Apple ha renovado sus auriculares y nos presenta sus nuevos AirPods de 3.ª generación con un diseño renovado para mejorar su ajuste, sonido espacial con ecualización adaptativa, resistencia al agua y una autonomía que ahora alcanza las 30 horas con el estuche de carga.

AirPods de 3.ª generación

Los nuevos Airpods de 3ª generación estrenan un nuevo diseño con ajuste anatómico que facilita su colocación al tiempo que dirige el sonido de forma más precisa hacia el oído. Visualmente la nota más llamativa es un menor tamaño en el vástago, lo que genera la impresión de un dispositivo más compacto que su predecesor. Este diseño además cuenta con certificación IPX4 que les hacen resistentes al agua y al sudor.

En el interior de estos nuevos auriculares tenemos un transductor a medida con amplificador de alto rango dinámico que nos prometen unos graves potentes y unos agudos nítidos y limpios. Nuevamente Apple no ha incluido cancelación activa de ruido, aunque por contra usan un sistema de audio computacional que incorpora ecualización adaptativa y audio espacial con seguimiento dinámico de la cabeza que crea una experiencia tridimensional. Además cuenta con micrófono recubierto con malla acústica para reducir el sonido del viento, mientras que el uso de códec AAC-ELD ofrece una calidad de voz Full HD.

AirPods de 3.ª generación

Esta nueva generación de los auriculares de Apple viene con autonomía de hasta 30 horas, si contamos el estuche de carga, y carga rápida que con solo cinco minutos permite hasta una hora de autonomía. Además el estuche de carga es compatible con la carga MagSafe de Apple.

Precio y disponibilidad

Los AirPods 3.ª generación saldrán a la venta por 199 € a partir del martes 26 de octubre en el habitual color blanco de los auriculares de Apple, y como es norma en la marca si los compramos en la tienda de Apple podremos incluir un grabado con emojis, texto y números.

Sobre El Autor
Pedro A.
Editor Jefe, enamorado de mi familia y de la tecnología en cualquiera de sus formas, aficionado a la Sci-Fi y a mirar al cielo nocturno. Tratando de vivir la vida sin remordimientos.