Recientemente Logitech lanzó una nueva serie de dispositivos dentro de la gama a la que ha llamado Aurora Collection, productos pensado especialmente para el público femenino, pero no solo para ellas lo que hace que la marca lo denomine «inclusivos». Se trata de un conjunto de dispositivos que de momento se componen de los teclados Logitech G715 y G713, el ratón G70 y los auriculares G735, además de distintos accesorios con los que personalizarlos. De este conjunto ha caído en nuestras manos para poder probarlo el teclado Logitech G715, cuyo diferencia con respecto al G713 es que este último es cableado y el modelo con el que contamos dispone de conectividad inalámbrica.
Como todos los componentes de Logitech G estamos ante un teclado gaming, pero con una estética que busca hacerlo más inclusivo, lejos de los habituales diseños duros y de aspecto más agresivo que normalmente inundan el mercado. Tras unos días probándolo ahora os contamos nuestras impresiones, tanto en el aspecto estético como sobre todo en el apartado de rendimiento.
Especificaciones
- Dimensiones: 370,6 x 157 x 37,2 mm
- Formato: TKL de 87 teclas
- Peso: 976 g
- Conectividad:
- Cableado vía carga USB-C
- Inalámbrica LightSpeed de 2,4 GHz o Bluetooth
- Interruptores: mecánicos RGB táctil o lineales (Según idioma escogido)
- Keycaps: PBT de doble moldeado
- Teclas multimedia incluido control giratorio de volumen
- Iluminación de perímetro con 16 LED bajo la placa
- Batería: polímero de litio con 25 horas de autonomía
- Reposamuñecas: incluido
- Software: Logitech G Hub
Unboxing
Logitech hace una apuesta por los colores claros con la colección Aurora, algo que refleja en el packaging con un acabado claro donde nos muestra la imagen del dispositivo y destaca en letras de gran formato el modelo del teclado. También deja ver algunas de sus características como el que disponible de un teclado con la distribución en español, interruptores GX Brown táctiles, la conectividad inalámbrica LightSpeed y el sistema de iluminación LightSync.
Aquí podemos ver una de las señas de identidad de esta colección, con una iluminación en tonos pasteles que va en degradado desde el rosa al azul, no sabemos si como un guiño a la habitual distinción de sexos con el que hacer gala de su intención inclusiva.
En la parte trasera de esta caja Logitech entra a hablar en mas detalle, o mas bien en mas idiomas de las principales características, aunque añadiendo detalles como su autonomía de 25 horas o la posibilidad de extraer el cable para usar el teclado tanto cableado como de forma inalámbrica.
Ya con su caja abierta vemos el esfuerzo en ser lo más amigable posible con el medioambiente en el packaging, hasta el punto de añadir algunas instrucciones en la tapa de la caja para evitar tener que recurrir a añadir más «folletos» en su interior. Aquí también en una esquina como se menciona la posibilidad de personalizar el teclado con algunos accesorios de la gama Aurora, algo de lo que hablaremos más adelante.
También vemos que todo el conjunto se ha protegido, no con una bolsa de plástico como suele ser norma, si no con una envoltura que por el tacto parece algún derivado del papel. Un buen detalle que esperamos siga avanzando en la industria.
Cuando sacamos todos los elementos de su caja nos encontramos sobre la mesa de trabajo con un teclado en formato TKL, una pegatina con la G propia de la marca, varios folletos, un cable USB A a USB C, un extensor USB C a USB A y un reposamuñecas con forma de nube. Lo cierto es que no deja de ser curioso que un teclado «inclusivo» utilice algo que se podía considerar estereotipado del genero femenino como lo que representa una nube, pero bueno, lo cierto es que cuando la enseñe a mi entorno la expresión que mas se uso fue «cuqui» algo que por cierto suscribo. El reposamuñecas del Logitech G715 es realmente cuqui.
Un diseño que quiere romper con la norma
Si miramos el espectro de accesorios gamer tenemos dos aspectos principales: la habitual gama de productos gamer de colores oscuros o muy llamativos y líneas agresivas, o bien productos muy enfocados al publico femenino que tira de los habituales detalles que se solían asociar al genero como el color rosa chillón y detalles tipo Kawaii como incluir figuras tipo Hello Kitty o las orejitas que hemos llegado a ver en algunos auriculares. Por supuesto ambos estilos son totalmente repetibles y tienen su publico al que les encanta, pero Logitech ha querido tirar por un sendero diferente con su Colección Aurora (salvo en su reposamuñecas).
Con la Colección Aurora Logitech quiere ofrecer productos de formas y colores más suaves, que gusten a cualquier genero, a la vez que ofrecen una alternativa a lo que tenemos en el mercado. En el caso del teclado Logitech G715 eso se traduce en un producto donde es difícil encontrar ángulos, con una buena iluminación pero que busca acentuar y no se el protagonista en nuestro setup.
Con un diseño en color blanco con formato TKL de 87 teclas, es decir que prescinde del bloque numérico, el Logitech G715 cuenta con unas dimensiones de 370,6 x 157 x 37,2 mm y un peso de 976 gramos. Su diseño deja unos buenos márgenes en su contorno, pero todos ellos con un acabado redondeado que suaviza el diseño. El color blanco se acentúa con unas teclas de color violeta que encontramos en la parte superior. Estas teclas nos brinda acceso al modo juego, cambiar de modo de conexión inalambrica o controlar la iluminación, aunque también contamos con cuatro controles multimedia y un rodillo para controlar el volumen del audio del ordenador. Este rodillo por cierto también cuenta con un acabado con tono violeta.
El reposamuñecas en forma de nube es flexible, siendo poco más que acolchado, sin una base firme que lo sostenga y dejando esto en manos de la propia firmeza de los componentes usados. Lo bueno que tiene esto es que no hace falta pies antideslizantes y que toda la pieza en si lo es, algo que evita que se mueva y que es algo a tener en cuenta al no contar con ningún otro sistema de «unión» al teclado.
Si le damos la vuelta al teclado vemos que aquí si contamos con seis grandes patas de goma que ayudaran a la estabilidad y agarre del teclado. Si nos fijamos en el contorno veremos que este cuenta en casi todo el perímetro con una línea traslucida. Esta zona es la iluminación RGB de 16 LED con la que Logitech hace que el teclado parece que levite sobre un haz de luz cuando lo usamos.
En la parte central de esta base tenemos un rebaje que no es ni más ni menos que el espacio que Logitech ha usado para incorporar un puerto donde podemos conectar y transportar el adaptador con el cual podremos disfrutar de conectividad inalámbrica de 2.4 Ghz al conectarlo al PC o portátil con el que lo vayamos a usar.
En los extremos superiores de la base del Logitech G715 encontramos dos patas con dos alturas extras con la que podemos alzar el teclado 4 u 8 grados, dándonos en total tres alturas entre las que elegir para usar este teclado.
El Logitech G715 cuenta con un contorno redondeado, poco habitual en un teclado gamer pero que es realmente agradable tanto visualmente como al tacto. Sus teclas se alzan ligeramente sobre la base y esto es así por algo más que simple diseño y es que una de las opciones de personalización que nos ofrece Logitech es poder comprar una serie de placas de color verde, blanca o rosa que superpondremos sobre el teclado para cambiar su aspecto. Junto a ello también contamos con teclas en los mismos colores, que del mismo modo podremos comprar para personalizar aún mas el teclado. Respectivamente el precio de estos accesorios es de 20,99 € y 41,50 €.
En el contorno del teclado encontramos en la parte trasera el puerto USB C al que podremos conectar el cable de 1.8 metros tanto para cargar la batería como para usarlo de forma cableada. También encontramos un deslizable que nos permite apagar el teclado. En ambos casos se ha mantenido el estilo de diseño de acabados redondeados de los que hace gala el Logitech G715.
En general este teclado desprender una gran sensación de calidad, tanto en la propia construcción y acabados como en los materiales usados. Esto incluye las teclas que ha sido construidas con PBT de doble inyección para asegurarnos de que no habrá síntomas de desgaste ni tendremos que padecer el borrado de las fuentes. Bajo estas keycaps encontramos en nuestro caso unos interruptores cuyo color marrón no deja duda del modelo. En este caso los interruptores mecánicos GX Brown nos ofrecen una respuesta táctil que indefectiblemente asociamos con un teclado gamer de pura cepa. Estos switches cuentan con iluminación RGB individual, pudiendo personalizarlo con efectos y colores al gusto.
Logitech G Hub: el punto de personalización
Logitech nos ofrecer su habitual software para la gama G, el Logitech G Hub. Con el podremos crear perfiles y personalizar el teclado, con la opción de remapear las teclas de función, algo que podremos hacer doblemente gracias a la tecla de función. Entre las opciones que encontraremos tenemos el poder añadir accesos directos a programas o comandos, crear macros o acceder directamente a distintos apartado del sistema. Lo cierto es que me hubiera podido contar con la opción de poder mapear cualquier tecla, o al menos las multimedia, pero en este caso Logitech nos limita esto a las teclas de función.
Este software también nos permite personalizar la iluminación y su comportamiento, escogiendo entre distintos efectos disponibles en función de nuestros gustis. Estas opciones nos permiten no solo escoger el color de la iluminación, si no su saturación y la velocidad de los efectos, tanto a nivel de teclas como de la iluminación perimetral.
Experiencia de uso
Llega el momento de hablar de nuestra experiencia de uso, del comportamiento de este teclado inclusivo y que impresiones nos ha dejado en estos día de uso. Comenzaremos por la impresión de construcción y es que en este aspecto no tenemos nada que reprocharle a Logitech. A pesar del refinamiento del diseño estamos ante un teclado que rezuma calidad en sus construcción y acabados, notándose muy firme y resistente en las manos, algo que su peso de casi un kilo sin duda potencia.
La iluminación del G715 no deslumbra en potencia, pero si en resultado. El aspecto que le da nos hace pensar en tonos pasteles, colores que a pesar de su viveza siempre se sienten como suavizados y que aportan equilibrio con el diseño general. Si bien se puede personalizar y así lo he hecho durante las pruebas, lo cierto es que al final he retornado a la configuración original ya que me da la impresión que es la que mejor le sienta.
Un aspecto donde era tremendamente escéptico era con su reposamuñecas. Al fin y al cabo no es mas que relleno y ni siquiera tiene una base, pero Logitech me ha dado en todos los dientes al demostrar que incluso sin eso podemos tener un cómodo accesorio donde reposar las manos durante las jornadas de juego o trabajo. Lo hace además controlando muy bien el tema del sudor, algo que en estos días de calor extenuante que estamos sufriendo no es nada sencillo.
En el tecleo encontramos unas keycaps ligeramente rugosas, solo lo justo para un mejor tecleo, pero que se nota y se agradece. A esta buena experiencia le añadimos unas teclas multimedia bien colocada y un rodillo que nos permite controlar el volumen del audio de forma precisa o subirlo de golpe con un movimiento de dedos. Además aporta algo de color al conjunto.
Cuando lo usamos de forma inalámbrica Logitech nos promete unas 25 horas de autonomía, algo que sin información oficial parece que se refiere al uso de la conectividad LightSpeed de 2.4 GHz con el conector USB y la iluminación activada. Aún así lo cierto es que hemos superado ampliamente esa cifra e incluso el propio programa Logitech G Hub nos muestra una autonomía de 38 horas, algo que se acerca mucho más a la experiencia que hemos tenido.
Por otro lado lo bueno que tiene el poder contar con la opción de uso cableado es que mientras lo hacemos la batería se va cargando, por lo durante el tiempo que lo usamos para trabajar o jugar, ya tendremos la batería cargada para volver al modo inalámbrico.
Si nuestro PC está colocado de tal forma que el conector inalámbrico quede lejos del Logitech G715 o con obstáculos por en medio, esto puede afectar al tiempo de respuesta y la estabilidad, algo que a la hora de jugar a ciertos títulos puede marcar la diferencia entre ganar o perder. Para evitar esto el Logitech G715 cuenta con un extensor que usando el cable de carga nos permite acercar el conector al teclado. Una solución sencilla pero muy eficaz.
Todo teclado basa la experiencia en los interruptores que use y en este caso hemos contado con los interruptores mecánicos GX Brown táctiles. Unos interruptores con un vástago en forma de cruz cuya iluminación se sitúa en la parte superior. Al contrario que otros modelos no cuenta con estabilizadores, pero aún con ello en el tiempo que lo he probado no he notado problemas de «baile» al teclear, si no más bien una respuesta muy rápida con un claro feedback sonoro. Estamos ante la mesura en lo que a interruptores se refiere, manteniendo las sensaciones de teclado mecánico que los interruptores lineales no siempre ofrecer, pero sin llegar a los niveles de los teclados clicky. Esto les hacen indicados para quienes requieran un teclado para jugar, pero que también les permita trabajar durante una jornada de oficina.
Conclusiones
El Logitech G715 es un teclado pensado para los que están buscando algo diferente, un diseño fresco que sea más inclusivo y que se adapta tanto al público femenino como a todo el que busque alejarse de los diseño tradicionalmente «gamers» por algo más estilizado de tonos suaves. El resultado es un teclado con una excelente respuesta, rápido a la hora de detectar nuestro tecleo y con la características sensación que proporciona un teclado mecánico gracias a sus switches GX Brown.
Su excelente construcción y acabados se completan con una iluminación por tecla y perimetral, que sin un brillo mesurado le da un aspecto jugón pero sin estridencias. Por contra se ve algo limitado en la forma de configurarlo ya que solo se nos da acceso a un total de 12 teclas de las 87 con las que cuenta, algo que con un precio de 209€ deberían dejar a elección del usuario.
Sobre la batería tenemos una buena autonomía que ha superado lo que nos muestran las especificaciones, algo que no es habitual, pero que ha sido una muy agradable sorpresa. Por su parte el comportamiento de la conectividad inalámbrica LightSpeed ha sido impecable, tanto en tiempos como en estabilidad, algo que ya esperábamos dado el historial de pruebas con dispositivos similares de la marca por lo que si es posible os aconsejamos usar este sistema antes que la conectividad bluetooth.
Uno de los aspecto que destaca la marca de este terminal es su personalización, aunque lo cierto es que las opciones se ven limitadas a las placas superiores y a las teclas, algo que por otro lado suele ser habitual en cualquier teclado dado que implica tener que comprar las teclas por lo que no me parece algo tan distintivo..
Con todo el Logitech G715 es un teclado que me ha gustado mucho, incluso con su peculiar reposamuñecas y a pesar de que hubiera agradecido poder configurar todas las teclas, pero que hubiera estado mejor con un precio que bajara del listón de los 200€. A pesar de ello ofrece una alternativa fresca que seguro que a más de una y más de uno estarán deseosos de llevarse a casa, más aún si se incluye en un pack con el ratón o los auriculares de la misma colección que ofrezca el mismo estilo de diseño.
Logitech G715
209.00 EUR
Pros
- Diseño inclusivo que ofrece una alternativa fresca en el mercado
- Conectividad 2.4 Ghz, Bluetooth y cableado
- Excelente respuesta de sus interruptores
- Iluminación por tecla y perimetral
- Reposamuñecas incluido
Contras
- Precio elevado
- Opciones de configuración de teclado limitado
- Los accesorios de personalización no aportan novedad
