Junto con la nueva generación de procesadores Intel, la compañía ha dado más detalles sobre el Proyecto Athena, el programa de innovación que desarrolla en conjunto con diversos fabricantes para preparar la futura generación de portátiles.
Hoy la compañía ha dado más detalles sobre los requisitos para los dispositivos que están participando. Estas especificaciones 1.0 serían las que varíamos en unos diseños que se esperan comiencen a presentarse en el segundo trimestre de este año.
Proyecto Athena, mejorando las experiencia de uso real
Intel lleva años trabajando para poder conocer cuales son exactamente las necesidades y las experiencias de uso de los usuarios. El Proyecto Athena ha unido a la empresa con fabricantes como Acer, Dell, HP y Lenovo. Juntos han testado las condiciones de uso de los dispositivos para priorizar las respuestas de estos a las experiencias de uso del mundo real. Estas se han reflejadado en lo que han llamado por Indicadores Clave de Experiencia (key experience indicators, KEI).
Estos KEI se usarán para impulsar las innovaciones que mejoren de forma significativa el rendimiento y la experiencia ofrecida por los dispositivos al consumidor. Los primeros KEI han dado como resultados una respuesta consistente de la batería, el uso de 16 o más horas de duración de la batería con reproducción de video local y 9 o más horas de batería en condiciones de rendimiento de uso real; y la activación del sistema desde el modo de suspensión en menos de 1 segundo.
Intel ha dado a conocer los requisitos a nivel de plataforma que son necesarios para estas experiencias. Estas incluyen Thunderbolt 3, Intel Wi-Fi 6 (Gig+), compatibilidad OpenVINO AI en PC y un modo de hibernación conectada moderno, en seis áreas clave: accion instantánea, rendimiento y respuesta, inteligencia, duración de la batteria, conectividad y factor de forma. Una serie de especificaciones que podemos ver en mayor detalle en su hoja técnica.
El Proyecto Athena de Intel cuenta con más de 100 empresas adheridas y herramientas Open Labs para testar y poner a prueba el rendimiento de lo que en un futuro serán los dispositivos que tendremos en nuestras casas.