Elon Musk y la locura del sello de verificación de Twitter

Una de las formas que Elon Musk quería usar para monetizar su compra de Twitter era cobrar por la marca de verificación de cuentas al exigir que estas estuvieran suscritas a Twitter Blue. Si bien es algo que ya se había anunciado, no fue hasta hace unos días que miles de cuentas verificadas vieron perder su sello de un día para otro.

Hace un par de días cuentas de importantes medios, grandes compañías y personajes tan conocidos como el propio Ibai Llanos, vieron como desaparecía el sello de verificación de sus cuentas. Este movimiento pretendía forzar a estos a comprar una suscripción a Twitter Blue, un plan que se ve que no salió como Musk había pensado.

Pocas horas después de comenzar esta ola de “desverificaciones” algunas de las cuentas vieron retornas su sello, aunque no habían pagado la suscripción. Cuentas como la de Stephen King, muy critico con la deriva de la red social, se apresuraron a confirmar que el sello había retornado sin que se hubieran suscrito ni dado su número de teléfono para hacerlo.

My Twitter account says I’ve subscribed to Twitter Blue. I haven’t.
My Twitter account says I’ve given a phone number. I haven’t.

— Stephen King (@StephenKing) April 20, 2023

Con el paso de las horas se fue dando a conocer que muchas de las cuentas con más de un millón de seguidores o que se consideran de alta relevancia volvieron a tener el sello de verificación, rumoreándose que el propio Elon Musk se hacía cargo del pago. Sin embargo en las ultimar horas la cosa ha ido a peor y es que ha comenzado a aparecer el sello de verificación en cuentas de personajes famosos ya fallecidos como Michael Jackson, Kobe Bryant o Chadwick Boseman.

Estos sucesos ha hecho surgir variedad de memes y reacciones que se preguntan que sentido tienen tantos vaivenes que no hacen más que devaluar el sentido de este sello. Elon Musk parece que no tiene un plan concreto que seguir con Twitter, adaptándose al momento a las circunstancias y estado de la opinión pública. Esto genera aún mas dudas sobre el futuro de Twitter, su camino y si ha perdido el espíritu que la hizo la red social preferida por millones de usuarios.