Los dock se han convertido en uno de los dispositivos que más nos pueden ayudar a mejorar nuestra productividad, siendo capaces de convertir un dispositivo mediante un único puerto, en un dispositivo al que prácticamente podemos conectar cualquier accesorio que podamos imaginar.
Hoy analizamos para vosotros el Razer USB 4 Dock, un pequeño concentrador, o dock, que utilizando solo un puerto USB tipo C de nuestro dispositivo, nos ofrece a cambio un completo set de 14 puertos donde podremos conectar desde un cable de red, hasta un sistema de pantallas o prácticamente cualquier tipo de dispositivo o accesorio que se nos ocurra.
Unboxing
Razer nos hace llegar este dispositivo en una caja de color negro, con los laterales en el habitual verde que distingue a la compañía. En su parte frontal este packaging nos muestra una imagen del dock, destacando su uso como adaptador 14 en 1 mediante el puerto USB tipo C. Destaca también su capacidad de soportar hasta dos monitores, su conectividad ultrarrápida y sobre todo los 14 puertos de su diseño. También en este frontal ha sabido destacar su compatibilidad, ya podremos usarlo tanto con dispositivos con Windows como en Mac.
En la parte trasera de esta caja se nos muestra de forma detallada el número de puertos, así como los tipos, dejándonos ver también claramente dónde se sitúan cada uno de ellos.
Esto que vemos en realidad es una cubierta bajo la cual se oculta una caja de color marrón, que es la que en su interior aloja los distintos componentes que encontramos al comprar este dispositivo.
Al abrir esta caja en primer lugar vemos el propio dock en color negro en primer lugar, pero si retiramos este y la bandeja donde viene colocado, veremos que bajo esta encontramos dos compartimentos más donde la compañía esconde el sistema de carga, un cable USB C a USB C y la distinta documentación que acompaña a estos dispositivos.
Diseño premium, pero minimalista
Si bien lo tenemos disponible en acabado blanco y negro, es en este último en el que nos centraremos, ya que es el que hemos podido disfrutar. Tenemos ante nosotros un rectángulo con una construcción de aluminio moldeado mediante CNC a partir de un solo bloque, lo que le aporta una mayor resistencia y un diseño más pulido. Se trata de un dispositivo de un tamaño medio, con unas dimensiones de 190 x 80 x 81,5 mm, que nos arroja un peso total de 425 gramos, lo que hace que sea perfectamente posible llevarlo con nosotros en la mochila.
Su acabado liso apenas se ve «mancillado», pero eso si, en la parte superior de este concentrador encontramos el esperado logo de Razer, mientras que en la parte inferior encontramos un gran pie rectangular que nos asegura que el dispositivo no se desplazará de su lugar. Para hacerlos accesibles y cómodos de usar, los puertos se han colocado en los laterales, agrupándolos principalmente en los lados más largos.
Puertos y conectividad
Si nos ponemos a revisar los puertos de este dispositivo encontramos lo siguiente:
- USB 3.2 tipo C de 2.ª generación:
- 1 x USB C con 85 W PD (100 W PD IN) (Entrada)
- 1 x USB C (10 Gbps) PD20W
- 1 x USB C 3.2 (10 Gbps)
- USB 3.2 tipo A de 2.ª generación:
- 2 x USB A de 2.ª generación (1 con compatibilidad con BC1.2)
- USB 3.2 tipo A de 1.ª generación:
- 2 x USB A (1.ª generación – 5 Gbps)
- USB tipo A de 2.4 Ghz
- 1 x HDMI2.1 – 4K a 120 Hz
- 1 x DisplayPort 1.4 – 4K a 120 Hz
- Tarjetas SD:
- 1 x SD 3.0 UHS-II
- 1 x µSD 3.0 UHS-II
- 1 x Gigabit Ethernet (1000 Mbps, 100 Mbps, 10 Mbps)
- 1 x Puerto combinado de auriculares/micrófono de 3,5 mm con sonido envolvente 7.1
Para comenzar el repaso a las conexiones, tenemos que destacar que uno de los laterales encontramos el puerto de conexión a la corriente, por donde entran hasta 180W de potencia gracias al cargador incluido. Junto a él encontramos un puerto USB 4 tipo C, que será el que debemos utilizar para conectar a nuestro equipo, en mi caso aún portátil, y a través del cual este recibirá la conexión del resto de puertos.
La colocación de estos puertos se distribuye de la siguiente forma: en un lateral encontramos en este orden un lector de tarjetas SD y un lector de tarjetas microSD UHS-II; un puerto de audio que combina entrada y salida para micrófono y auriculares siendo compatible con sonido 7.1; dos puertos USB tipo C 3.2 de segunda generación, uno de los cuales es compatible con carga de 20 W; y un puerto USB tipo a 3.2 de segunda generación.
En el lateral opuesto encontramos el puerto de entrada de corriente del dispositivo, un puerto USB 4 tipo C que deberemos conectar a nuestro equipo, un DisplayPort 1.4, un puerto ethernet RJ 45, dos puertos USB tipo A de 3.2 de 1ª generación y un USB tipo A 2.0.
También encontramos un puerto USB de 2,4 GHz en un extremo de este Dock, mientras que en el otro extremo encontramos el botón de encendido junto a un LED de estado que se enciende para indicarnos que el dock está en uso.
Esta amplitud y diversidad de puertos nos permite ampliar las capacidades de nuestro dispositivo, incluyendo la conexión de hasta dos monitores que en función del puerto que utilicemos son capaces de ofrecernos salidas con resolución de 3840 x2160 p a 120 Hz o 1920 x1080 p hasta 240 Hz.
Experiencia de uso y opinión
El Razer USB 4 Dock cuenta con un diseño que desprende sensación de calidad, bonito a la vista y al tacto pero que como era de esperar no es especialmente eficaz a la hora de disimular las huellas. Eso sí su tamaño compacto y buena distribución de puertos, hace que sea muy cómodo y práctico en el uso.
Teniendo en cuenta que utilizaremos este dispositivo normalmente conectado a un portátil, es de agradecer que el puerto USB cuatro sea capaz de ofrecer hasta 100 W de capacidad de carga, lo que nos permite no solo conectar otros dispositivos a nuestro portátil sino también cargarlo al mismo tiempo. Esto es posible gracias a que el propio Razer USB 4 Dock recibe 180 W gracias a su cargador.
Su gran capacidad para admitir distintos tipos de accesorios conectados a través de puertos diversos convierte a este dock en una herramienta de productividad que amplía desmesuradamente las opciones que solemos encontrar en nuestros portátiles. Tanto para trabajar como para jugar la opción de poder conectar pantallas con altas resoluciones y tasas de refresco, permite que podamos ser más productivos pero que también podamos disfrutar más de nuestro contenido multimedia o cuando estamos jugando.
Personalmente prefiero trabajar con ratón antes que utilizando el touchpad, e incluso cuando estás utilizando una tablet no en pocas ocasiones agradeces poder utilizar un teclado y el ratón. Del mismo modo poder conectar este tipo de dispositivos directamente mediante un puerto de ethernet RJ 45 nos asegura una conectividad que no siempre logramos mediante wifi. Algo que se pone sobre todo de evidencia cuando viajamos.
Razer vuelve a ofrecernos un equipo de unas prestaciones destacadas, ampliando no solamente las opciones de conexión de nuestros equipos, sino las opciones para poder trabajar con una mayor productividad. Profesionales de la edición o fotografía, o simplemente creadores de contenido o usuarios que gusten de realizar vídeos y fotografías con cámaras profesionales, agradecerán opciones como sus dos lectores de tarjetas además de su amplia capacidad de transferencia.
Por calidad, amplitud y variedad de puertos, y funcionalidad, el Razer USB 4 Dock es un accesorio que, o sí o sí, debes de tener en mente si dispones y un portátil, tablet o dispositivo similar, y te ves limitado por sus propios puertos. Aunque eso si, debes tener en cuenta que hacernos con él nos va a costar 249,99€ . Todo ello hace que estemos sin duda ante un complemento perfecto para una amplia variedad de usuarios, que no podemos menos que recomendar vivamente.
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