Comienza el año y fiel a su cita en Las Vegas llega CES en su edición 2018. En esta feria los grandes fabricantes de electrónica se engalanan para mostrar las tendencias del presente año y algunos conceptos y prototipos que pueden llegar a cristalizar en productos finales con el paso del tiempo. Un buen ejemplo es la pantalla OLED de 18 pulgadas enrollable que LG presentó hace 4 años y es que fruto de ese embrión LG ha presentado su primera televisión OLED de 65 pulgadas con 4K de resolución totalmente enrollable y escamoteable cuando no se quiere usar.
Esta innovación real permitiría una integración del panel en entornos mucho menos agresiva, y gran comodidad en transporte y almacenaje por poner unos ejemplos. De momento no tenemos muchos más detalles de este dispositivo aunque se sabe que la pantalla será el corazón de una base que alojará todas las conexiones necesarias y a la propia pantalla una vez enrollada.
La versatilidad de la pantalla permitirá que sólo se muestren imágenes en una parte de la pantalla pudiendo usarla como centro de notificaciones o de información como os mostramos a continuación:
Paneles 8K, pero sólo para unos pocos
Por otro lado, los coreanos no dudaros en sacar pecho al presentar su impresionante nuevo panel de 88 pulgadas con 8 K (7.680 x 4.320 píxeles) de resolución haciendo palidecer el televisor que ahora reina en nuestro salón. Esta televisión viste la versión potenciada de la tecnología Crystal Sound que embebe los altavoces directamente desde la propia pantalla. No sabemos el precio oficial de este monstruo, pero tomando como referencia su televisión OLED de 77 pulgadas no debemos esperar precios por debajo de los 17000 euros.
Grandes eventos en mente
Aún con el 4K despegando en nuestro país deberíamos empezar a acostumbrarnos al apellido 8K acompañando a los nuevos televisores. Prueba de ello es que se ha confirmado la emisión de los juegos olímpicos de Tokio 2020 en 8K. Por lo tanto no sería de extrañar que siga esta tendencia en otros grandes eventos en los próximos años.