SCUF, marca especializada en la fabricación de mandos gamer de alto rendimiento, ya nos ha dejado muestra de su saber hacer con los Instinct Pro para Xbox y los Reflex Pro para PlayStation. Ahora se aleja de las consolas y nos presenta el nuevo SCUF Envision Pro, un mando que se postula como la mejor opción para PC y que guarda muchas similitudes con las versiones para consola.
El SCUF Envision Pro cuenta con la tecnología más puntera de la marca de Corsair, pero también con las opciones de personalización que hacen de estos los mandos más personalizables del mercado, algo que hemos puesto a prueba con una edición customizada que hoy analizamos a fondo.
SCUF Envision Pro, especificaciones:
- Dimensiones: 165 x 107.5 x 63.5mm
- Peso: 285 gramos
- Conectividad:
- Inalámbrica Corsair Slipstream
- Cable USB-C trenzado de 2 m (incluye adaptador USB C)
- Interruptores:
- Sticks simétricos
- Cuatro paletas traseras
- Botones de acción lateral (SAX)
- Botones mecánicos OMRON ABXY
- Cinco teclas G integradas
- Gatillos con activación instantánea
- Puertos:
- USB-C
- Conector para auriculares estéreo de 3,5 mm
- Iluminación: RGB
- Software: iCUE
- Compatibilidad: Windows 10 / Windows 11
Unboxing
El nuevo mando para PC de Scuf es un producto premium, de gran calidad y que está enfocado a un público que busca lo mejor de lo mejor. Así nos llega a casa con un empaquetado acorde, con una caja de cartón duro de fondo negro, el cual hace que tanto la imagen del mando como el nombre y los diversos sellos de la parte frontal destaquen. En nuestro caso vemos que se identifica como el modelo SCUF Envision Pro, con una imagen no del modelo escogido sino de una versión estándar.
En la parte posterior encontramos una imagen tanto del frontal como de la trasera del mando, junto con una lista de las nueve características principales del mando, las cuales vienen escritas en cinco idiomas.
Dentro de este envoltorio encontramos el verdadero cofre donde se guarda el mando y sus accesorios. Este cofre de cartón duro viene con un acabado negro con un entramado geométrico como patrón y el logo de la marca en el centro. Al abrir la parte superior podemos ver el mando, el cual viene muy bien protegido por una base de plástico duro y una pieza de goma espuma que, al servir como tope contra la tapa, evita que el mando se mueva, Envolviendo todo esto tenemos una tira de papel donde nos animan a descargar el software iCUE, el cual nos va a permitir configurar el dispositivo, que cuando lo retiramos nos deja ver no solo el mando, si no un conector de tipo dongle para su uso inalámbrico
Como ya hemos mencionado, cada mando SCUF Envision Pro se puede personalizar tanto en el color o diseño de su plate como en prácticamente cada elemento que lo compone, desde los sticks a los disparadores. En nuestro caso nuestra unidad viene totalmente personalizada y comprobamos como los elementos extra integrados también viene con esta personalización.
Los elementos incluidos con la compra del SCUF Envision Pro son el mando, un dongle de conexión inalámbrica, un cable USB A a USB C, un adaptador USB A a USB C, dos sticks, una herramienta de elevación, cuatro tapas y la habitual documentación. Con esto ya solo nos queda conectar el mando al PC y disfrutar de nuestros juegos favoritos.
Diseño personalizable que multiplica tus opciones de ganar
El SCUF Envision Pro bebe de la inspiración de sus hermanos para consola, por lo que tenemos un diseño muy similar a estos, incluyendo la distribución de botones, sticks y palancas, uno de los elementos distintivos de los mandos de la marca.
Como ya he mencionado, los mandos de SCUF permiten una personalización extrema, que va desde el plate hasta cada uno de los elementos del mando, incluyendo sus botones, disparadores, botones laterales e incluso los anillos de fricción que rodean los sticks. En mi caso he optado por un acabado con un color degradado que va desde un morado claro hasta un rosa vivo. con distintas tramas de tipo tech, caracteres hiragana con la palabra «Videojuego» y una calavera en un lateral. Lo he combinado con botones en rojo, anillos de fricción en gris, disparadores superiores en blanco y una trasera con un gris claro. La intención no era solo conseguir una estética llamativa, sino demostrar hasta que punto podemos personalizar el mando. Eso sí, en función de las opciones que escojamos, el precio final variará.
A la hora de cambiar elementos como los sticks o la cruceta, en algunos mandos tenemos que recurrir a ejercer una considerable presión o en algunos casos incluso a retirar algún tornillo. Con los mandos de SCUF nada de esto es necesario, ya que la parte superior del mismo se sujeta mediante un sistema de imanes que, si bien lo sujetan con firmeza, permite retirarlo para acceder a los sticks y poder cambiarlos cuando nos haga falta. Este sistema también permite adquirir plates con los que personalizar el mando sin tener que comprar uno nuevo.
Retirar el plate es algo que se puede hacer simplemente con la mano, pero si tienes alguna dificultad puedes usar la herramienta que se incluye en el pack, aunque personalmente no la veo necesaria.
Al voltear el mando encontramos algunos de los elementos que hacen de este mando algo tan especial. Para empezar, tenemos un pequeño deslizable que nos va a permitir cambiar entre conectividad inalámbrica o por cable. Bajo este y situados cerca de los agarres laterales tenemos las palancas inferiores, las cuales añaden un total de cuatro nuevas opciones de control. Su situación hace que no tengamos que mover las manos para accionarlas, lo que a su vez conlleva una mayor rapidez en nuestras acciones y por ende en el juego.
Bajo los gatillos del SCUF Envision Pro tenemos una pequeña palanca que nos va a servir para variar la forma de actuar de estos. Con ellos podemos pasar de un disparador más progresivo, idóneo para juegos de tipo carreras donde podemos controlar la aceleración, a un modo más inmediato donde con un mínimo de recorrido tenemos la acción. Este modo puede ser mejor cuando lo que necesitamos en rapidez y no tanto control de la acción.
En la parte frontal SCUF ha incluido una serie de botones G junto al conector jack de 3.5m para los auriculares. Como nos muestra una pegatina que podremos retirar, de inicio estos botones vienen configurados como controles multimedia, pero al tratarse de botones programables podemos usarlos para lo que necesitemos. No hace falta pensar mucho para saber lo útil que pueden ser este tipo de botones de acceso rápido en una partida, sobre todo en juegos donde tenemos una amplia variedad de acciones o comandos que usar.
Si nos alejamos un poco podemos ver como los agarres del SCUF Envision Pro vienen con un acabado rugoso, lo que nos va a facilitar el agarre e impedir que tras largas sesiones de juego el mando se nos pueda escurrir o resultar incomodo al usar.
La colocación de los botones nos recuerda mucho a los que vimos en las versiones para consola, siendo una mezcla de ambos diseños. Así tenemos los gatillos dobles, dos sticks con acabado cóncavo, los botones ABXY, la cruceta, los botones de menú, el de encendido/apagado y un botón para cambiar entre los distintos perfiles que tengamos creados. A estos Scuf añade los nuevos botones de acción lateral SAX, colocados en los laterales del mando y que también podemos configurar. En realidad, es una propuesta que la marca ya había usado antaño, pero que llevábamos tiempo sin ver en los nuevos modelos.
El conjunto de todas esto es un mando muy cómodo de usar, pero que sobre todo permite una amplia variedad de acciones que repercuten de forma decisiva sobre nuestra forma de jugar. Contar con las palancas y los botones laterales es un extra, pero que no deja de requerir un cierto tiempo de adaptación, sobre todo en el caso de estos últimos para evitar presionarlos sin querer al hacer uso de los gatillos superiores.
Conectividad: a elección del consumidor
El SCUF Envision Pro se puede usar tanto de forma inalámbrica como cableada. En el primero la conexión se realiza mediante un Dongle USB que nos recuerda mucho al que Corsair usa para otros dispositivos, pero en este caso sin el relieve que los suele acompañar y cambiando el logo por el de SCUF.
Si preferimos usar el modo cableado tenemos un cable trenzado de 2 metros, donde el extremo con conector USB C se conecta al mando y el lado opuesto tenemos un conector USB A para conectar al PC.
Si vamos escasos de puertos USB A en nuestro PC, gracias a un adaptador también podemos escoger usar un puerto USB C, siempre claro que nuestro equipo dispone de él. Por si te lo preguntas, si, el mismo adaptador se puede usar con el Dongle de conexión inalámbrico.
iCUE, un programa más útil que nunca
Aunque luciendo la marca de SCUF , este mando no deja de ser un producto Corsair. El ejemplo más claro es que el software que usamos para su configuración no es otro que iCUE, el cual ya hemos visto en componentes, teclado o auriculares de Corsair. Es decir, no tenemos la configuración en el propio mando como en el caso de sus hermanos para consola, sino que, al ser un equipo pensado para PC, se usa el programa de Corsair para multiplicar sus opciones de personalización, aunque ojo, para funciones como el uso de macros, es necesario que iCUE se ejecute en segundo plano para que estas funcionen.
Aunque lo que nos interesa es el mando, en este caso el programa detecta tanto este como el dongle de conexión, permitiendo que forcemos la conexión y actualicemos el firmware si es necesario. Por supuesto en el caso del mando las opciones son muchas más.
Aunque de forma muy discreta, el SCUF Envision Pro cuenta con iluminación RGB, la cual se muestra en los botones G y en una tira LED que se muestra bajo ellos. Esta iluminación es personalizable, pudiendo escoger perfiles ya creados, crear el nuestro o escoger el formato de patrón de Corsair que hace coincidir la iluminación con una escena concreta.
Con tanto número de botones, disparadores y palancas, por suerte SCUF nos da la opción de mapearlas mediante la pestaña «Asignaciones». Así podemos escoger remapear los controles de forma que se ajusten a nuestra forma de jugar, pudiendo incluir en ella el uso de macros, usar como controles multimedia, etc.
Con asignaciones de hardware haremos lo mismo, pero en este caso solo con las asignaciones que se guardan en el mando y que no dependen del software.
Del mismo modo que personalizamos los botones, también podemos personalizar tanto los gatillos como los sticks, adaptando su respuesta con varios perfiles prefijados: predeterminado, lineal, exponencial o agresivo, aunque también podemos escoger personalizarlo a nuestro gusto.
Por último, para los que busquen una personalización máxima podemos escoger el nivel de vibración del mando, algo que haremos en porcentaje de forma independiente para cada lateral, aunque también contamos con algunos ajustes prestablecidos para algunos juegos.
Experiencia de uso
De Scuf ya he tenido el placer de probar un bueno número de mandos, aunque normalmente siempre para consola. El rendimiento siempre ha sido su punto fuerte, aunque con algunos aspectos mejorables. En los primeros modelos las palancas inferiores no tenían la mejor durabilidad, en buena parte por su diseño. Sin embargo, esto es algo que han ido perfeccionando y en los últimos modelos no he tenido ningún problema, aunque no soy precisamente delicado al usarlos.
Me considero un jugador «destrozamandos«, donde botones y sticks sufren mis envites y a poco que no sean de calidad terminan mostrando signos de desgaste. A pesar de contar con varios modelos, Scuf es por norma la marca escogida como mi mando «habitual» y es que la calidad de su diseño, pero sobre todo su excelente rendimiento, hacen que siempre regrese a ellos.
El SCUF Envision Pro es un excelente ejemplo del renombre y éxito de la marca, con amplias opciones de personalización y un diseño que hace que se amolde como un guante a nuestra forma de jugar.
Desde shooters hasta MOBA o MMORPG, el mando de SCUF ha demostrado que destaca sobre el resto. Sus sticks ofrecen un rendimiento realmente excelente, tanto a la hora de realizar cualquier tipo de movimientos como gracias a las opciones de personalización que nos permite minimizar las zonas muertas o variar su sensibilidad. Lo mismo se puede decir de la cruceta, con una pulsación claramente perceptible que nos facilita su manejo, o del resto de los botones.
Si eres de los que gustan de jugar a títulos como Warzone, las palancas inferiores te dan la vida y es que es mucho más sencillo realizar múltiples acciones al unisonó. Correr, saltar, deslizarse y disparar solo nos va a llevar una décima de segundo, algo que marca la diferencia.
Por otro lado, los botones laterales SAX es un punto que no ha terminado de convencer, puede que sea por mi imposibilidad de conseguir usarlos correctamente o puede que sea por su situación, pero lo cierto es que no termino de acostumbrarme e incluso me parecen innecesarios, un poco eso de «rizar el rizo». Por suerte es algo que cada usuario puede escoger usar o no.
Su diseño personalizable nos permite tener un mando único y ahora además lo tenemos con iluminación RGB, por lo que podemos llevamos el tema aún más lejos, aunque ya os advierto que dejarlo a nuestro gusto puede que este reñido con nuestro presupuesto y es que no sale barato.
Conclusiones
Con un precio que parte de 199.99€ para el SCUF Envision Pro y de 149.99€ para el SCUF Envision, posiblemente estamos ante el mando que mejor experiencia de uso me ha dejado jugando en PC, tal vez con la salvedad del Xbox Elite Series 2 .
En mi caso el diseño escogido hace que siempre permanezca impoluto, sin rastro de huellas ni nada que lo haga perder su buen aspecto, algo que dado el precio que tiene siempre es de agradecer. Además, su diseño de plate magnético permite cambiar los sticks con una facilidad pasmosa, por no olvidar que podemos cambiar su aspecto por completo adquiriendo una nueva carcasa.
Sin embargo, donde destaca este mando es por su rendimiento, por su amplia variedad de opciones y personalización, lo que hace que se gane nuestros mejores elogios.