G.Skill pone en nuestras manos un nuevo kit de memorias RAM DDR5 para que las probemos para vosotros, concretamente lo hace con G.Skill Trident Z5 Royal Neo en un kit de 16 GBx2. Se trata de una RAM con una frecuencia de 6.000 MHZ que destaca no solo en el rendimiento, sino también por un diseño que cuenta con iluminación LED que simula acabado de joyería, convirtiéndose por derecho propio en el centro de las miradas de nuestro montaje.
G.Skill Trident Z5 Royal Neo, especificaciones
- Tipo de memoria: DDR5
- Capacidad: 32GB (16GBx2
- OC Profile Support: AMD EXPO
- Velocidad máxima: 6000 MT/s
- Velocidad SPD: 4800 MT/s
- Latencia: 28-36-36-96
- Voltaje: 1.40V
- Comprobación de errores: Non-ECC
- Factor de forma: DIMM
Unboxing
La compañía nos envía el kit de G.Skill Trident Z5 Royal Neo en un empaquetado de color negro, con una banda que lo rodea donde tenemos el nombre del kit y el sello que lo acreditan como producto compatible con el perfil AMD EXPO. En la parte posterior nos dejan ver algunas de sus características, mencionando su formato DDR5-6000 y latencia CL28-36-36-96.
Abriendo esta caja de tipo cofre nos encontramos con los dos módulos que componen este kit asentados sobre una base de espuma de alta densidad de color negro, lo que acentúa el diseño plateado de las RAM. También tenemos un paño para limpiarlos y una pegatina de la marca.
Diseño de «joyería fina»
La G.Skill Trident Z5 Royal Neo viene empaquetada como si de una joya se tratara y es que ese mismo diseño es el que la compañía ha querido darle. Tenemos un duo de memorias que lucen un acabado de aluminio plateado de tipo espejo, muy fino, pero tremendamente proclive a las huellas. He ahí el motivo de incluir un paño en el kit. Eso sí, de inicio vienen con unos plásticos que lo protegen, los cuales debemos retirar antes de su instalación.
Si bien la marca ofrece también un acabado dorado, en nuestro caso tenemos el acabado de aluminio. Su diseño no es una novedad en la marca y sigue la línea de esta familia de memorias. Así encontramos los laterales con sus disipadores de calor en aluminio galvanizado tipo espejo, el cual va a reflejar toda la iluminación que incluyamos en nuestro montaje. También lo van a hacer con las huellas, por lo que no está de más pasarles el paño tras instalarlas para eliminar los rastros que podamos dejar.
Con una altura de 42mm, en la parte superior de las RAM encontramos una tira de iluminación RGB, la cual se sale de la norma al no tratarse de un espacio plano, sino que G-Skill monta una barra con un diseño de cristal que simula el acabado de una joya. Es como ver un conjunto de diamantes colocados en fina sobre la RAM. Si ya apagados gustan, cuando se iluminan la cosa sube de nivel, algo que veremos más adelante.
Los disipadores de aluminio galvanizado viene cortados con CNC de alta precisión, bajo ellos se oculta una PCB de 10 capas personalizada con los chips refrigerados con sistema thermal pad de silicona.
En lo que a estética se refiere no podemos menos que decir que va como anillo al dedo en el chasis be quiet! Light Base 900 donde lo hemos instalado, ya que sus paredes acristaladas permiten que esta RAM de vea destacando en el centro de nuestro montaje.
Buena parte del atractivo de esta RAM a nivel de diseño de lo lleva sus laterales de aspecto cromado, pero cuando encendemos el equipo esto queda opacada por los 8 LED que tiene cada RAM en su parte superior. Además su peculiar diseño hace que la iluminación no sea homogénea, sino que adopte patrones muy llamativos.
G-Skill nos ofrece un sencillo programa que podemos descargar para personalizar la iluminación de sus RAM, con diversos efectos disponibles, donde podemos regular la velocidad y brillo de la misma, aunque en mi caso prefiero tenerlo todo sincronizado y para ello usar la sincronización con el sistema de la placa.
La iluminación ARGB de la G.Skill Trident Z5 Royal Neo es compatible con Asus Aura, Gigabyte RGB Fusion, MSI Mystic Light y ASRock Polychrome Sync, por lo que podemos sincronizar la iluminación y efectos con placas base y componentes de estas marcas. También podemos hacer con Razer Chroma, aunque en ese caso todo pasa por el software de G-Skill, donde podemos activar esta sincronización.
Experiencia de uso
La G.Skill Trident Z5 Royal Neo se puede usar en cualquier base compatible, aunque la marca en este caso nos ofrece un modelo optimizado para perfiles de overclocking AMD Expo. La podemos encontrar en distintos kits y frecuencias, pero en nuestro caso contamos con el modelo UDIMM F5-6000J2836G16GX2-TR5NS de 6.000 MT/S con latencias CL28-36-36-96 y un voltaje de 1.40 V. En ella encontramos los chips SK Hynix A-dia
En general la temperatura apenas ha superado los 37 grados e incluso cuando nos ponemos exigentes la temperatura se mantiene siempre en unos limites muy aceptables. En nuestras pruebas habituales hemos buscado estresarlos con diversos test de rendimiento como Cinebench R23, 3DMark,Wprime y AIDA64. Con Wprime se ha tomado 36.054 s en completarse, mientras que con Aida64 hemos logrado velocidades de lectura de 91.775 MB/s, 83.298 MB/s de escritura y 85.802 MB/s de copia, mientras que la latencia se nos ha ido a 101.6 ns.
Conclusiones
Junto con un diseño ante el que es imposible permaneces impasible, la G.Skill Trident Z5 Royal Neo nos ofrece una RAM pensada para sacar lo mejor de los montajes con AMD, aunque sin desmerecer a los que eligen a la competencia. La compañía ha dotado a esta RAM de una gran capacidad para ofrecernos unos juegos capaces de correr a un gran nivel de FPS y hacerlo de forma estable, aunque si queremos conseguir los mejores niveles de latencia es conveniente que su uso sea acompañado de un procesador AMD, ya que por lo contrario esta se ve penalizada.
Con sus 6.000 MHz, un diseño de espejo y sus LED tipo diamante, por 155€ la G.Skill Trident Z5 Royal Neo es una excelente opción para aquellos que esten pensado en un equipo capitaneado por un procesador AMD y que gusten de tener una estética que no deje indiferente.
