Tras más de una década en el dique seco, Bigben Interactive ha querido recuperar de la mano de Kylotonn Entertainment uno de los clásicos arcade de conducción con una nueva entrega del popular V-Rally. Esta es una de las franquicias que gozó de mucho éxito en su momento, pero poco a poco se fue diluyendo. Ahora nos ha llegado V-Rally 4, en busca de retomar esos buenos tiempos y tras probarlo te damos nuestra opinión.
Las cosas claras
Cuando quieres hacer un juego de conducción debes saber muy bien que quieres ofrecer, normalmente el usuario está dividido entre los que buscan puro entretenimiento, que se suelen decantar por un estilo arcade, o bien los que buscan la sensación de realidad pura, que optan por estilo realistas que se aproximen a lo que nos podemos encontrar en la vida real. V-Rally se sitúa a medio camino de ambos, algo que puede lograr que guste a ambos tipos de jugador, o a ninguno.
Comenzaremos hablando un poco del juego en si y que nos plantea. La intención es inicial es presentar un juego con un modo carrera aderezado con distintos desafíos, debes ir mejorando en cada apartado para lograr hacerte con las habilidades y vehículos necesarios con los que competir en distintos premios. Para ello contaras no solo con tus vehículos, sino que detrás tienes un elenco de ingenieros, mecánicos y representantes a los que debes contratar y pagar. Para ello necesitas ganar premiso para lograr recompensas económicas, pero también patrocinadores que te ayuden en tus gastos.
En este aspecto es cuando las cosas comienzan a torcerse y es que todo esto no termina de influir en el desarrollo, al final están, pero lo terminas viendo como algo que realmente no sabes muy bien que «pinta» exactamente.
Por otro lado los modos de competición son variados, en distintas condiciones y poco a poco nos hacemos con una bonita colección de vehículos con los que competir.
En todo caso los vehículos vienen con una configuración predeterminada, aunque nos dan algo de margen para cambiarla según creamos conveniente, además de poder variar el nivel de IA contra la que competimos o reparar nuestro vehículo si ha sido dañado en competiciones anteriores.
Debemos decir que algo que si me ha gustado en lo hermoso de los escenarios. Aunque no tengan una calidad gráfica destacable, si están muy bien escogidos para ofrecer bonitas escenas sobre arena, barro, entre barrancos, bosques o en un paisaje nevado. No es que sean malos gráficos, pero para un título que pretende volver a ser una referencia, deberían haber apostado más fuerte y trabajado mas en apartados gráficos como las texturas y las animaciones que están lejos de lo que podríamos esperar. Esto se nota en ejemplos como las escenas boscosas, pasos por agua, barro, etc. donde se aprecia que no se ha pulido como debería.
Por desgracia los vehículos tampoco salen mejor parados y siguen la misma senda, poco detalle y todo muy plano, incluso cuando vas lleno de golpes.
En cuanto al aparatado sonoro, casi es mejor no detenerse en ello ya que no está pensado para ser parte protagonista, si no meramente una comparsa y no dejar el juego mudo. Cumple y gracias.
Variedad de modos para una misma sensación
Cuando compites en distintos escenarios, esperas distintas sensaciones y comportamientos acordes a ello en el coche. V-Rally 4 ofrece un comportamiento muy lineal, apenas se aprecian los cambios menos justo en el punto de pasar de uno a otro. Es decir si estas en tierra y pasas a asfalto el coche lo nota, pero una vez estas en tierra o en asfalto te falta esa sensación de que son superficies totalmente diferentes.
Como punto a favor contamos con varios modos de competición: Rally, V-Rally Cross, Hillclimb, Buggy y Extreme-Khana. Cada uno de ellos con sus recorridos y coches con los que poder competir. Es de agradecer que exista esta variedad para darnos un mayor aliciente a probar nuevas formas de jugar y probar nuevos estilos.
Por otro lado la física del juego en determinadas ocasiones tiende a perder el norte y puedes terminar por perder el control en puntos donde no debería pasar por el comportamiento errático del coche. Esto no es algo general, pero si sucede con cierta frecuencia y pueden echar al traste una carrera perfecta.
Modo Multijugador Online
El modo Online de V-Rally 4 no es que sea de los mas amplios, pero añaden un plus que se agradece. Puedes escoger Partida Rápida para competir en cualquier pista en partidas cortas pero intensas, o bien el modo Multijugador Online con el que puedes competir con hasta 8 jugadores. En este último podemos unirnos a una sesión con unas especificaciones ya fijadas por otros usuarios, como terreno, recorrido o coche a usar, o bien crear nuestra propia sesión y poner las condiciones. Por otro lado puedes competir en modo pantalla partida en local, por lo que puedes sentarte al lado de tu rival y jugar de tu a tu, algo que se hace muy divertido por los piques que se ocasiones.
Conclusiones
Lo mejor de V-Rally 4 es sin duda su regreso, un título que a pesar de que en esta ocasión no ha dado todo lo que podía, tiene un gran potencial que esperemos sea aprovechado en el futuro. Dicho esto lo cierto es que no es un mal juego, solo adolece de ciertos problemas que hacen que el jugador termine por dedicarle poco tiempo antes de pasar al siguiente. La calidad justa de sus gráficos y sobre todo los problemas de jugabilidad hacen mella en el juego. Si eres de los que anhelaban el retorno de V-Rally seguramente lo disfrutarás, pero solo a la espera de un V-Rally 5 que culmine el retorno de este clásico.