Tras sufrir una pandemia comenzaron a surgir apuestas por saber cúal sería la siguiente gran catástrofe que asolaría a la humanidad. Junto con la invasión alienígena otras teorías más realistas apostaban a un problema en el mundo digital, concretamente en la caída de Internet, lo que según muchos podría llevar a la caída de la economía mundial.
Estos funestos presagios no se han producido, pero hoy hemos asistido a una muestra de lo sencillo que es causar la caída de miles de webs y dejar a millones de usuarios sin la posibilidad de acceder a sus servicios. Por suerte también hemos asistido a como la rápida actuación de los implicados ha llevado a que este «apagón» solo haya sido cosa de unas horas, pero que nos deja la pregunta de ¿Porqué ha ocurrido?
Lo que hoy ha sucedido es la caída de Fastly, un servicio CDN por las siglas en inglés de «Content Delivery Network» o «Red de distribución de contenidos» en la lengua de Cervantes. Sin embargo esto no aclara mucho a la mayoría de usuarios, por lo que vamos a explicar que es un CDN y porque ha pasado lo que ha pasado.
¿Qué es un CDN?
A la hora de crear una web o un servicio que vaya a estar disponible online, estos se alojan en servidores. Estos servidores están alojados físicamente en un emplazamiento concreto desde el que se sirve los datos que llegan al usuario en forma de web o del servicio que se trate. Sin embargo esto tiene un problema y es que la velocidad de carga que el usuario percibe, y por ende la experiencia de uso, depende tanto de la capacidad de los servidores como de la distancia a la que el usuario este. Dicho de otra forma un servidor (o varios servidores) tendría que hacer frente a millones de llamadas y enviar a cada usuario los datos del sitio web. Estos tomarían un tiempo en llegar en función de la distancia, por lo que a mayor distancia más tardaría en cargar una web o servicio.
Lógicamente la forma más sencilla de mejorar la experiencia en distribuir la carga de las webs y acercarlas a los usuarios, momento en el que entra en acción los CDN. Estos servicios cuentan con servidores repartidos por todo el mundo de forma estratégica, cuando una web contrata un CDN este lo que hace es copiar en sus propios servidores aspectos como la carga de imágenes, estilos e incluso la propia web en función de lo contratado. Cuando un usuario visita una web el CDN le ofrece el contenido o parte del mismo desde el servidor que tenga más cercano a la petición, lo que acelera la carga de una forma muy importante.
Gracias a los CDN los usuarios tienen una mejor experiencia de uso e incluso pueden ver una copia de una web aunque el servidor de la misma esté caído, sin embargo el problema surge cuando es el propio CDN el que cae ya que afecta a todos las webs que usan el servicio, haciendo que los usuarios no puedan acceder a las webs ni servicios que usen los servicios del CDN caído. Esto es precisamente lo que ha ocurrido hoy con Fastly y como hemos visto ha afectado a casi todos los grandes servicios online, desde Movistar hasta Twitter o periódicos como The New York Times o El Mundo. Curiosamente también ha afectado a Amazon, lo que es llamativo ya que la compañía también ofrece servicio de CDN a través de Cloudfront, aunque se ve que no es el único que usa en sus múltiples webs
Imagenes de Bethany Drouin y Michael Schwarzenberger en Pixabay