En Octubre del año pasado CNET ponía a prueba en el Samsung Galaxy Fold uno de los puntos débiles de cualquier terminal plegable, su bisgra. Lo cierto es que el resultado no estuvo nada mal y aguantó 120.000 dobleces antes de romperse.
Con el lanzamiento del Motorola RAZR los primeros usuarios se quejaron de un «crujido» en la zona de la bisagra, por lo que ya se auguraba que este iba a ser un punto problematico. Ahora CNET ha realizado la misma prueba de doblar el RAZR y el resultado deja mucho que desear.
La bisagra del RAZR queda muy lejos del Fold
La prueba de resistencia a la que se ha sometido a la bisagra del Motorola RAZR consiste en una maquina que doble y desdobla el terminal constantemente. Lo primero es que el resultado nunca se puede tomar como «real», es decir que no durará las mismas dobleces en el uso diario. Este sistema continuo somete al engranaje a una tensión y fricción que nunca va a sufrir en manos de un usuario, pero si nos sirve de indicativo para comparar entre dispositivos.
Para este test de resistencia de la bisagra del Motorola RAZR se tenía la intención de usar el mismo dispositivo que se usó con el Fold, pero finalmente hubo que usar uno especialmente adaptado. Una vez comenzaron las dobleces ya se puede apreciar que no es un moviemiento muy fluido y que la bisagra ofrece resistencia. El resultado es que donde el Fold rozó las 120.000 dobleces, el Motorola Razr comenzó a dañarse a las 27.000 dobleces. Es decir, pongamos que abrimos el móvil unas 30 veces al día, eso supondría en en dos años y medio el terminal ya empezaría a dar problemas con la bisagra.
Repetimos que son pruebas muy subjetivas, pero que ahí están. Puedes verlo por ti mismo en el siguiente vídeo.
Como ya pasó con el Fold, parece que el Moto Razr está pagando el precio de ser un terminal pionero. Sin embargo de momento tomemos esto como una curiosidad y esperemos a poder probarlo para ver como se desenvuelve el terminal en el día a día.