Razer Kraken V4 Pro, calidad que convence y una pantalla OLED para marcar la diferencia – Análisis

Razer ha presentado recientemente una nueva serie de productos donde la experiencia háptica era el centro de todo. Centrado en los nuevos auriculares de la gama Kraken y en el cojín háptico Freyja, tuvimos un primer contacto que ya os contamos. Sin embargo en las últimas semanas hemos podido profundizar en esta experiencia con los Razer Kraken V4 Pro, auriculares que hemos estado usando en las últimas semanas y de cuya experiencia hoy os vamos a hablar.

Esta nueva propuesta de la compañía de las tres serpientes en la evolución de los Kraken V3 Pro que ya probamos en su día. Esta nueva generación mejora en sus prestaciones, pero además añade un extra que, junto con la experiencia háptica, es la gran novedad con la que la marca nos quiere sorprender. Hablamos de un pequeño hub con pantalla OLED que nos sirve como sistema de control externo, con el que no solo podemos regular el sonido o la función háptica, sino que disponemos de otra funciones como poder cambiar entre fuentes de entrada de sonido o de perfil de ecualizador entre otras. En principio todo esto suena muy interesante, pero ¿realmente es práctico?, una pregunta a la que os trataremos de daros respuesta en este análisis.

Razer Kraken V4 Pro, especificaciones:

Unboxing

Lo primero que nos llama la atención cuando recibimos los nuevos Razer Kraken V4 Pro es que, si bien la caja ha mantenido un diseño continuista, esta ha aumentado de tamaño y peso con respecto a sus predecesores, algo que es lógico habida cuenta del añadido del hub. Así tenemos una caja de color negro donde resalta una imagen del dispositivo en su parte frontal, la cual viene además adornada por el logo de la marca, los sellos que atestiguan la función háptica y de iluminación chroma, además de una serie de características que se mencionan como adelanto de lo que veremos a continuación.

Si le damos la vuelta a esta caja encontramos en detalle otras características, centrándose aquí mas en lo que nos ofrecen los auriculares como sus drivers Triforce de 40mm o el sonido espacial.

Al abrir la caja nos damos de frente con los auriculares, los cuales dentro de su diadema acomoda el posición vertical el nuevo hub. Todo ellos descansa sobre una base de cartón de color negro, una de las medidas que la marca ha adoptado para reducir su impacto medioambiental.

En este mismo espacio podemos apreciar en la parte superior un pequeño estuche de cartón, el cual contiene a su vez los cables de conexión y resto de elementos que se incluyen en el paquete.

Cuando colocamos todos los elementos que nos llegan con la compra de los nuevos Razer Kraken V4 Pro vemos que, junto al hub y los auriculares, tenemos una bolsa de transporte, tres cables de acabado textil trenzado y una guía rápida de uso. Todo ello viene en un acabado de color negro, a juego tanto con los auriculares como con el hub.

De inicio no vemos micrófono en el pack, y es que en este modelo la marca ha montado un sistema de micrófono retráctil que se esconder en la copa izquierda, lo que hace que solo lo tengamos visible cuando lo estemos utilizando.

Diseño gaming para los auriculares premium de Razer

Los Razer Kraken V4 Pro son los auriculares premium de la marca y eso es algo que se nota con solo mirarlos y tocarlos. La compañía ha sido fiel a un diseño distintivo de este familia de auriculares, pero realizando diversos cambios para adaptarlo a las exigencias actuales de los usuarios. Es una puesta al día que busca mantener el espíritu pero dejando claro que se ha renovado a fondo.

Con un peso de 397 gramos los nuevos auriculares de Razer cuentan con un diseño de diadema con un sistema de bisagras que permiten un giro de 90 grados, lo que nos permite colocarlos sobre nuestro pecho cuando no los estemos usando entre partida y partida. En la parte externa de las copas se sitúa el logo de la marca rodeado de un aro mallado, teniendo en ambos casos un sistema de iluminación Chroma personalizable.

Razer ha ampliado esta zona de iluminación RGB con respecto a sus predecesores para que sea más visible y llamativa, contando ahora en total con 9 zonas de iluminación, aunque esto es algo que podemos apagar si lo preferimos. Con el fondo negro se ve más visible y destaca, aunque el mallado que lo rodea impide que sea excesivo y le da un aire «difuminado«.

En la parte interna de las copas contamos con una gruesas almohadillas de espuma viscoelástica que se cubre con piel sintética. Con unas medidas de 62 x 45 mm rodean nuestro oído para lograr un buen aislamiento pasivo, pero que además hacen que sea muy comodo el llevarlos puestos durante jornadas intensas de juego.

Detrás de estas almohadillas se esconde los transductores Triforce de biocelulosa de 40 mm de Razer, una evolución de sus controladores que nos prometen una frecuencia de respuesta que va desde los 20 Hz hasta los 28 kHz con una impedancia de 32 Ω y una sensibilidad de 98 dB/mW. Estos drivers quieren alejar el habitual concepto de que unos auriculares gamer no pueden ofrecer un audio digno de un audifilo, siendo una de las grandes apuestas de la marca.

La parte externa de la diadema mantiene su apuesta por la piel sintética que se ve decorada con el nombre de la marca de forma que con su acabado liso destaque sobre la rugosidad de la piel. En la parte interna tenemos un acabado de espuma viscoelástica que se rodea de una envoltura textil que minimiza el sudor y hace que, incluso en días calurosos, no haya tenido problemas con el sudor.

Uno de los puntos que denotan la calidad de estos auriculares es la zona de las bisagras. Con una construcción metálica y unos cables de unión en espiral, nos permite adaptar el diámetro de la diadema, pero también girar las copas hasta 90 grados. Así se consigue en buen ajuste personalizado para cada usuario.

Me ha gustado mucho que un punto tan critico como este deje tan buena sensación de calidad. Razer se ha volcado en lograr que, lo que por norma suelen see los puntos débiles de cualquier auricular, dejen una impresión de resistencia y durabilidad que nos confirman que estamos ante un producto premium pensado para acompañarlos mucho tiempo.

Como ya hemos comentado, el micrófono de los Razer Kraken V4 Pro se esconde en la copa izquierda, usando un sistema retráctil que permite esconderlo cuando no lo necesitemos. La parte buena es que se nota que es de muy buena calidad y construcción, quedando muy disimulado en el diseño del auricular. La mala es que este tipo de sistema siempre dejan más dudas que los fijos, algo que por desgracia sobre el paso del tiempo puede decir si Razer acierta o no con esta elección.

Tenemos un micrófono unidireccional que nos da una respuesta de frecuencia de 100 Hz hasta 10kHz, con una sensibilidad -42 ± 3 dB que lo hacen idóneo para lograr una correcta comunicación durante nuestras partidas, de forma que nuestros compañeros nos escuchen de forma clara y nitida en el fragor de la batalla.

Los controles, puertos y LED de estado se sitúan en el contorno de la copa, muy accesibles y sencillos de distinguir al tacto, aunque lo cierto es que muchas veces es más sencillo e intuitivo usar el hub de control, algo de lo que vamos a hablar a continuación ya que es sin duda uno de los elementos diferenciadores de este dispositivo.

Un Hub con pantalla OLED que cambia las reglas del juego

Junto con los auriculares, en el paquete de los Razer Kraken V4 Pro encontramos una pequeña caja de color negro y un gran dial en su frontal. Se trata de un hub, un sistema de control integrado desde el que podemos controlar casi cualquier opción de configuración de los auriculares. Además sirve como sistema de conexión que nos permite conectarlo al PC y consolas compatibles.

Razer despunta con este pequeño accesorio que cambia de forma radical nuestra forma de usar los auriculares. Lo hace incluyendo en su frontal una pantalla OLED que nos permite ver las distintas opciones de configuración que estemos personalizando en un momento determinado. Si bien esta pantalla es monocromo, su acabado brillante hace que refleje de forma destacada la iluminación de dispositivos cercanos, en mi caso de la alfombrilla Razer Goliathus Extended Chroma.

En la parte frontal de este accesorio tenemos un botón que nos permite cambiar entre las distintas opciones de configuración con una sola pulsación, mientras que su dial nos permite ir cambiando las mismas, ya sea rotando entre perfiles hápticos, subiendo el volumen o regulando la vibración háptica.

En los laterales de este hub tenemos un patrón de líneas horizontales que hacen difícil que las marquemos de huellas, pero que personalmente no veo que aporten mucho al diseño. Soy más de líneas limpias y este acabado no me ofrece nada.

En la parte posterior encontramos tres puertos: dos USB C y un puerto auxiliar de audio. Con ello podemos usar este Hub para conectar nuestros Razer Kraken V4 Pro al PC y consolas PlayStation 5 mediante los puertos USB C correspondientes, mientras que el puerto auxiliar lo podemos usar para conectar otros dispositivos como consolas Xbox Series. No hay cable de corriente, ya que basta con conectar cualquier de los puertos USB C para que el concentrador obtenga de él la energía necesaria para funcionar. LA conectividad con los auriculares se realiza mediante conectividad inalámbrica de 2,4 GHz que nos asegura una latencia ultrabaja y una extraordinaria estabilidad y calidad de la señal.

Un detalle importante es que los Razer Kraken V4 Pro cuentan con conectividad Bluetooth 5.3, es decir que podemos conectarlo mediante este sistema de conectividad al móvil o cualquier equipo con este tipo de conectividad. En este caso contamos con compatibilidad con los códecs AAS y SBC que encontramos en la mayoría de smartphones del mercado.

Lo cierto es que el pequeño tamaño de este hub no es óbice para que sus funciones sean amplias. Para empezar podemos configurar la pantalla para que nos muestre un fondo de pantalla personalizable, incluyendo animaciones y textos. Sin embargo el meollo de este dispositivo radica en sus opciones de configuración, las cuales nos permiten prescindir de los controles de los auriculares e incluso en buena medida de las opciones de configuración via software con Synapse 4.

A continuación os dejo una serie de fotografías para que veáis las opciones de configuración de este controlador. Entre otras podemos regular el sonido, los perfiles hápticos, la intensidad del sistema háptico, regular el sistema sidetone, cambiar entre perfiles del ecualizador, cambiar entre la fuente de sonido de las que tengamos conectadas, etc. Todo ello de una forma mucho más visual y precisa que si lo hiciéramos con los controles de los auriculares, y más rápido que tener que recurrir a usar Synapse. Por supuesto no están todas las opciones disponibles con Synapse, pero podemos decir que si están las que solemos usar con más frecuencia.

Synapse 4, una evolución que mejora en rendimiento y usabilidad

Junto con la nueva tanda de dispositivos como los Razer Kraken V4 Pro la compañía nos presentó su nueva generación del software encargado de controlar sus dispositivos: Synapse 4. No es solo una mejoría del sistema, sino que se trata de una completa reformulación del mismo.

Razer era consciente de que Synapse se estaba convirtiendo en un monstruo devorador de los recursos de nuestros PC. Su solución ha pasado por dividir Synapse en dos: una parte encargada de configurar los dispositivos y otra encargada de centrarse en el sistema de iluminación Chroma. Así ahora podemos ejecutar Synapse 4 sin que ello implique hacer lo mismo con las opciones de chroma. La idea es que esto haga que el programa consuma menos recursos y no afecte al rendimiento de nuestro equipo.

Lo cierto es que los principales cambios están tras el telón, ya que salvo un cambio de diseño que ahora nos muestra los distintos dispositivos en pestañas, lo cierto es que las opciones de configuración apenas han variado. Cambiar la configuración del sistema de sonido de audio estero a usar el sistema THX de audio espacial es tan sencillo como ir a la pestaña de sonido y elegir la escogida, escoger el perfil de ecualización supone el mismo esfuerzo e incluso crear nuestro propio perfil con un sistema de diez bandas es cosa de niños.

Una cosa a destacar de este software es que permite usar perfiles preconfigurados para una enorme variedad de juegos como FFXVI, Valorant o COD, aunque también podemos personalizarlos para que se activen cuando estemos disfrutando de estos juegos

Como siempre Synapse se adapta al dispositivo que tengamos conectado. En este modelo los principales cambios en el programa los representan las pestañas del sistema háptico y OLED, siendo el primero el que nos deja escoger como queremos que funcione el sistema de vibración háptica y el segundo el que nos permite configurar el HUB de control.

Como hemos mencionado la iluminación Chroma cuenta ahora con su propio apartado, el cual se inicia cuando escojemos configurar la iluminación Chroma de Razer. Aquí ahora tenemos una interfaz más completa e intuitiva, con distintas opciones de efectos que podemos escoger mediante unos iconos, aunque si porfundizamos en las opciones de configuración, veremos que se mantiene muy similar a lo que ya veíamos en su predecesor. Eso sí, la configuración Sensa HP Haptics se ha incluido en el software Chroma, algo un poco confuso pero que indica la intención de Razer de conjugar ambos sistemas para ofrecer una experiencia más inmersiva.

Calidad de sonido

Razer ya hecho muchos esfuerzos por desterrar ese mito de que unos auriculares gaming estaban destinados a destacar determinados sonidos como los que nos dan las explosiones, todo supuestamente para lograr un audio más efectista y adecuado para jugar. Con los drivers Triforce busca presentar unos auriculares que den un mejor trato a cada sección del espectro sonoro. A grandes rasgos quiere ofrece un driver capaz de reproducir de forma más precisa tanto los graves como los agudos y medios.

En estos auriculares se opta por usar los nuevos TriForce con diafragma de biocelulosa ultrafino de 40 mm, los cuales ofrecen un sonido más preciso y detallado, con un espectro sonoro más amplio que no solo ofrezca unos graves potentes, sino que lo hace con una mayor calidad y menor distorsión de todo el abanico sonoro. Razer ha ajustado los drivers para tratar de forma individual las frecuencias altas, medias y bajas de forma que el sonido sea más rico y de mayor calidad.

La experiencia demuestra que han avanzado y mucho, siendo posiblemente de los auriculares gamer que mejor sonido me han ofrecido, situándolos muy cerca de los Bang & Olufsen Beoplay Portal.

La calidad del sonido viene acompañada de la tecnología THX Spatial Audio, la cual no termina de convencerme para cuando escucho música, pero que cuando jugamos marca un antes y un después. Esta tecnología de sonido envolvente te transporta al epicentro de la acción en el juego para que sitúes cada pisada, cada golpe o chasquido de forma que nada pueda sorprenderte. Responder a un disparo es mucho más rápido cuando el sonido te delata con precisión de donde viene.

Tecnología háptica Razer Sensa HD

La primera vez que probe los Razer Kraken V4 Pro lo hice junto con la nueva alfombrilla háptica de la marca en un claro ejemplo de hacia donde se encamina la marca con la tecnología háptica Razer Sensa HD. Se trata de un sistema que ya hemos visto muchas veces en mandos y otros auriculares, pero que de la mano de Razer quiere acercarnos más a un futuro al estilo Ready Player One.

Los Razer Kraken V4 Pro cuentan con motores hápticos que hacen que los auriculares vibren en función de como los tengamos configurados. Podemos hacer que suene en función de sonido, ya sea siguiendo el ritmo o indicándonos la procedencia del mismo. Tan importante es en este dispositivo esta tecnología que cuenta con un botón dedicado en los controles, lo que nos permite regularla o incluso apagarla.

Gracias a su SDK Razer permite que los desarrolladores implementen la tecnología Sensa HD en sus juegos. Actualmente lo tenemos en el nuevo Final Fantasy XVI, Hogwarts Legacy o Silent Hill 2 entre otros. Esto hace que la acción del juego se haga sentir directamente en nuestra cabeza, lo que puede ser tan emocionante como perturbador, pero que por fortuna han tenido a bien dejarnos escoger el nivel de vibración que deseamos sentir.

Autonomía

En función de como usemos los Razer Kraken V4 Pro tendremos una autonomía distinta, ya que no solo depende de como conectemos los auriculares, ya sea por cable, inalámbrica o por bluetooth, sino que sobre todo afecta si usamos la iluminación RGB y el sistema de vibración háptica. Del mismo modo el nivel de estas dos afecta a la autonomía, por lo que su autonomía varia desde las 13 horas con la iluminación y el sistema háptico conectados, hasta las 50 horas si desconectamos ambos. Si por encima optamos por usarlo solo mediante bluetooth esta cifra casi se duplica, aunque esto es complicado de que suceda ya que no tendría sentido comprar este dispositivo para este uso.

Si me guía por la experiencia principal que le he dado, con la iluminación y sistema háptico a media intensidad y conectado al PC, puedo decir que no he bajado de las 25 horas de uso. Sin embargo esta cifra crece considerablemente con solo deshabilitar la iluminación o el sistema háptico. Todo depende de como quieras usarlo, de que quieras priorizar o de cuales son tus necesidades de uso.

Conclusiones

Razer ha querido despuntar con unos auriculares donde directamente ha tirado la casa por la ventana, metiendo en ellos todo el potencial que la marca ofrece y más. Los controladores Triforce, la iluminación Chroma y el sistema háptico son mejoras que ya esperaba, por lo que no me ha sorprendido la mejoría en este apartado. Sin embargo el añadido del hub con pantalla OLED ha sido un extra que ha marcado la diferencia.

Los Razer Kraken V4 Pro son tremendamente cómodos a pesar de sus dimensiones y peso, muy agradables de llevar puestos incluso tras horas de juego. Los controles que se incluyen en las copas son solo el colofón de un buen diseño que se cierra con un micrófono que se oculta para que podamos usarlos incluso en exteriores.

La marca de las tres serpientes quiere marcar el sendero del juego inmersivo, no solo con un sistema de iluminación que podemos unir a otros como Philips Hue, sino también con un sistema háptico que no solo es el mejor del mercado, sino que lo es por la integración con juegos como Final Fantasy XVI. El resultado es un sistema que en si ya sorprende, pero que cuando lo conjuntamos con el juego adecuado simplemente alcanza nuevas cuotas de juego. Sin embargo no siempre es agradable, hay veces en las que puede ser excesivo o simplemente preferimos no usarlo, para lo que Razer nos da un botoncito que basta apretar para ponerle fin. Esta si lo quieres y lo quitas cuando no, todo a un solo toque.

El Hub de control con su pantalla OLED es más que un simple extra, es una nueva forma de controlar nuestra experiencia de juego, un accesorio que remarca el hecho de que tenemos entre manos un producto premium, algo que se refleja en su precio por desgracia. Si eso no es problema para tí, los Razer Kraken V4 Pro son sin duda unos auriculares que llevarán tu experiencia de juego a un nuevo nivel.

Razer Kraken V4 Pro

449.99 EUR

9.4

Valoración

9.4/10

Pros

• Calidad de sonido
• Sistema háptico inmersivo
• Un hub de control que le da un plus extra
• Amplia conectividad

Contras

• Precio

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