Tras cuatro décadas desde su lanzamiento inicial Audio-Technica trae de regreso su giradiscos portátil Sound Burger, dispositivo que nos llega actualizado con nuevas tecnologías pero manteniendo la esencia del modelo original.
En su primer lanzamiento este dispositivo agotó sus unidades en solo cuatro días, éxito que esperan repetir en la primavera de 2023, fecha en la que estará disponible esta nueva edición. Para los que no lo conozcan se trata de un equipo asequible pensado para poder disfrutar de nuestros vinilos allá donde vayamos, pero que ahora incorpora nuevas tecnologías de conexión y estabilidad.
El nuevo Sound Burger se nos presenta con conexión Bluetooth y un diseño compacto y ligero que lo convierte en el compañero perfecto para fiestas, picnics o espacios reducidos. Podremos conectarle unos auriculares para disfrutar en solitario de su sonido o bien añadir unos altavoces Bluetooth para que puedas escuchar nuestros vinilos.
Capaz de ofrecer una reproducción de sonido de alta calidad con un sistema de transmisión por correa para reproducir discos de 33-1/3 y 45 rpm, el brazo emplea un nuevo sistema de equilibrio dinámico en el que la presión de la aguja ATN3600L se aplica mediante un resorte para que no se dañe. Este pequeñin cuenta además con un motor de corriente continua de alta precisión que permite mantener una rotación estable e incluye un adaptador de 45 RPM, cable de audio RCA macho de 3,5 mm a RCA dual macho y cable USB para carga USB Tipo-A / USB Tipo-C.
Con una batería que le brinda una autonomía de hasta 12 horas., e Sound Burger estará disponible con un precio de 229 €.
Aún a día de hoy no hay un formato que haga disfrutar a los melómanos como el vinilo, los discos por antonomasia que con el paso de los años van recuperando adeptos y demostrando que el audio «online» aún no puede competir con el sonido que nos ofrece un vinilo. En estas fiestas que se acercan el regalar música es uno de los «seguros» a los que muchos recurren, y nada mejor que escucharlos en un tocadiscos como el que hoy probamos para vosotros, el Pioneer DJPLX-500-K.
El PLX-500-K es un giradiscos de tracción directa que ya lleva unos años en el mercado pero por el que el tiempo parece no pasar, siendo una excelente opción para quienes se adentren en el mundo de los DJs, pero también para cualquier aficionado a la buena música que quiera disfrutar del sonido de sus vinilos en casa. En nuestro caso lo hemos probado junto con los DM-50D BT para conseguir un dúo donde nuestros vinilos puedan hacernos disfrutar.
PioneerDJPLX-500-K, especificaciones:
Medidas: ancho 450 mm, alto 159 mm y fondo 368 mm
Peso: 10,7 kg
Sistema de tracción: Servo tracción directa
Plato: Aluminio fundido con diámetro de 332 mm
Motor: de 3 fases sin escobillas
Sistema de parada: Freno electrónico
Velocidad de rotación: 33⅓, 45, 78 rpm
Ajuste de rango de giro: ±8 %
Fluctuación y trémolo: < 0,15 % WRMS
Relación Señal/Ruido: 50 dB
Potencia de arranque: 1,6 kgf・cm
Tiempo de arranque: Menos de 1 seg (a 33⅓ rpm)
Brazo fonocaptor:
Universal con forma de S
Estructura de soporte por cardán
Tipo equilibrio estático
Sobresaliente: 16 mm
Longitud efectiva: 230,5 mm
Error de lectura: Dentro de los 3°
Ajuste de altura: 6 mm
Ajuste de peso: 0-4 g (1 scale 0.1 g)
Peso (cabezal único): < 9,5 g
Tipo de Cápsula: VM
Puertos:
USB tipo B
Phono/Line (RCA)
Unboxing
El Pioneer DJ PLX-500-K aterriza en nuestras manos en una anodina caja marrón donde pone más que su nombre desvela lo que hay en su interior. Sin embargo se trata solo de una cubierta bajo la cual se oculta el verdadero empaquetado que Pioneer DJ nos ofrece para este giradiscos, un paquete de color negro en cuyo lateral una imagen del dispositivo sirve de fondo, mientras que una franja roja se usa como elemento para destacar el nombre del dispositivo.
Dentro de esta caja encontramos perfectamente protegidos los distintos elementos del PLX-500-K junto con una guía que, si, está disponible en español.
Dentro de esta caja encontramos los distintos elementos que componen este equipo, comenzado como no por el propio giradiscos, en nuestro caso en color negro, pero si lo prefieres puedes encontrarlo también en color blanco.
Con todos los elementos en la mesa nos encontramos con un patinador en color negro con el logo de la marca destacando en color gris, una tapa con soporte para carátulas, el cabezal con cápsula, un peso y un adaptador para singles metálico de aspecto cepillado.
En una caja aparte encontramos el cable de alimentación, un cable USB B a USB A y un cable de Audio conversor (Stereo pin plug hembra y Stereo mini plug macho).
Montaje sencillo sin margen de error
El montaje del Pioneer DJPLX-500-K no difiere del que suele representar este tipo de dispositivos en este rango, donde comenzamos con una base cual lienzo en blanco al que debemos ir añadiendo los distintos elementos hasta configurar el conjunto final.
El primer paso es el más evidente y es que tenemos que colocar el plato donde colocaremos nuestros vinilos. En este caso tenemos un plato de aluminio fundido con un diámetro de 332 mm que mezcla el color negro con el brillo del aluminio cepillado y un patrón estroboscópico en su contorno para darle un aspecto «profesional». Junto con este tenemos el patinador en color negro y con el logo de la marca destacado.
En el mismo orden colocamos sobre el bastidor central el plato y el deslizador. Un detalle a tener en cuenta es que al colocar el plato dejaremos semioculto un deslizable que nos permite escoger el voltaje en función del mercado donde conectemos el equipo. En este caso para España tenemos el estándar europeo de 220-240V ya prefijado. Si por lo que sea tenemos que cambiarlo en el plato tenemos un par de aperturas que nos dejan acceso a este deslizable sin tener que quitarlo.
El siguiente paso es colocar el portacápsula cuyo cabezal metálico se une al brazo, también metálico, con movimiento de rosca y que después aseguramos con una contratuerca que ajusta ambos elementos de forma que se conviertan en uno solo.
En este caso tenemos un cabezal PC-HS01-S edición plateada de 11 gramos de peso que incluye cartucho y aguja PN-X05 con una presión de 4g que promete 400 horas de vida con una mínima distorsión. Como siempre la zona inferior cuenta con una cubierta plástica que se encarga de proteger la aguja, la cual debemos retirar antes de cada uso y colocar después para mantener este elemento fundamental en perfecto estado.
A continuación podemos colocar el contrapeso en el eje trasero del brazo, algo que haremos girando el contrapeso de forma que lo enrosquemos en el surco que tenemos en el brazo. Si deseamos fijarlo en un punto concreto contamos con un pequeño tornillo en el contrapeso que nos permite hacerlo.
Si vamos a usar singles el Pioneer DJ PLX-500-K cuenta con un adaptador para ello, el cual podemos colocar en un pequeño espacio circular situado en la esquina izquierda, junto al lado de uno de los dos soportes donde debemos encajar las bisagras de la cubierta guardapolvo transparente. Este además de proteger los elementos más sensibles del equipo, una vez abierto cuenta con un par de topes de goma que nos permite colocar nuestros álbumes mientras estamos reproduciendo el vinilo.
Llegados a este punto solo nos queda conectar el Pioneer DJ PLX-500-K a la corriente, a los altavoces, en nuestro caso a los mencionados Pioneer DJ DM-50D BT, al PC/Mac o a una mesa de mezclas compatible. Para ello en la parte posterior encontramos el puerto de corriente a la izquierda, mientras que a la derecha se sitúan un puerto USB tipo B y un conmutador PHONO/ Line. Curiosamente el cable de audio RCA no tiene salida, si no que está fijo con una conexión escondida bajo el propio equipo. Sinceramente esperaba que el cable no estuviera fijo, lo que sin duda hubiera preferido y es algo que no me termina de gustar.
Diseño clásico y elegante
Una vez completado el montaje nos encontramos con un equipo con un diseño tradicional, pero con aspecto muy profesional que nos da esa sensación de robustez que la marca ya nos tiene acostumbrados, aunque el elemento más notorio en su diseño sea el plástico.
Con unas dimensiones de 45 cm de ancho, una altura de 15,9 cm y un fondo de 36,8 cm, el Pioneer DJPLX-500-K cuenta con un peso de 10,7 kilogramos que se hace apreciar cuando tenemos que moverlo.
La distribución de los controles sigue un patrón estándar, con el brazo y todo el conjunto adyacente en la parte derecha. Aquí encontramos el soporte para el portacápsula y junto a él la base del brazo donde tenemos el anillo de ajuste de presión de la aguja y el dial de ajuste de altura del brazo junto a su interruptor de bloqueo. También encontramos el dial Anti Skating y la palanca de elevación junto con el propio soporte del brazo con su sistema de bloqueo.
En esta zona encontramos también una barra deslizable que nos permite ajustar el tempo de rotación en un rango de ±8 %, con un LED verde en la zona central que se apaga cuando salimos de ella.
En lo que al brazo fonocaptor se refiere tenemos un acabado brillante que contrasta con el acabado mate del portacápsula. Aunque se entrada parece resistente no podemos evitar tener la sensación de que está algo por debajo del resto de elementos, aunque es más una impresión que algo mensurable que solo el paso del tiempo nos podrá confirmar.
En la parte izquierda del equipo encontramos un dial que nos permite encender o apagar el Pioneer DJ PLX-500-K. Este dial está rodeado por una capsula metálica excepto por una parte que nos permite ver un gran LED que se ilumina en rojo y que no solo sirve para indicar que el equipo está encendido, si no que forma parte del sistema estroboscópico que nos permite saber la velocidad del reproducción con solo mirar el patrón del plato.
Bajo este dial encontramos un botón metálico para iniciar o parar la reproducción y junto a él un par de botones de velocidad. Con estos podemos escoger entre 33⅓rpm, 45 rpm o bien pulsando los dos escoger 78 rmp.
Otro elemento que encontramos en la parte central inferior es uña pequeña capsula junto a un botón. Cuando presionamos este la capsula se eleva y nos ilumina el punto justo donde la aguja está pinchando, bastando con empujar esta para volver a ocultarla si lo deseamos.
En la parte inferior cuatro grandes patas basculantes se encargad de absorber cualquier pequeña vibración o desnivel para que no afecten al sonido.
Experiencia de uso
El Pioneer DJ PLX-500-K es un tocadiscos que quiere ofrecer en la gama media un producto de calidad para los amantes del vinilo que quieran disfrutar en sus hogares, pero también para aquellos que se quieran iniciar en el mundo del scratch. Para ello cuenta con un diseño que estéticamente representa todo lo que uno se imagina cuando hablamos de pinchar vinilos, con un color negro con toques metálicos cuyo resultado es simplemente hermoso.
Aunque en general la sensación es la de un producto de buena calidad, en algunos puntos como el cuerpo del brazo o algunos controles del mismo parecen que quedan por debajo del resto.
Su motor de servo tracción directa de tres faseses capaz de arrancar a 33 rpm en menos de un segundo, complementándose con un freno electrónico que lo para en unos tiempos muy similares. Junto a esto el plato de aluminio con efecto estroboscópico está pensado para atraer a los aspirantes a DJs, aunque para los más exigentes su cartucho puede que se les quede por debajo de las expectativas, aunque por suerte cambiarlo por uno de mejor rendimiento no es algo que nos vaya a suponer mayores problemas.
Si bien su cable RCA fijo es algo que no me termina de convencer, el PLX-500-K se guarda en el bolsillo la carta su compatibilidad con mesas de mezclas y con Rekordbox, un software que gracias a su puerto USB podremos conectar al PC y usarlo para grabar nuestros vinilos en archivos digitales.
En lo que a calidad de sonido Pioneer DJ nos ofrece un enrutamiento de audio más corto desde la aguja hasta la salida con el que quiere reducir la distorsión y un preamplificador interno que nos evita tener que recurrir a la compra de otros equipos extra.
Tras haberle realizado los oportunos ajustes el resultado es un sonido que nos recuerda por que los vinilos siguen siendo los preferidos por los melómanos. Destaca sobre todo por la pureza de las notas, con un excelente trato en especial en los rangos bajos donde tenemos un gran detalle, sensaciones que de forma muy similares nos ofrece también en las partes vocales.
Cuando vamos moviéndonos por el espectro notamos que la respuesta en el rango medio y alto siguen una tónica similar aunque con algo menos detalle, pero que desde luego siguen a un alto nivel de calidad.
Conclusiones
El Pioneer DJ PLX-500-K es un tocadiscos que no solo queda de lujo en nuestro mesa junto con nuestros vinilos, si no que nos permite sacar de estos un sonido rico y de buen detalle que nos reafirma en seguir apostando por los vinilos.
Si buscamos un equipo para disfrutar de nuestros discos, este nos va a asegurar una excelente experiencia y además su cubierta nos permite ver los discos mientras suenan. Eso si, no quita que tenga puntos a mejorar como algunos acabados y el cable de audio fijo, ya que el resto como mejorar el cartucho es algo que nosotros mismos podremos hacer si lo consideramos necesario.
Con un precio de 349€ se plantea como una excelente opción para regalarnos un tocadiscos que nos asegure que la calidad de sonido no nos va a defraudar, pero lo es aún más cuando vemos que en el momento de escribir estas letras lo tenemos en oferta en Amazon, convirtiéndose así en un rival difícil de batir.
El mundo del vinilo está viviendo una segunda juventud y esto lleva a que fabricantes como Muse Europe amplíen su catalogo con nuevos tocadiscos, pero con su toque particular, en este caso con inspiración en dispositivos pretéritos con un marcado acento Vintage. El más reciente modelo presentado por la compañía es el Muse MT-115 W, un tocadiscos que apuesta por un diseño clásico y sofisticado que busca diferenciarse de la competencia, pero que no deja de incorporar funciones modernas como conectividad Bluetooth.
Con unas medidas de de 225x312x450 mm, un peso de 6,5 kg y un aspecto que nos recuerda el de un receptor de radio antiguo, el Muse MT-115 W cuenta con un encofrado en madera tras el cual se esconden múltiples fuentes de audio con el que disfrutar de nuestra música.
El Muse MT-115 W cuenta en la parte superior con un giradiscos con tres velocidades de reproducción de 33, 45 y 78 rpm, ampliando, mientras que en la parte frontal esconde una bandeja que le permite leer discos ópticos con capacidad de reproducir música contenida desde CD, CD-R y CD-RW. A esto se le añade la posibilidad de conectar un dispositivo externo como una tablet, smartphone o un ordenador portátil mediante conectividad Bluetooth y de escuchar nuestras emisoras favoritas gracias a un receptor de radio FM que permite presintonizar hasta 30 emisoras.
Además el Muse MT-115 W dispone de un puerto USB en su lateral que permite la lectura de los archivos contenidos en una memoria y, también, realiza la conversión digital de la música procedente de los vinilos a formato MP3.
Este nuevo dispositivo de Muse ofrece una potencia de salida de 20W gracias a dos altavoces, contando con la opción de conectar un sistema de sonido externo gracias a su conector de salida RCA o conectar unos auriculares gracias a su entrada auxiliar de 3,5 mm.
El nuevo Muse MT-115 W esta ya disponible con un precio de 169 € en PcComponentes.
Muse, compañía de la que ya os hemos mostrado algunos dispositivos, ha lanzado hoy su nuevo tocadiscos con diseño «vintage», el MUSE MT-501 ATC, un dispositivo que mantiene el estilo que ya vimos en Muse MT-201 en el que el equipo se oculta en una maletín de aspecto retro que le convierte además en un ornamento para el hogar.
Homenajeando aquellos tocadiscos de los años 50, el nuevo tocadiscos de Muse cuenta con un sistema estéreo giratorio con brazo de tono de aluminio Premium con tres velocidades de reproducción de 33, 45 y 78 rpm que amplía las opciones de reproducción a cualquier tipo de vinilo.
El Muse MT-501 ATC no solo es capaz de reproducir música desde nuestros vinilos, si no que admite transmisión de música en streaming a través de conexión Bluetooth, que nos permite enviar desde nuestro smartphone o tableta nuestras playlist para que el tocadiscos la reproduzca. Además tenemos un puerto USB desde el que podemos reproducir archivos en formato MP3 en dos altavoces que ofrecen una potencia de salida de 5W cada uno.
En lo que a conexiones se refiere tenemos un puerto de entrada auxiliar de 3.5 mm al cual podemos conectar nuestros auriculares y un conector de salida RCA.
El nuevo tocadiscos vintage Muse MT-501 ATC esta ya disponible con un precio de 99 €.
Por mucho que la era digital sea una realidad en la que vivimos, hay algo en los vinilos que es inigualable. Resistiéndose al paso del tiempo los vinilos no solo no han perdido su encanto y seguidores, si no que están viviendo una segunda juventud de la mano de auténticos melómanos que gustan de disfrutar de su peculiar sonido y calidad.
En nuestras manos ha caído el Muse MT-201, un tocadiscos que nos retrotrae a años pretéritos tanto por su sonido, como por un aspecto vintage que enamora. Sin embargo no todo es añoranza, ya que junto con esto la marca ha añadido funciones mas actuales como la conectividad Bluetooth, lo que hace que podamos usarlo también con nuestro smartphone. Hemos estado disfrutando de este dispositivo unos días, relajándonos al compas de las melodías hasta que ha llegado el momento de contaros nuestra experiencia y dar nuestro veredicto. Si quiere saber como ha sido, solo sigue leyendo.
Muse MT-201, o como llevar tu música en «la maleta»
Vamos a ponernos en modo «cuéntame» y retroceder unos años en el tiempo, hasta una época donde música portable no se refería a llevar tu playslist en el móvil ni en disponer de un Walkman, si no a contar con un tocadiscos en una maleta que poder llevar de una casa a otra. Este es el formato que MUSE ha escogido para este tocadiscos perteneciente a su gama «Vintage Collection».
El Muse MT-201 está disponible en varios colores, aunque en nuestra caso lo tenemos en un rosa bastante fuerte, el cual hace que el modelo exacto sea el Muse MT-201 BTP. Su diseño cerrado nos pone frente a un maletín con un asa para su transporte en el que se mezclan acabados metálicos con una símil de cuero para acentuar el aspecto vintage. Sus medidas son de 129 mm x 290 mm x 360 mm, mientras que su peso se queda en 2.3 kilogramos.
Su diseño de lados redondeados acentúa esta sensación de tener en las manos un simple maletín de viaje, algo que comienza a cambiar cuando vemos como en la parte superior, junto con la hebilla tenemos en las esquinas dos zonas de acabado metálico microperforado.
Una vez abierto el maletín, dejando a la vista el tocadiscos en sí, vemos que estas zonas microperforadas no es otra cosa que dos altavoces de 5W desde los que nos llegan el sonido de nuestros vinilos. También quedan a la vista el plato recubierto por una superficie de fieltro con su eje central, sobre el que podremos nuestros vinilos, un brazo fonocaptor con su correspondiente aguja y una serie de controles a la derecha del conjunto.
En la zona de la derecha tenemos el adaptador de 45 RPM, la correspondiente palanca de alzado para el brazo, un control de velocidad que nos permite cambiar la misma entre las 33, 45 y 78 vueltas, el control PITCH, el del volumen y el modo auto de stop. Junto a esto tenemos dos pistas que nos dejan claro que este tocadiscos tiene mas funciones que la de pinchar, ya que uno de los controles que vemos es el que nos permite seleccionar como fuente de sonido Bluetooh, entrada auxiliar o USB, ya que el Muse MT-201 no solo reproduce vinilos, si no que cuenta con soporte para reproducir música desde otras fuentes como USB desde otros dispositivos vía Bluetooth.
Junto con todo esto y para los momentos en los que queramos escuchar música sin molestar a nadie, tenemos un puerto para auriculares de 3.5mm.
Si queremos usar un USB para reproducir música encontraremos el correspondiente puerto en el lateral derecho, donde además tenemos la opción de avanzar o retroceder entre pistas e incluso realizar grabaciones desde el disco, contando con un botón de SPLIT, que cortará la grabación para conseguir varias pistas. Mientras que la entrada auxiliar la encontramos en la parte trasera, justo al lado de la toma de corriente.
Experiencia de uso
A la hora de valorar la experiencia vamos a comenzar hablando de su diseño, no en vano el apellido vintage hace referencia a un estilo que no a todos puede convencer. En mi caso he de decir que lo pongas donde lo pongas el Muse MT-201 es algo más que un tocadiscos, es una pieza de decoración que desvía las miradas de todo el que entra en la estancia.
Con unos buenos acabados, hubiéramos agradecido que el uso de materiales plásticos fuese de algo más de calidad para asegurarnos una larga temporada juntos. Algunos puntos parecen algo endebles, aunque en el tiempo que lo he usado no he notado desgate ni holguras, por lo que esto es algo que solo el paso de los meses o años podrá decir.
Su exterior imitando cuero y su interior con acabados aterciopelados le dan un aire añejo que invita a la nostalgia. En lo que a sus medidas de refiere permite que le encontremos sitio con facilidad a la hora de colocarlo en una estantería o mesa, pero conlleva que el vinilo medio sobresalga a la hora de usarlo. Esto era algo esperable, por lo que no ha sido una sorpresa sabiendo sus medidas.
En lo que a experiencia de sonido debemos tener en cuenta que hablamos de un tocadiscos que ronda los 80€, es decir que está pensado como para un uso amateur, para un usuarios nostálgico que quiera disfrutar del sonido peculiar de un vinilo sin tener que dejarse un dineral en el camino. Aún así contamos con un plato con superficie de fieltro muy suave, una aguja de repuesto para cuando se dañe la que viene preinstalada y múltiples opciones de conexión.
A la hora de escuchar música sus altavoces de 5W ofrecen un sonido con una potencia media que a altos volúmenes tiende a sonar ligeramente metalizada. Sin embargo a un volumen medio ofrece un sonido muy aceptable, con algo de grano que nos recuerda que estamos escuchando un vinilo y que la calidad del sonido es proporcional al estado de los discos. En general la experiencia ha sido muy satisfactoria, recuerda los tocadiscos que aquellos que ya tenemos unos años recordamos ver en nuestras casas o en las de nuestros padres, con ese sonido distintivo e incomparable.
Por supuesto hemos probado la conectividad Bluetooth y USB, donde tenemos un altavoz que cumple, ni mas ni menos, con una calidad justa que se agradece que esté pero que tampoco destaca.
Conclusiones
A la hora de valorar la compra del tocadiscos tenemos que tener en cuenta que el precio del Muse MT-201 se aleja mucho de lo que podemos llamar un «tocadiscos de alta gama» o de tipo profesional. Lo podemos encontrar en tiendas como Amazon por 80€. Su público es ese usuario que quiere un dispositivo para reproducir sus vinilos y que al mismo tiempo sea un elemento de decoración, en este aspecto el Muse MT-210 se lleva mis elogios.
Puede que no tenga los mejores altavoces, ni los más potentes o sea un dispositivo premium, pero es un pequeñín que ha hecho que disfrutara de la música con ese encanto que hace que cierres los ojos y te dejes llevar. La reproducción de los discos es correcta, sin saltos ni vaivenes mas allá de los que el paso de los años ha marcado en los vinilos. Para el dinero que cuesta logramos un tocadiscos muy correcto, al tiempo que una pieza vintage con la que decorar nuestro salón, logrando en conjunto un equipo muy recomendable con una muy buena relación calidad / Precio.
Aunque nadie duda de la calidad que ofrecen los nuevos formatos de audio, lo cierto es que los discos siguen ofreciendo un sonido tan particular que son muchos los aficionados que cuentan con un tocadiscos en su casa. Muse Europe es una marca especializada en audio que está dándose a conocer en nuestro país y que entre otros equipos cuenta con el nuevo MT-201, un tocadiscos que junto al sonido peculiar de los vinilos nos ofrece un diseño vintage y la posibilidad de reproducir sonido desde otro dispositivos gracias a su conectividad Bluetooth,
Muse MT-201, tocadiscos y sonido digital
El Muse MT-201 con un diseño tipo maletín vintage está disponible en colores rojo, azul y negro, lo que hace de él también un buen elemento decorativo. Sus medidas compactas y un peso de solo 2.3 kilogramos permite que podamos transportarlo con seguridad, ya que al mismo tiempo lo mantiene protegido.
En su vertiente como tocadiscos nos permite reproducir a velocidades de 33, 45 y 78 rpm, para una mayor compatibilidad de reproducción de cualquier tipo de vinilo. Pero además es capaz de reproducir audio desde otros dispositivos conectados mediante Bluetooth, como un smartphone o un portátil, e incluso desde un dispositivo USB ya que cuenta con un puerto para reproducir música desde almacenamientos USB.
El sonido del Muse MT-201 nos llega a través de dos altavoces con una potencia de salida de 5W cada uno, pudiendo conectarse con otros equipos con su conector de salida RCA o incluso con unos auriculares con conexión de 3.5mm. Junto con esto el tocadiscos de Muse nos llega con un adaptador de 45 rpm en su caja, completando el equipo y sus opciones de reproducir vinilos.
El Muse MT-201 está disponible por 79.90€ en Amazon y distribuidores autorizados.