Siguiendo con sus controvertidas medidas para hacer de Twitter un lugar más libre, Elon Musk propuso una encuesta entre los usuarios sobre el tema de devolver o no la cuenta de Twitter a Donald Trump. Recordemos que el ex-presidente fue baneado de la red social debido a sus comentarios que tras el asalto al capitolio fueron calificados como una incitación a la violencia.
Con las de 15 millones de respuestas el resultado de la encuesta fue del 51,8 % a favor de restituir su cuenta a Trump y del 48,2 % en contra. Con este resultado Musk anunció la readmisión de Trump y la restauración de su cuenta, algo que podemos comprobar que ya se ha producido. Sin embargo el resultado no ha sido el esperado y Donald Trump ha declinado regresar a la red del pajarito.
Según informa Reuters al enterarse de la restitución de su cuenta el ex-presidente rechazo volver aduciendo que no ve motivos para hacerlo. Desde su expulsión de Twitter Trump creo su propia red social Truth Social, la cual le ha servido como plataforma para expresar sus opiniones sin cortapisas. Según Trump Twitter sigue sufriendo la presencia de bots, cuentas falsas y que los problemas que enfrentaba eran «increíbles», mientras que Truth Social estaba funcionado fenomenalmente bien.
De momento parece que este desprecio a Musk se mantiene ya que la cuenta del ex-presidente no ha tenido movimiento, pero no es de descartar que finalmente este retome la actividad aunque sea en menor medida que en tiempo pasados, dando preferencia a su propia red social.
Elon Musk se anunciaba como el salvador de Twitter, una red social que creía que estaba en decadencia y perdiendo la libertad de expresión que hizo de ella el lugar predilecto por millones de usuarios para expresarse. Tras una compra que ya de por sí fue una historia rocambolesca, finalmente Musk se hizo con Twitter pero lo que parecía que sería un rejuvenecer de la misma se convirtió en lo que parece una caída en picado.
Una de las primera medidas que Elon Musk tomó reciente aterrizado en la sede de Twitter fue el despido de miles de empleados, algo que se realizó de una forma que muchos calificaron como poco empática y de forma dictatorial. Sin embargo eso fue solo uno de una serie de problemas como el masivo abandono de anunciantes, o el cobro por la verificación de cuentas que conllevó la aparición de decenas de cuentas falsas y que fueron minando la confianza en Musk como nuevo responsable de la red social.
Los planes del hombre más rico del mundo para Twitter no parecían ir como el quería, por lo que decidió volcarse en mejorar la situación con la creación de lo que llamó Twitter 2.0. Para ello envió un comunicado a sus empleados conminándoles a trabajar de forma extremadamente dura durante muchas horas o atenerse a las consecuencias, es decir el despido.
«En el futuro, para construir un Twitter 2.0 rompedor y tener éxito en un mundo cada vez más competitivo, necesitaremos ser extremadamente duros. Esto significará trabajar muchas horas a gran intensidad. Solo un desempeño excepcional constituirá un aprobado»
En la misma misiva a los empleados se les invitaba a aceptar la propuesta pulsando un enlace que les llevaba a un formulario. En caso de no estar de acuerdo de forma automática a las 17.00 horas del horario del Este de Estados Unidos serían despedidos con una indemnización de tres meses. Para evitar problemas además se cerró la sede central y se bloqueo el acceso a los empleados por temor a posibles «represalias» por su parte.
Lo que ya de por si son unas formas más que dudosas tuvieron como consecuencia que muchos de sus empleados decidieron no aceptar y por tanto ser despedidos de la red social.
Lo cierto es que todo esto no ha hecho más que acrecentar las dudas sobre el futuro de la red social, lo que ha provocado que muchos usuarios vean un futuro muy negro para la red social y lo hayan expresado con los hashtag #CierraTwitter o #TwitterDown. De momento parece muy pronto para hablar de cierres, pero desde luego ahora mismo no parece que el futuro sea muy halagüeño para la red social, mas aún cuando ante la falta de personal se está comenzando a cuestionar la capacidad de la empresa para mantener el servicio e incluso la seguridad de los datos de sus usuarios.
Elon Musk completó la compra de Twitter hace apenas dos semanas y a parte de los despidos masivos o cesar a parte de la junta directiva. Su mayor «innovación» al cargo de director ejecutivo y dueño de la red social parece ser el relanzamiento de la suscripción de la plataforma, llamada Twitter Blue y, entre otras cosas, que uno de sus beneficios es el tic azul de verificado al lado del nombre de usuario. Esto en su mente y la de su círculo debió parecerles una idea espectacular, pero, en la práctica, ha resultado ser todo un peligro y la creación de un sinfín de cuentas haciéndose pasar por personalidades, empresas o instituciones al lado de cuyo nombre aparece ese tic siempre asociado con cuenta oficial.
Durante pocas horas en el día de ayer apareció en las cuentas verificadas oficiales un doble tic, donde se podía ver el clásico tic azul de Twitter y un tic de color gris con la palabra «oficial» justo debajo indicando que esa cuenta está verificada por ser realmente oficial o no. Al rato, Elon Musk decidió simplemente eliminar esa información y ahora aparece pulsando en el tic azul si es cuenta verificada de pago o verificada por ser oficial. Todo este desaguisado ha traído los problemas que hasta un becario en su primer día se podía imaginar: cuentas parodia con nombres existentes y el tic azul al lado. Hasta ahora el tic verificado significaba que esa cuenta era quién decía ser y aportaba una confianza a la hora usar Twitter, puesto que si un tweet de una cuenta llamada «Casa Blanca» sin tic verificado indicaba que iba a caer un meteorito automáticamente pasabas, y si veías que era la cuenta oficial al tener ese tic azul, entonces te lo creías. Hasta ahora.
El lanzamiento de Twitter Blue se pospuso con motivo de las elecciones de medio mandato que se celebraron recientemente en Estados Unidos y así evitar la propagación de desinformación, confirmando con eso que saben que este nuevo verificado puede traer problemas de desinformación. Tras el lanzamiento ayer, en pocas horas aparecieron cuentas falsas con el tic verificado de Nintendo of America, LeBron James, Donald Trump, Valve o incluso Jesucristo.
Como se puede apreciar en los tweets y fotos anteriores, el hecho de dar la verificación a cualquier usuario que pague los 8$ al mes que cuesta Twitter Blue ha supuesto una pésima idea que, además, va a espantar aún más a los anunciantes de la plataforma, supuestamente una de las mayores preocupaciones de Elon Musk y que buscaba subsanar. A todo esto hay que sumar loa despidos masivos que incluyen, entre otras áreas, la de moderación de contenido.
No se sabe realmente qué es lo que pasa por la mente de Elon Musk, quizás simplemente se ha propuesto destruir la red social poco a poco e implosionarla desde dentro con decisiones muy cuestionables. Lo que sí ha demostrado y ha dejado claro toda esta operación y toma de decisiones es que el que un día parecía un visionario que nos iba a plantar en Marte, simplemente es la persona con más dinero del mundo tomando decisiones con poco criterio y como si de un juego de azar se tratara.
Como se había filtradoTwitter ha comenzado el proceso de despido de buena parte de sus empleados, que si bien no hay información oficial se cree que será del 50% de la plantilla, es decir a unos 3.700 trabajadores.. Esta era una de las medidas que se esperaban tomase Elon Musk tras la compra de la empresa, llegando incluso a barajarse que afectaría al 75% de la pantalla.
Tal y como podemos leer en Reddit los empleados han comenzado a recibir una carta en la cual se les notifica que la empresa empieza un proceso de despido y que de forma inmediata se bloquea las credenciales de acceso de algunos empleados, conminándoles a permanecer atentos a sus correos a la espera de recibir un nuevo correo en el que se les comunicará si son o no despedidos. Si, posiblemente sea la peor manera de afrontar una situación así.
Algunos empleados ya han recibido la notificación de su despido y tal y como recogen medios como Los Angeles Times algunos empleados han presentado una demanda colectiva contra la ahora empresa de Elon Musk alegando que Twitter está violando la ley federal y de California Worker Adjustment and Retraining Notification Act. Si esta prosperará la empresa se vería enfrentada a nuevos desembolsos, aunque eso no parece que le preocupe a Musk.
Los afectados han comenzado a dar a conocer sus historias en Twitter con los hashtag #LoveWhereYouWorked y #oneteam donde podemos ver que ya son muchos los que han recibido la mala noticia, algunos de forma oficial y otros viendo como se les ha eliminado de los canales oficiales de trabajo como Slack.
Looks like I’m unemployed y’all. Just got remotely logged out of my work laptop and removed from Slack. #OneTeam forever. Loved you all so much.
Una de las tónicas habituales en cualquier compra de una empresa es tratar de reducir gastos y maximizar ingresos, algo que no en pocas ocasiones suele pasar por fuertes recortes de plantilla. Cuando Elon Musk estaba cerca de culminar sus planes de compra de Twitter se filtró una información que apuntaba a que estaría pensando en despedir al 75% de la plantilla. Ya con la compra completada afirmó que esa información no era correcta, algo que según conocemos hoy sería verdad, pero con matices. Según indican desde BloombergMusk despedirá al 50% de la plantilla de Twitter, algo que podría producirse mañana 4 de Noviembre.
Según la información ofrecida por Bloomberg el número de despidos podría ascender a 3700 personas, que si bien no llega a las primeras cifras barajadas sigue representando un número considerable de recortes de puestos de trabajo. Aun con todo parece que la cifra no está cerrada y podría variar antes de su entrada en vigor.
Estos despidos representarán un nuevo desembolso en indemnizaciones, pero esto no es algo que le preocupe a una persona que acaba de gastarse 44.000 millones de dólares en hacerse con la red social. Sin embargo en los últimos días se había rumoreado que Musk pretendería ahorrarse estos costes implementando medidas como obligar al trabajo presencial a toda la plantilla para incentivar abandonos, algo que parece que finalmente ha descartado optando por una medida más drástica.
Esta decisión se englobaría dentro de los planes de Muks de rentabilizar la red social, algo que ya comenzó a hacer con su intención de obligar a hacerse con una suscripción Blue para lograr beneficios como la insignia de cuenta verificada.
De momento no hay confirmación oficial de esta información, pero de ser cierta solo tardaremos unas horas en saberlo.
Aunque Musk se ha llenado la boca de repetir que con su compra quería hacer de Twitter un lugar más libre para expresarse, lo cierto es que esto no impide que su lado más empresarial haya entrado en acción buscando nuevas formas de monetización. Una de ellas podría pasar por implementar un sistema de pago por la marca de verificación en Twitter, un sistema que atestigua la autenticidad de una cuenta en la red social.
Usando una vez más su cuenta en Twitter, Elon Musk ha publicado un nuevo Tweet en el que da a entender su intención de implementar un sistema de pago mensual para aquellas cuentas que deseen contar con el emblema de cuenta verificada.
«El pájaro está liberado», con esta frase en excéntrico millonario sudafricano Elon Musk anunciaba la conclusión de la compra de Twitter, un proceso que se convirtió en una telenovela donde había de todo, desde denuncias de engaño en las cifras a la posible entrada de exempleados de Twitter en el juicio que se venía tras la espantada del sudafricano. Pasado todo esto Musk ha cumplido su palabra y ha cerrado la compra dando muestras de su excentricidad, pero también de que no le va a temblar el pulso en purgar la compañía.
Como cabeza de la red social Elon Musk ha hecho su aparición en la central de la compañía con un lavamanos, tal vez como un aviso de que piensa «limpiar» la red social para hacer de ella un supuesto reducto de libertad, algo de lo que según se ha quejado estaba falta.
En su primer día al frente de la compañía el sudafricano ha sacado la escoba y de golpe ha despedido a buena parte de la junta directiva de la red social. Musk ha enseñado la puerta de salida al hasta ahora consejero delegado, Parag Agrawal; al director financiero de la red social, Ned Segal; a la responsable jurídica, Vijaya Gadde, y al que ha sido hasta ahora el consejero general, Sean Edgett. Estos por cierto no se van de vacío y es que todos ellos tenían suculentas clausulas de indemnización, y por otro lado era algo que se esperaban y que el propio Muks ya había mencionado.
De momento esto es todo lo que ha hecho el de Pretoria, pero se espera grandes cambios en relación a aspectos como el control de las cuentas bots y el spam, la readmisión de usuarios expulsados como el expresidente Donald Trump, quien por cierto ya ha felicitado a Musk por la compra, y a otros aspectos. Donde parece que se ha pisado el freno es en su intención de despedir a buena parte de la actual plantilla, y es que en su día se conoció que Musk había comunicado a sus inversores su intención de despedir al 75% de la plantilla, algo que ahora habría comunicado a los afectados que no se hará.
Desde luego está claro que a pesar de todo lo que ha dicho el nuevo jefe de Twitter tendrá que buscar maneras de hacer rentable la red social, algo que habrá que ver si es compatible con sus declaraciones de hacer de esta un centro de libertad de expresión. De momento le daremos el beneficio de la duda a la espera de ver sus actuaciones y el resultado de ellas.
Pues sí, tenemos nueva vuelta de tuerca en la ya rocambolesca historia de la compra de Twitter por parte de Elon Musk, pareciendo ya mas una novela turca de desamor que una compra seria de dos de los grandes actores en el mundo de la tecnología y las redes sociales.
Como recordareis en «capítulos anteriores» nos habíamos quedado en que con la duda de una presencia mayor de cuentas bots de las declaradas por Twiiter, Elon Musk había decidido echarse para atrás en su propuesta de compra. Esto había llevado a la compañía del pajarito azul a demandar al millonario sudafricano, dejando el capitulo en pleno suspense abocados a una resolución por la vía de los tribunales.
Siguiendo los patrones de un buen culebrón el nuevo episodio da un nuevo giro a la trama y hace solo unas horas las dos partes parecen que han vuelto a aproximar posturas, lo que habría llevado a que Elon Musk decidiera regresar a su oferta inicial y retomará la propuesta de compra de Twitter. Al menos por ahora.
Según ha confirmado Twitter, Elon Musk ha remitido a la compañía una carta en la que comunica su intención de compra de la red social pagando un total de 54,20 dólares la acción, es decir la misma cantidad que ofreció originalmente y que arrojaría una cifra total para la operación de compra de 44.000 millones de dólares, unos 41.000 millones de euros.
Aunque de momento no se conocer el motivo para este nuevo cambio de opinión, todo apunta a que la cercanía del juicio que recordemos que se tendría que celebrar el 17 de Octubre, ante el temor a perderlo habría hecho recapacitar al sudafricano y finalmente llevarle a mantener su oferta. Como no, en su propio perfil Musk ha confirmado esto con un tweet en el que afirma que la compra de Twitter es solo un primer paso en la creación de «X», la aplicación para todo, aunque si entrar a dar detalles de a que se refier.
Por si la mala situación en la que ha quedado Twitter tras haberse echado para atrás Elon Musk en su oferta de compra no fuera suficiente, hoy ha sufrido serios problemas en su servicio.
A medio día del 14 de Julio muchos usuarios comenzaron a tener problemas al acceder a Twitter, pues si bien se cargaba la web esta no se actualizaba con los nuevos tweets. El problema se extendió a las aplicaciones móviles e incluso a servicios de terceros, lo que evidenciaba que era un error interno del servicio.
Desde la cuenta de soporte de Twitter se confirmó el problema, afirmando que se estaba trabajando en solucionarlo. Sin embargo el fallo debía ser mayor de lo que se esperaban y es que han tardado 3 horas en dar por solucionado, algo que nuevamente han comunicado en la cuenta oficial de soporte de Twitter.
Mientras en la cúpula de la red social luchan por tratar de que Elon Musk cumpla su compromiso de compra, en la base los usuarios asistimos a uno de las contadas caídas de un servicio que suele presumir de su estabilidad.
Nuevo capitulo en la relación de amor-odio que mantienen Elon Muks y la red social Twitter, y es que el millonario sudafricano ha decidido retirar la oferta de compra que realizó a finales del mes de Abril de este año. Sin embargo, y en un curioso giro del destino, ahora es la junta directiva de Twitter la que no está de acuerdo y pretender forzar al hombre más rico del mundo a completar la compra.
Como todos recordareis a finales de Abril Elon Musk agitaba los cimientos del mercado tecnológico con una oferta de 44.000 millones de dólares para completar la compra de Twitter. Esta oferta inicialmente no fue bien vista por la directiva de la red social, quienes incluso llegaron a plantear la opción de la pildora envenenada para tratar de boicotear esta compra, aunque finalmente decidieron sentarse a negociar y aceptar la propuesta.
Cuando ya todo parecía encauzado para que Elon Musk se hiciera con Twiiter, las dudas sobre el número real de cuentas fantasmas hizo que el excéntrico millonario reclamase a la red social que aportará pruebas que confirmarán el número real de estas cuentas fantasmas, algo que parece no se ha producido y que ha motivado que finalmente Elon Musk haya decidido retirar la propuesta de compra de Twitter.
Mientras Twitter afirma que las cuentas bots son menos del 5% de los usuarios, Musk estima que el número real puede alcanzar el 20% y acusa a la red social de no haber facilitado las cifras reales. Esto habría hecho que se replanteara la operación hasta terminar por decidir cancelarla.
Por su parte Twitter ahora no está de acuerdo con esta decisión y por boca de su presidente anuncian que tomarán medidas legales para obligar a Musk a cumplir el acuerdo de compra.
The Twitter Board is committed to closing the transaction on the price and terms agreed upon with Mr. Musk and plans to pursue legal action to enforce the merger agreement. We are confident we will prevail in the Delaware Court of Chancery.
Esta demanda tiene más visos de prosperar de lo que podría pensarse y es que al parecer en el acuerdo de compra Elon Musk habría renunciado de forma explicita a hacer una auditoría de las operaciones de la compañía, además de haber aprobado una penalización millonaria en el caso de que una de las partes se echará para atrás.
A la espera de ver en que termina este proceso ya hay quien ve esto como una forma de presión de Musk tratando de conseguir una rebaja del precio y es que la oferta inicial realizada por el millonario era con mucho superior al valor en ese momento de la compañía.