Sonic Boost 210

El mercado de los altavoces de pequeño tamaño es mucho más amplio de lo que muchos pensamos y no son pocos los usuarios que escogen este tipo de productos por su potencia y portabilidad. Motorola ha presentado un nuevo producto en esta linea producido por Binatore y que además incluye compatibilidad con los principales asistentes digitales del mercado.

Sonic Boost 210

El nuevo altavoz de Motorola se ha lanzado bajo el nombre de Sonic Boost 210. Se trata de un dispositivo de unas dimensiones reducidas 8x8x3,5 cm y un peso de solo 122 gramos, mientras que su batería nos promete 4 horas de música. Es decir que cabe en un bolsillo ancho o una mochila sin problema. Si lo preferimos podemos llevarlo colgado ya que cuenta con una correa propia.

Entre sus especificaciones encontramos Bluetooth 4.1, un conector Jack 3.5 mm y un altavoz integrado, este es imprescindible para poder hacer uso de su caracteristica más destacada, la compatibilidad con Alexa, Google Assistant o Siri. En este punto debemos aclarar que se trata de un dispositivo que se lanza al mercado por solo 24.99€, un rango de precios donde no es habitual ver soporte para asistentes digitales.

Sonic Boost 210 Red

Inalámbrico, compacto y colorido

Como suele ser habitual en este rango de dispositivos, el color es una parte importante ya que suele ser objetos pensados para momentos alegres, de fiesta con los amigos o simplemente para disfrutar de nuestra música preferida. El Sonic Boost 210 viene con colores blanco, amarillo, azul, negro y un fuerte rojo muy acorde a las fiestas navideñas.

Entre el software que incorpora tenemos habilitada la aplicación móvil Hubble Connect for VerveLife, que podemos descargar para iOS y Android, la cual nos sirve para  localizar de manera precisa el altavoz a través de la última ubicación del dispositivo.

El dispositivo ya está a la venta y puedes hacerte con él en Amazon.

Sobre El Autor
Pedro A.
Editor Jefe, enamorado de mi familia y de la tecnología en cualquiera de sus formas, aficionado a la Sci-Fi y a mirar al cielo nocturno. Tratando de vivir la vida sin remordimientos.