Pocas marcas reflejan también el concepto de lujo como Loewe. De la marca ya os hemos hablado repetidamente de sus televisores y equipos de sonido, Unos productos que destacan tanto por su calidad como por su diseño. Lo debe apuesta por una síntesis entre la tradición y la modernidad, combinando el diseño artesanal con la más moderna tecnología en sus productos. Recientemente, la compañía alemana decidió adentrarse en un nuevo terreno lanzando los Loewe Leo, sus primeros auriculares y lo que parece el inicio de una nueva familia de productos de la marca alemana.
Con un diseño de líneas limpias, detalles minimalistas y materiales de alta calidad Loewe ha utilizado el león como inspiración en esta nueva línea de productos. No en vano, precisamente ese es el significado del nombre de la marca en su idioma materno. Este felino ha sido también la inspiración para el logo de estos auriculares, uniendo las facciones de la cara de este animal, símbolo de fortaleza y elegancia, con el dibujo de un corazón, con el que se representa la pasión puesta en su diseño.
Los Loewe Leo han querido unir el diseño más lujoso con las últimas tecnologías, incorporando inteligencia artificial, sonido de alta calidad y cancelación activa de ruido. En este análisis vamos a tratar de ver si lo han conseguido, pero sobre todo, si merece la pena pagar el precio que le han puesto y es que hablamos de un producto que se ha puesto a la venta por 1.299€.
Loewe Leo, especificaciones:
- Peso: 360 gramos
- Controladores: Drivers de alto rendimiento de 50 mm
- Amplificador: Texas Instruments OPA1622 SoundPlus con una distorsión armónica total (THD+N) ultrabaja
- Frecuencia de respuesta: 20 a 22.000 Hz
- Cancelación de ruido: adaptativa (ANC) con modo de transparencia (ambos a 25%, 50%, 75% y 100%), Intelligent ANC
- Función Mimi Sound Personalisation a través de la aplicación Loewe
- Bluetooth: BT5.3 / LE
- Códecs: AAC, LC3, SBC y audio de alta resolución inalámbrico LC3+ a 96 kHz / 24 bits
- Batería: 660 mAh con carga rápida mediante USB-C
- Autonomía: hasta 65 horas
- Otros:
- Asistente Leo AI con control por voz y traducción en tiempo real desarrollado con Bragi y OpenAI
- IP53
- Control de voz y traducción en tiempo real
- Diseño plegable con funda rígida protectora 2 en 1 y bolsa adicional de piel de cordero
Unboxing
Si teníamos alguna duda de que estamos ante un producto premium, no tenemos más que ver el empaquetado que han puesto. No una ni dos, sino hasta tres cajas protegen el producto antes de llegar a nuestras manos. Una especie de matrioska que vamos a tener que ir desempaquetando paso a paso hasta alcanzar a ver los auriuclares.
En primer lugar, tenemos una caja de color marrón bastante anodina, con un dibujo de los auriculares como único indicio de lo que esconde. Dentro de esta caja encontramos una segunda caja, en esta ocasión de acabado en negro, con el logo de los Loewe Leo en su parte central. A su vez, esta caja contiene una tercera, retomando en esta el acabado en color marrón, que es la que por fin nos da acceso al producto en si.
Con una apertura de tipo cofre, lo primero que nos encontramos es un estuche rígido de color negro dentro del cual están los auriculares. Retirando este encontramos debajo una bandeja y una cartulina de color negro, que a su vez también debemos retirar para acceder a una segunda capa donde encontramos una funda flexible de cuero. Repitiendo la separación con una cartulina de color negro, al retirar esta encontramos una tercera capa donde vemos los cables de conexión, así como las guías de uso y garantía, completando todo lo que nos ofrece Loewe con la compra de estos auriculares.
Comenzamos el unboxing con el estuche rígido de los Loewe Leo, el cual cuenta con un acabado de tipo fieltro, muy suave al tacto y que en la parte central cuenta con el logo de los Leo. Una tira de acabado tipo silicona dura, permite cerrar de forma magnética este estuche. No os dejéis engañar por lo que puede parecer un sistema no demasiado seguro, ya que se trata de un sistema que ofrece un cierre preciso y sorprendentemente firme. Os aseguro que no vais a tener problemas de que se puedan abrir por casualidad.
Al abrir este estuche nos damos cuenta de que el acabado exterior no es simplemente una capa, sino que es la propia constitución del estuche. Sorprendentemente firme y rígido, en su construcción se ha utilizado el fieltro como material principal. Así, este mismo material está tanto en el exterior como en el interior, el cual cuenta con un diseño que se ha construido para alojar los auriculares, sujetándolo con firmeza, incluyendo dos pequeñas protuberancias donde se encajarán las almohadillas y un rebaje para la zona de las copas, de forma que no solo se ajusta a la perfección, sino que impide que se mueva dentro del estuche.
Junto con los auriculares encontramos un pequeño estuche del mismo material, el cual va a servirnos para poder llevar los cables de conexión junto con nuestros auriculares. Este estuche tiene capacidad más que suficiente para un cable, pero incluso podemos llevar los dos incluidos, aunque en este caso ya os advierto nos quedarán bastante apretados.
Los Loewe Leo incluyen un cable USB tipo C a USB tipo C, así como un cable USB C a conector de audio de tipo Jack de 3.5mm. En ambos casos estamos hablando de unos cableados con un trenzado textil flexible pero muy resistente, aparentemente de aspecto muy duradero.
Elegancia y lujo en cada detalle
Hablamos de unos auriculares de tipo diadema en cuya construcción se ha utilizado aluminio anodizado y cuero, y cuyo diseño guarda más de una sorpresa. Loewe quiere ofrecernos la oportunidad de poder personalizar o incluso cambiar algún elemento que se haya podido dañar con el paso del tiempo. Para ello, tanto el interior de la diadema como las almohadillas son reemplazables. Basta con que tiremos ligeramente de ellos para que se desprendan y podamos sustituirlas, eso sí, la zona de la diadema exige que ejerzamos un poco más de presión de la que nos hubiera gustado. Aquí os aconsejo utilizar algún tipo de elemento suave, como una tarjeta de crédito o una púa de plástico para ayudarnos a retirarla, ya que os aseguro que sin ello nos va a costar separarlos.
Disponibles para su compra en color Midnight blue y Moonlight Beige, por el módico precio de 200€ podemos adquirir un set de almohadillas y diadema en color marrón, o como dice la marca en acabado Horizon Bronze, para darle un aspecto distinto a nuestros auriculares. Ya en su presentación pude verlo en persona, y sin duda es el acabado más llamativo y elegante, aunque su precio es para pensarselo.
En nuestro caso, contamos con el acabado Midnight Blue, es decir, un cuerpo principal realizado en aluminio anodizado, con la parte interior de la diadema y las almohadillas en color azul oscuro. El conjunto es realmente atractivo, desprendiendo esa sensación de producto premium que busca Loewe. El diseño podrá gustarte más o menos, pero es innegable cuando los tienes delante que estás ante un producto de altísima calidad. La marca alemana busca ofrecer exclusividad, un producto premium que destaque sobre la competencia no solamente por la calidad de su sonido, sino por su aspecto y construcción.
Tanto la parte externa de la diadema como la propia estructura de las guías de la misma están realizadas en aluminio. La parte externa de la diameda es realmente fina, ya que todo el sistema de anclaje se sitúa en la parte central, de forma que no es necesario un gran grosor en esta zona. Si retiramos la almohadilla de la parte de la edad tema, podemos comprobar a qué me refiero.
Es un lujo poder ver la estructura interna del diseño de esta diadema, viendo cómo está dividido en distintas secciones que permiten una máxima flexibilidad, al mismo tiempo que otorgan una gran resistencia a toda la estructura. También podemos ver cómo se ha reforzado la parte de los extremos. Algo normal, ya que suele ser la que mayor presión soporta y, por tanto, necesita una mayor resistencia estructural.
En la parte interna de la almohadilla de la diadema podemos apreciar el mismo diseño de secciones que le permiten una mayor flexibilidad. Sin embargo, también nos permite comprobar cómo realmente el acolchado no es tan grueso como nos hubiese gustado, sobre todo porque no estamos hablando de una espuma de gran densidad.
Un detalle curioso de esta diadema es que las dos partes que lo componen no solamente se unen mediante una serie de presillas plásticas de pequeño tamaño, sino que realmente el elemento principal para mantenerla en su sitio es un sistema magnético. Decimos que es un detalle curioso, pues esta la firmeza que tiene que cuesta creer que esto se haya logrado principalmente a base de imanes.
Como mencionamos, la almohadilla interior de la diadema no es especialmente gruesa ni densa, pero lo cierto es que una vez colocados en la cabeza, su peso de 360 gramos no se nos hace demasiado notorio. Por otro lado, el cuero con que está revestido es flexible y agradable al tacto, aunque me quedo con las ganas de saber cómo responderá en los días de calor y es que este tipo de acabados suelen conllevar problemas con el sudor en estas condiciones.
En la zona de las copas, las almohadillas tienen exactamente el mismo sistema que encontramos en la diadema. Nuevamente se han utilizado imanes para unir estas almohadillas al cuerpo principal, pero ni de lejos llega a la firmeza que tenemos en la zona de la diadema. Para retirarlas, basta con que tiraremos ligeramente de ellas para separarlas, volviendo a colocarlas en su sitio, simplemente acercándolas, ya que los imanes se ocuparán de colocarlas correctamente en su lugar.
La espuma de las almohadillas se ve ligeramente más firme que la que encontramos en la zona de la diadema, algo que se nota sobre todo cuando los llevas puesto. Se trata de una espuma con memoria, por lo que se ajustan de una forma muy correcta a nuestra cabeza cubriendo la totalidad de la oreja.
En el interior de las almohadillas, apenas una fina capa textil nos separa de los drivers, y es que el Loewe no quiere que absolutamente nada pueda entorpecer el cómo llega el sonido de nuestros oídos.
Mientras que muchas marcas están optando por sistemas complejos de controles, aquí optado el minimalismo, aunque eso requiera de un pequeño proceso de aprendizaje por nuestra parte.
En la parte externa de cada una de las copas encontramos dos grandes círculos, en cuya parte central se puede ver el logo de los Loewe Leo. Esto no son otra cosa que dos enormes diales, uno de los cuales nos permite subir y bajar el volumen, mientras que el otro sirve como sistema de control para avanzar o retroceder en las pistas de reproducción, manteniendo ese equilibrio entre la elegancia y lo funcional.
En ambas copas vamos a encontrar unas zonas microperforadas que se corresponden con la colocación de los micrófonos, los cuales están estratégicamente colocadas para captar mejor nuestra voz y el sonido que nos envuelve, parte fundamental del sistema de ANc del que ya os hablaré.
Si nos vamos a la copa derecha, veremos que tenemos el puerto USB tipo C. Este nos va a servir tanto para cargar el dispositivo como para conectarlo a cualquier dispositivo de sonido mediante los cables incluidos. En esta misma copa encontraremos un LED de estado un botón multifuncional. Con él podremos encender y apagar el auricular. También podremos activar el modo emparejamiento e incluso pausar o reanudar la reproducción de nuestra música e incluso contestar llamadas.
En la copa izquierda también contamos con un botón, aunque en este caso con un funcionamiento bastante diferente. Este botón nos permite cambiar el modo al cual afecta el dial situado en la misma copa. Es decir, aunque de inicio con el dial izquierdo podemos avanzar o retroceder en nuestra Playlist, pulsando este botón cambiamos el modo del dial de forma que podremos controlar el volumen de la cancelación de ruido, cambiar entre la cancelación de ruido y el modo transparencia o incluso desactivar ambos. Lo cierto es que no es el sistema más cómodo ni más práctico de usar, básicamente porque no tenemos ningún tipo de indicación que nos diga en qué modo estamos. Unos chasquidos nos indican que hemos cambiado de modo, pero sin indicarnos en cuál de ellos estamos. Una simple anotación de voz que nos dijera si estamos en la cancelación de ruido o en modo playlist, hubiese sido de gran utilidad. Si bien es cierto que de forma automática a los pocos segundos el modo pasa al predeterminado de playlist, me extraña que Loewe no haya tenido en cuenta este pequeño detalle en su desarrollo, algo que no creo que cueste mucho implementar y que facilitaría mucho el uso.
Siguiente con el uso del botón de la copa izquierda, algo que si me ha gustado es que manteniéndolo pulsado desactivamos momentáneamente la cancelación activa de ruido para escuchar lo que nos rodea. Si, por ejemplo, estamos en el metro y queremos saber cuál es la próxima estación, basta con que pulsemos este botón para que se desactive la cancelación activa de ruido y podamos escuchar la locución de “próxima parada…”, o si alguien se dirige a nosotros, podemos hablar con normalidad, ya que no solamente anula la cancelación activa de ruido y activa el modo transparencia, sino que pausa la reproducción de música.
Hablamos de un producto de lujo que está pensado para llamar la atención y cuyos propietarios van a fijarse hasta en los más mínimos los aspectos de su diseño y construcción. En este tipo de productos, la atención al detalle es primordial. Loewe no solamente lo sabe, sino que es especialista en este apartado. Así, encontramos en la parte externa de la diadema el logo de la marca, dejando claro la manufactura del producto. Esto mismo vamos a encontrar también en ambos estuches, los cuales cuentan con una pequeña etiqueta con el logo de la marca. No solo es cuestión de llevar un producto premium, sino también de dejar claro a quienes nos rodean, que lo son.
Cuando el espacio que ocupa el estuche rígido es demasiado aparatoso, nos podemos decantar por utilizar el estuche de cuero para transportar nuestros auriculares. Este estuche cuenta en su parte interna con un forro aterciopelado y una cremallera que asegura el cierre. La cuestión está en ofrecer al usuario que opte por la compra de estos auriculares, de las maximas opciones para poder trasladar con comodidad y seguridad sus auriculares. Hablamos de un producto con un precio elevado, por lo que no solamente queremos poder llevárnoslo, sino poder hacerlo de una forma que nos asegure que no van a dañarse.
Un sonido de lujo para los amantes del detalle
De nada nos sirve tener un producto estéticamente premium si la funcionalidad y el rendimiento no acompaña. Con más de un siglo de historia, Loewe tiene una reputación que mantener y los Leo no van a ser la excepción en su apuesta por la calidad.
En el interior de los Loewe Leo contamos con unos traductores dinámicos de 50 mm y un amplificador Texas Instruments OPA 1622 SoundPlus. Con ellos obtenemos una frecuencia de respuesta de 20 a 22000 Hz y una distorsión armónica total con calidad de estudio. Contamos con soporte para los códecs AAC, LC3, LC3+ y SBC, así como conectividad Bluetooth 5.3 multipunto, aunque también podemos optar por utilizarlos mediante cable tanto con dispositivos con entradas USB tipo C como para dispositivos con entrada analógica de 3,5 mm.
Lo debemos permite configurar el sonido de los Leo mediante su aplicación, Loewe Leo APP, donde disponemos de un ecualizador que podemos personalizar. Sin embargo, también contamos con la tecnología Mimi Sound, la cual, mediante una serie de pruebas, es capaz de configurar un perfil adaptado a cada usuario. También contamos con dos mismos y soporte para audio espacial, pudiendo disfrutar con este de un sonido que nos viene desde un punto fijo en el espacio o que va rotando con nosotros según nos vayamos moviendo.
Lo cierto es que ya me esperába un audio de alta calidad, un punto donde nuevamente Loewe nos confirma que esta a un altisimo nivel. Eso si, la mejor calidad la vamos a obtener siempre con cable, aunque lo cierto es que el códec LC3+ da unos excelentes resultados para esos momentos donde queremos tener la libertad de prescindir de cables.
Con los nuevos Loewe Leo tenemos un sonido muy equilibrado, donde destaca sobre todo la nitidez y limpieza del mismo. Me ha sorprendido la amplia escena sonora que ofrece, así como unos agudos que destacan por los cristalinos que son y unos graves profundos y muy buena pegada. La riqueza de los primeros compite en sorprendernos con unos graves contundentes, pero a la vez controlados, es decir que su potencia no mata ni pisa el resto del espectro sonoro. También me han gustado mucho en la parte vocal, y es que los Loewe Leo son capaces de ofrecernos unas voces extremadamente detalladas y ricas. Son de esos auriculares que harán disfrutar a amantes de géneros como la ópera, ya que podemos percibir las vibraciones de la voz, las variaciones de matices y toda la potencia vocal de sus intérpretes.
La cancelación activa de ruido sigue siendo uno de los aspectos más variables En sus resultados. Hemos visto dispositivos de unos precios elevados y una pobre cancelación, mientras que otros con poco presupuesto nos ofrecen una excelente cancelación activa de ruido. Tras probarlo en distintos escenarios, hay que decir que los resultados con la ANC son buenos, pero no están a la altura de lo que me esperaba. Tenemos una cancelación activa de ruido muy cumplidora, podemos decir que incluso que es muy buena, pero que no llega a la altura de dispositivos como los Bose QuietComfort Ultra. Mientras que la marca tiene una amplia experiencia a nivel de calidad de sonido, se nota que en la parte de la cancelación activa de ruido aún necesitan evolucionar. Confio en que es un aspecto donde seguramente mejorarán, ya sea a nivel de actualizaciones o en futuras versiones de los Leo.
Junto con la ANC contamos con un modo transparencia extremadamente eficiente, permitiéndonos escuchar todo lo que nos rodea, haciendolo además sin distorsionar el sonido. En este aspecto no le puedo poner ningún pero al funcionamiento de los Loewe Leo.
Funciones como en el sensor de presencia que pause reanuda la reproducción cuando nos quitamos los auriculares, o el sonido espacial que es capaz de situar el sonido en un punto fijo en el espacio para que siempre percibamos que el audio nos llega desde ese punto, son aspectos que funcionan realmente bien, a la altura de lo que esperamos, unos auriculares premium. Por otro lado, sí, no te equivocas, aquí también encontramos la presencia de la inteligencia artificial. Parece imposible encontrar ya un dispositivo que no incluya esta característica y los Loewe Leo no iban a ser la excepción. En este caso tenemos a Leo AI, un asistente desarrollado por la compañía de la mano de Bragi y OpenAI. Este asistente nos permite controlar los auriculares, pero también funciones más generales como resolver dudas, traducir textos, etc. Sin embargo, su traducción al español a veces no es demasiado fina, sobre todo cuando deje trasladas información sacada de alguna web, además su respuesta podría ser más rápida para que la experiencia fuera más natural.
Una autonomía a la altura de lo esperado
Al hablar de un producto pensado para que utilicemos de forma inalámbrica, no menos importante es cuánto tiempo nos va a durar su batería, es decir, la autonomía que nos ofrece. Aquí la marca nos habla de hasta 65 horas de autonomía, una cifra que en mi caso no he llegado a alcanzar, posiblemente por el uso intensivo de la cancelación activa de ruido. En mi experiencia hablar de una cifra cercana a 50 horas sería algo más realista con la cancelación activa de ruido, lo que no deja de ser una excelente autonomía, sobre todo si lo comparamos con la competencia, a la cual, aquí sí, mayoritariamente supera de forma contundente.
Loewe Leo App
Como no podía ser de otra manera, Loewe nos proporciona una aplicación que nos permite configurar nuestros auriculares. En esta ocasión se trata de una aplicación exclusiva para los Leo, la cual podemos descargar desde las tiendas de Android e iOS.
El diseño de la interfaz de esta aplicación sigue la línea minimalista que ya hemos visto en el propio auricular. Lo hace con una pantalla de inicio en donde encontramos una serie de accesos directos para configurar distintos parámetros de la experiencia de uso.
Entre las opciones de aplicación tenemos un ecualizador con distintos perfiles prefigurados, aunque también se nos ofrece la oportunidad de crear un perfil personalizado mediante un sistema de cinco bandas. También disponemos de una opción de personalización de la cancelación activa de ruido, pudiendo regular el nivel de volumen de la cancelación, así como del modo transparencia.
Otras opciones que encontramos en esta aplicación está la activación del modo de baja latencia, pensado sobre todo para aquellos usuarios que jueguen desde el móvil. Con él logramos que el sonido de lo que vemos en pantalla y escuchamos esté sincronizado, un aspecto fundamental a la hora de jugar. En esta aplicación también podemos acceder a Leo AI, pudiendo añadirlo a los atajos rápidos, asi como cambiar de idioma en que nos comunicamos con él. Otras opciones que encontramos es la de poder activar o desactivar en modo multipunto, poder configurar el tomar selfies con el movil de forma remota con un comando de voz, así como el personalizar los accesos rápidos, algo que por cierto no funciona demasiado bien.
Una de las principales opciones que tenemos en esta aplicación es la capacidad de activar o desactivar el audio espacial. Podemos hacerlo seleccionando el audio espacial desde un punto fijo o en movimiento, con el cual el sonido seguirá el movimiento de nuestra cabeza. Aquí nuevamente Loewe lo hace realmente bien y la ha conseguido un sistema muy eficaz, tanto en la capacidad de hacernos percibir el sonido desde un punto concreto del espacio, como en la capacidad que tiene para seguir en movimiento de nuestra cabeza.
Como cada persona es un mundo y según la edad va variando la capacidad que tenemos para escuchar, Loewe nos ofrece su sistema Mimi de sonido personalizado. Esto es una opción que encontraremos en la aplicación y que básicamente lo que hace es que genera un perfil personalizado en función de las capacidades auditivas de cada usuario. Lo hace realizando una serie de test que ponen a prueba nuestra capacidad de audición para después crear un perfil que se ajuste a él. Personalmente es un sistema que me parece muy interesante y sí que he notado cierta mejoría al utilizarlo. De todas formas, para aquellos que lo prefieran, siempre pueden optar por la personalización a medida utilizando su ecualizador.
Conclusiones y opinión
Con los Loewe Leo debemos tener claro que se trata de un producto diseñado para un usuario que no solamente busca calidad de audio y alto rendimiento, sino también el poder lucir un producto exclusivo de calidad premium. Tanto a nivel de construcción como de diseño, no podemos negar que Loewe lo ha conseguido, aunque esto siempre es algo que queda muy en función de los gustos de cada uno. Personalmente me parece un diseño muy atractivo y de un excelente acabado, aunque con margen de mejora. Mientras que la posibilidad de intercambiar almohadillas y la parte interior de la diadema me parece un gran acierto, también es cierto que me gustaría que el sistema de control fuese un poco más intuitivo, sobre todo a la hora de controlar el dial izquierdo.
La integración del asistente digital, Leo, se ve como un inicio realmente prometedor, aunque nuevamente nos encontramos con un producto que se ve que debe evolucionar para ofrecer un comportamiento más natural. Cuando todos los actores del mundo de la inteligencia artificial están buscando interacciones cada vez más humanas, Leo se sigue notando demasiado artificial.
Para los más puristas del sonido, es de agradecer que la marca haya incluido sendos conectores por cable, tanto USB C como Jack de 3,5 mm, Aunque no menos de agradecer es que se haya incluido el codecs LC3+ o Low Complexity Communication Codec Plus, para esos momentos donde preferimos la conexión sin cables, pero no queremos renunciar a un audio de calidad. Aquí reconozco que el sonido que nos dan los Leo están a la altura de lo que me esperaba de la marca. Un sonido puro y de muchos matices que eran el disfrute de los más exigentes, pero que no se acompaña de una cancelación activa de ruido al mismo nivel. La ANC de los Leo no es mala, ni mucho menos, es más, incluso podríamos decir que es realmente buena, pero cuando pagas 1300 € por unos auriculares no te conformas con algo «simplemente bueno«, sino que buscas una cancelación activa de ruido a la altura de lo mejor del mercado. Este es uno de los aspectos donde la marca debe de trabajar para justificar su precio.
Está claro que cada marca se enfoca en un público determinado. Los hay que apuestan por gamas de entrada con precios asequibles para llegar al máximo número de compradores posibles. Los hay que buscan llegar a los usuarios más sibaritas con una calidad extrema y los hay que buscan ofrecer un producto equilibrado que tenga la mejor cancelación, un buen sonido y un precio no desorbitado. Luego tenemos a marcas como Loewe, que lo que buscan es ofrecer un producto exclusivo Donde el diseño sea parte fundamental de la experiencia.
Con los Loewe Leo no solamente compramos calidad de audio, compramos un producto exclusivo de una marca premium. Un producto destinado a un público muy concreto que no está pensado para competir en la liga de los superventas.
A nivel de diseño no se puede negar que estamos ante uno de los dispositivos mejor terminados y con un aspecto más elegante de los que han pasado por nuestras manos. La unión del aluminio y el cuero le da un aspecto tan elegante como exclusivo, con una construcción pensada para ofrecer calidad y durabilidad. Esto, junto con un excelente sonido, son las bazas principales con los que cuenta los Loewe Leo para llegar a su público objetivo. Con un precio de 1.300 €, si te encuentras en éste, solamente tú y tu cartera, lo podéis decidir.
