Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 28

Google, al contrario que otras compañías, no lanza nuevos dispositivos cada pocas semanas, si no que apuesta todo a uno o dos lanzamientos. Por ello de estos dispositivos se espera lo mejor, tanto a nivel de hardware como de software. En las ultimas semanas he tenido la oportunidad de contar con el Google Pixel 4, probarlo a fondo, hacerme una idea de lo que ofrece y ver como ha mejorado con respecto al Google Pixel 3 XL que uso como dispositivo personal.

Un diseño ajustado a las necesidades

Google ha realizado una apuesto muy personal con el diseño del nuevo Pixel 4. Cuando todas las marcas apuestan por el colorido y pantallas infinitas, Google va y apuesta por colores base como el blanco y negro, bueno y una edición especial limitada en coral (naranja). Esto no es nuevo ya que los Pixel 3 también lo hacían, pero con una trasera en dos acabados que le daba un mínimo de personalización.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 29

En mi caso he podido contar con el modelo en negro. Este luce una trasera en cristal con un acabado brillante capaz de reflejar todo y que hace que cualquier huella se aprecie considerablemente. En esta trasera tenemos un modulo cuadrado donde se alojan las cámaras y que sobresale sobre el cuerpo general. En la parte inferior, centrado, tenemos la G de Google.

El contorno del Google Pixel 4 es de aluminio pintado de color negro, tanto en este modelo como en el blanco y el coral. En el tenemos en la parte derecha el botón de encendido / apagado en color blanco (naranja en los modelos Blanco y Coral) y los controles del volumen en color negro. La parte izquierda alberga la bandeja para la microSIM, mientras que la parte superior cuenta con un micrófono. Finalmente en la parte inferior tenemos el puerto USB tipo C y un par de altavoces.

La parte frontal es sin duda la que mas se aleja de los cánones más actuales, aunque tiene su razón de ser. Google ha montado en el Pixel 4 un nuevo sistema de cámaras y radar que permite controlar el dispositivo sin tocarlo, solo con movimientos en el aire. De él hablaremos mas abajo, pero es el motivo por el que el frontal mantiene un considerable marco en la parte superior, el cual se ve descompensado con un inferior mucho más pequeño.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 34

El equipo en general no tiene mal aspecto. Se aleja mucho de lo que otras marcas ofrecen, podemos decir que mas serio, escueto casi, pero que es la seña que Google quiere dar a sus dispositivos y una forma de desmarcase del resto. Los acabados son excelentes, con buenas transiciones entre materiales, dejando ver que estamos ante un dispositivo premium.

Aquí he de hacer una puntualizar y reconocer que mientras que mi Pixel 3 XL no me ha exigido ningún tipo de cuidado especial, con el Pixel 4 me he cuidado mucho de ponerlo en el bolsillo trasero del pantalón. Las pruebas de JerryRigEverything me hicieron cauto sobre la resistencia de este terminal a este tipo de situaciones, y no he querido tentar a la suerte su resistencia.

Pantalla a 90 Hz, pero no siempre

La pantalla del Pixel 4 era de lo que mas tenía ganar de probar ya que pasar de los 60 Hz a 90 Hz es una experiencia que desde que la probé en el OnePlus 7 Pro me parece que debería ser un estándar en la categoría premium.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 35

El Pixel 4 monta un panel con un display OLED flexible con una diagonal de 5,7 pulgadas, resolución FHD+, una densidad de 444 ppp y soporte HDR, contando ademas con los mencionados 90Hz, pero no siempre. Google ha adoptado la decisión de montar un sistema de 90Hz adaptativos, demasiado adaptativos en mi opinión y que limita al usuario el decidir cuando queremos disponer de los 90 Hz. Por ejemplo, el sistema decide en que aplicaciones usar o no los 90Hz, eso es entendible porque en muchos casos es innecesario, pero también lo limita en función de la batería e incluso del brillo de la pantalla. Es decir que dependiendo de si tenemos la pantalla con un brillo al 70% o al 90%, tendremos 60 Hz o 90Hz.

Lo cierto es que entiendo que se use un sistema adaptativo, pero no tanto el que se limite las opciones del usuario de elegir si quiere o no usarlo. Cierto es que en el día a día no es algo que puedas apreciar sin fijarte, pero si lo tengo, aún sabiendo que penalizará la batería, me gustaría poder tomar la decisión de cuando poder usarlo.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 39

En lo que respecta a la calidad de la pantalla he de decir que es realmente buena, con un calibrado muy aceptable pero sobre todo con una nueva función, el llamado Ambient EQ, que ajusta de forma gradual la pantalla para adecuarla a cada situación. Con ella se logra que la pantalla ajuste su tonalidad de forma automática, muy practico y cómodo.

Otra función muy de agradecer es “Atención a la pantalla“, una función que hace que la pantalla no se apague mientras la estemos viendo. El sistema detecta que hay alguien mirándola y aunque no toquemos la pantalla esta no se apagará.

Por ultimo decir que el brillo de la pantalla se ajusta rápidamente a la luz ambiente y permite una visibilidad optima en exteriores.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 40

Android 10, hecho a medida

Esta claro que unos de los puntos fuertes del Google Pixel 4 iba a ser su rendimiento y asi ha sido, el hacer el software y el hardware es lo que tiene, que puedes hacer que en conjunto ofrezcan la mejor experiencia. El Pixel 4 está hecho a la medida de Android 10 y saca lo mejor del sistema, aunque esto como siempre va en cuestión de gustos. Lo que para unos es sencillez para otros es simplicidad y pueden echar en falta opciones que tienen en capas como las de Samsung o Huawei. En mi caso prima la experiencia de uso y el Pixel 4 es una garantía en ese aspecto.

Ya hemos hablado largo y tendido sobre Android 10 y su apuesta por los gestos, el modo oscuro y un mayor control de nuestra privacidad, cuestiones que Google ha exprimido en su nuevo terminal, pero que ademas ha complementado con otros funciones para las especiales condiciones del Pixel 4.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 41

Perfiles personalizados

Entre la novedades que tenemos destaca una nueva opción de personalización del Pixel Launcher, no empecéis a echar cohetes porque Google no se ha desmadrado y es que a pesar de todo las opciones que nos dan no quitan ese aspecto de sistema puro. Pero al menos hay que recocer que ahora tenemos la posibilidad de adaptar el aspecto creando estilos personalizados con la fuente, el color, la forma y los iconos de las aplicaciones que mas nos gusten.

Por supuesto tenemos el esperado modo negro y unos fondos animados que se han diseñado especialmente para estilos terminales y que incluyen la opción de editarlos de forma parcial.

Motion Sense: “Mira mama, sin manos”

¿Recordáis la enorme frente del Pixel 4? pues ya llegado la hora de hablar de ella y es que ahí se esconde la tecnología Soli que hace funcionar el nuevo sistema Motion Sense, o lo que es lo mismo, controlar el teléfono sin tocarlo.

El sistema Soli usa una serie de cámaras, sensores y un radar que localiza todo lo que suceda frente al teléfono. Esto sirve para ofrece un desbloqueo facial que es de los mas rápidos que hemos visto, pero que sobre todo es el que mejor funciona si tener que ponerlo justo frente a nosotros. Hemos probado sistemas que funcionan muy bien, pero el del Pixel parece estar un punto por encima. Eso si, sigue permitiendo desbloquear el teléfono con los ojos cerrados, es decir mientras duermes por ejemplo, si alguien te acerca el teléfono a la cara este se desbloquea. De todas formas en un problema de software y Google ya ha prometido que lo va a solucionart.

Pero lo mas llamativo de este sistema es lo que lo que es realmente las funciones de Motion Sense, es decir el poder realizar una serie de acciones con la mano en el aire para controlar el terminal. Estas funciones las podemos habilitar en la configuración, permitiendo pasar canciones, activar la pantalla para ver la hora o silenciar llamadas o alarmas.

Cuando estamos en una aplicación que permite hacer uso de estas funciones, por ejemplo Spotify, en la parte superior de la pantalla se nos muestra una especie de aura que identifica que podemos usar gestos para controlar algunas opciones de la app. Funciona sin problemas y podemos pasar a la siguiente canción o volver al inicio de la que está sonando con solo pasar la mano de lado a lado.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 54

Google afirma que esto es el futuro y que poco a poco se irá haciendo un hueco en el mercado. En breve publicaremos la review del LG G8s Thing, un terminal que también permite gestos para controlar las aplicaciones, pero que usa un sistema distinto. El resultado es que de momento el uso “consciente” es mas bien una curiosidad, lo usas al principio para pasar canciones, pero al rato la costumbre o en mi caso el uso de auriculares táctiles hacen que uses otros sistemas. Será cuestión de cambio de hábitos y acostumbrarnos a usar los gestos en el aire, supongo.

Donde si que parece que hay muchos usos es en el uso inconsciente, es decir en esas cosas que no notamos pero que mejoran la experiencia. Por supuesto aquí entran cosas como el detectar que estamos delante para que no se apague la pantalla o que baje el volumen de una llamada cuando vamos a coger el teléfono. Sea como fuere el sistema funciona muy bien, sin fallos, cosa que me extraño ya que al fin y al cabo es una primera versión y se le hubiera perdonado algún que otro error.

Subtitulos automaticos

Otro de los añadidos que contamos viene relacionado con la accesibilidad y es que ahora contaremos con un sistema de subtitulos automáticos que funciona sorprendentemente bien.

Esta opción aparece junto con el control de volumen cuando estamos reproduciendo algún archivo multimedia, generando subtitulos para ese vídeo o canción que estamos escuchando.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 55
Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 56

Un hardware con claro oscuros

Hay cosas que funciona muy bien, pero que te dejan con la intrigar del “y si…”. Google ha cogido la costumbre de usar un hardware que yo califico “ir de sobrado”. Con el Pixel 3 sorprendieron con un sistema con una sola cámara que nos dejo asombrados por sus capacidades, pero con la intriga del “¿Y si hubiera tenido dos cámaras?”. Ahora Google ha repetido jugada pero con otros aspectos, destacando de ellos la batería.

En el 2019 decir que un terminal premium viene con una batería de 2800 mAh es sorprendente, y eso siendo amables. No es cuestión de que llegue al día de uso, algo que normalmente se logra a costa de su batería inteligente y de cosas como el sacrificar los 90Hz de la pantalla. La cuestión es que un terminal de esta altura necesitaba una batería que le hiciera destacar y no solo llegar al fin del día. Por suerte han mantenido la carga inalámbrica y su cargador de 18 W completa la carga en poco mas de hora y media.

Por el resto, su procesador Snapdragon 855 y una RAM de 6 GB dan la cara permitiendo un funcionamiento fluido y sin problema de rendimiento. Algo que ha permitido que obtuviera una puntuación de 325.381 en nuestras pruebas de Antutu y que se completa con un almacenamiento de 64 o 128 GB que no podemos expandir con tarjetas microSD.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 59

Cámara para fotografiar las estrellas

Llegamos a uno de los puntos mas esperados y es que la cámara es uno de los apartados donde debía destacar el Google Pixel 4, eso a pesar de que aún sigue muy alejada de sus competidores en cuanto a número y características. Google sigue primando el procesado antes que el número de cámaras, sigue demostrando que con poco logra mucho, pero sigue dejando esa sensación de contenerse y no poner toda la carne en el asador.

El nuevo modulo trasero de forma cuadrada alberga en su interior dos cámaras, una primera de 16 MP con una anchura de píxel de 1,0 μm, apertura f72.4 y un campo de visión de 52º, y una segunda lente de 12,2 MP, con una anchura de píxel de 1,4 μm, tecnología Dual Pixel, apertura f/1.7 y un campo de visión de 77º. Si bien es un paso de gigante sobre la cámara simple del Pixel 3, sigue pareciendo raro no contar con un gran angular en un terminal de esta gama. En su lugar Google ha apostado por un teleobjetivo con un zoom de 1,8 aumentos.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 60

Parece que Google considera que su aplicación es tan buena que cuanto menos toquemos mejor, al menos en sus Pixel 4. La nueva aplicación de cámara de Googlo cuenta con un acceso a los ajustes que se nos muestra con un icono en forma de flecha que despliega las opciones. Esta misma aplicación la he instalado en el Pixel 3 XL, pero no son exactas. Mientras que en el Pixel 3 XL se me muestra la opción de deshabilitar HDR o escoger entre HDR+ y HDR+ mejorado, en el Pixel 4 esta opción no se muestra y es la propia aplicación la que lo gestiona.

Del mismo modo no hay un acceso a teleobjetivo 1.8x, sino que contamos con un deslizable que debemos ajustar en ese punto, pasado el mismo y hasta llegar a los 8x ya comienza a entrar en acción los algoritmos e IA de la cámara.

Dicho todo esto hay que hablar de los puntos fuertes de esta cámara, que ya os adelantamos sigue siendo asombroso lo que logra con solo dos lentes y de tan pocos MP. Si aún dudas de que el tamaño no importa (en pixeles) prueba un Pixel y te convenceras.

Entra las novedades el Pixel 4 cuenta con la nueva función de doble exposición, un curioso sistema de ajustes que nos permite editar el nivel de luz y sombras de una fotografía antes de tomarla. Esto nos puede ayudar en situaciones de mucho contraste, do zonas excesivamente luminosas o con sombras que queramos ver mejor.

También tenemos el modo astrofotografía, que es un modo noche hormonado, vitaminado y con esteroides. Eso si, para sacarle el máximo provecho debes tener unas condiciones optimas de cielo despejado y un trípode donde ajustar el teléfono mientras toma la fotografía. También se puede usar en otras circunstancias y la diferencia con el modo nocturno habitual es sobre todo en la nitidez y la captación de los colores. Eso si, nuevamente no hay un acceso y se activa de forma automática si la escena es oscura y el terminal esta en una posición estable.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 68

El modo retrato funciona mejor que lo que el Pixel 3 lograba, algo que con dos cámaras tampoco es de sorprender, logrando una mejor percepción de profundidad y captar de forma adecuada los contornos, aunque sufriendo algo si le ponemos en situaciones complicadas como la parte del pelo o los pequeños espacios que dejan ver en fondo. Aún así los resultados siguen siendo aceptables, pudiendolos mejorar con los ajustes de desenfoque.

Lo que me ha resultado curioso es que la cámara del Pixel 4 ha mejorado en el reflejo de colores y texturas con respecto a lo que en su día tenía el Pixel 3, pero es que este también mejora usando la nueva cámara, no llega al nivel del Pixel 4, pero deja claro que el procesado es en muy buena parte el responsable de estas mejoras.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 69

En cuanto al tema selfe hemos pasado de dos a una sola lente de 8MP en la parte frontal. No termino de entender esto, tal vez sea por el espacio que ocupa el sistema Soli, pero por suerte no afecta en exceso mas allá de tener menos capacidades para fotos grupales y notarse una disminución de la precisión en el modo retrato, sobre todo en el tema de los contornos.. Eso si, el procesado que usa la cámara trasera vuelve a hacer de las suyas con este cámara selfie, logrando unos resultados muy por encima de que te puedes esperar para una lente Selfie de 8MP

Finalmente decir que el Pixel 4 puede grabar en 4K a 30 FPS o a 60 FPS en calidad FullHD, en ambos casos se nota que las fotografías dan mejor resultado que los vídeos. El sistema de estabilización logra un resultado cumplidor sin llegar a destacar, mientras que el sonido que capta es de buena calidad pero no en exceso potente, lo que si se nota que sufre es la imagen en condiciones de poca luz con una grano bastante patente.

Galería

Google Pixel 4

Como resumen y tal y como ya me paso con el Pixel 3, lo que mas me llama la atención de este dispositivo es lo bien que funciona de forma automática. Este es un punto que suelo valorar mas, ya que casi siempre que pregunto a la gente como saca sus fotos, un gran porcentaje afirma que pocas veces se sale de este modo y se molesta en trastear con las configuraciones. Google parece que opina lo mismo y ha apostado (y ha logrado) un sistema que te permite sacar el teléfono, apuntar y disparar con casi la total seguridad de que va a salir bien. Como mucho tienes que escoger si quieres usar el modo retrato o el nocturno y listo.

Google Pixel 4, especificaciones:

Diseño
Dimensiones: 68,8 x 147,1 x 8,2 mm
Peso: 162 g
Colores disponibles: Negro, Blanco y Naranja
Software
Sistema Operativo: Android 10
Sin capa de personalización
Pantalla
5,7 pulgadas OLED flexible FHD+ a 444 ppp 19:9 Ambient EQ Pantalla fluida¹ (hasta 90 Hz) HDR
Procesador
Qualcomm® Snapdragon 855™ 2,84 GHz + 1,78 GHz, 8 núcleos y 64 bits
Adreno 640
Memoria RAM
6 GB LPDDR4x
Almacenamiento
64 GB o 128 GB
Cámaras traseras
Doble: 16 MP Apertura ƒ/2,4 Campo de visión: 52° + 12,2 MP Apertura ƒ/1,7 Campo de visión: 77°, Estabilización de imagen electrónica y óptica
Cámara frontal
8 MP Anchura de píxel de 1,22 μm Apertura ƒ/2,0
Batería
2800 mAh Cargador USB tipo-C™ (18 W/2 A), carga inalambrica
Conectividad
LTE: bandas B1/2/3/4/5/7/ 8/12/13/17/20/25/26/ 28/32/38/39/40/41/66/71, Wi‑Fi 802.11 a/b/g/n/ac 2x2 MIMO (2,4 GHz y 5,0 GHz)
Otros detalles
Bluetooth 5.0 + LE (códecs HD: AptX, AptX HD y LDAC) NFC, USF tipo C, Clasificación IP68, Corning Gorilla Glass 5 en frontal y trasera, Motion Sense, Desbloqueo facial
Precio
a partir de 759 €

Conclusiones

Google sigue destacando en dos puntos, rendimiento y cámaras. Su apuesta por la innovación con el sistema Motion Sense es muy atractiva, pero aún parece algo verde y habrá que esperar a que se amplíen sus usos y sobre todo que nos acostumbremos a usarlo mas allá de hacerlo puntualmente.

El Google Pixel 4 no me ha defraudado, pero si me ha dejado con la mencionada sensación de que Google desarrolla sus smartphones con el freno de mano puesto. La segunda cámara trasera se agradece, pero no es la ese punto disruptivo que esperabamos, no entiendo porque no han completado el dispositivo con mas opciones tipo gran angular o incluso el macro. Del mismo modo no es entendible que en un terminal así presentes una batería tan conservadora. Puedo pasar por alto el diseño espartano, pero aún espero ese Pixel donde Google eche el resto, y se ponga a la altura y demuestre que es capaz de hacer con el mejor hardware y un completo sistema de cámaras.

Google Pixel 4, el terminal que se controla sin tocar - Análisis 70

Aún así, y después de desahogarme, reconozco que el Pixel 4 me ha ofrecido una mejor experiencia de uso que el Pixel 3 XL que uso en mi día a día. Google ha mejorado el rendimiento de sus dispositivos, su pantalla, su cámara con un modo astrofotografía ejemplar, pero a pesar de todo me sigo preguntando ” y si..”

Google Pixel 4

759.00 €
8.7

DISEÑO

8.0/10

PANTALLA

9.0/10

CÁMARAS

9.2/10

RENDIMIENTO

9.3/10

SOFTWARE

9.0/10

AUDIO

8.5/10

AUTONOMÍA

8.0/10

RELACIÓN CALIDA-PRECIO

8.7/10

Pros

  • Cámaras
  • Rendimiento
  • Motion Sense

Contras

  • Batería
  • Diseño
  • Una aplicación de cámara con limitaciones

Síguenos en nuestros canales de WhatsApp, Telegram y Google News para no perderte nada.


Esta web usa enlaces de afiliación que ayudan a su mantenimiento, con ellos recibimos una comisión por cada compra que los usuarios hagan, aunque esto no supone un aumento de su precio, solo nos echas una cable en los gastos de la web.

Sobre El Autor
Pedro A.
Editor Jefe, enamorado de mi familia y de la tecnología en cualquiera de sus formas, aficionado a la Sci-Fi y a mirar al cielo nocturno. Tratando de vivir la vida sin remordimientos.