares inalámbricos, algo que nos lleva al apartado de la autonomía. Dyson nos promete 50 horas con la cancelación activa de ruido, cifra impresionante que sin embargo se reduce a solo 4 horas si activamos el sistema de purificación, el gran culpable del consumo de los Dyson Zone. Por desgracia mi experiencia se limita a solo unos días y honestamente no puedo confirmar ni desmentir estas cifras, aunque si extrapolo el consumo realizado por el tiempo, parece que si no logra las 50 horas, al menos se acercará mucho a ellas.
Conclusiones y opinión
Con un precio de 699€ está claro que el Dyson Zone es un dispositivo muy de nicho, pensado para un público muy determinado y con unas necesidades muy concretas, aunque dado los niveles de polución de algunas ciudades es un dispositivo con un publico objetivo creciente.
A mi entender lo veo como una propuesta inicial con la que Dyson quiere dejar claro de lo que es capaz también en el mundo del sonido, pero sin dejar de lado su espíritu innovador y diferenciador. En calidad de sonido puede mirar de tu a tu a los actuales reyes del mercado, por lo que tenemos mucha curiosidad por ver que pasará si en algún momento se deciden a lanzar unos auriculares más «normales». Alguno se echará a temblar y razones no les faltan.
No veo el Dyson Zone como un superventas y sinceramente dudo que ese sea el objetivo de la marca, es un dispositivo especializado y en este pequeño mercado entran con la mejor opción que hay, cómodo y agradable de llevar, ofreciendo además un sonido a la altura de lo mejor del mercado del audio. Ahora solo el tiempo dirá si triunfa, aunque ya nos han dicho que esta es solo una primera versión de lo lo que podría ser una nueva gama de futuros productos.