Hoy os contamos la experiencia con el Vivo V40, uno de los últimos lanzamientos de la compañía y uno de los dispositivos más interesantes de su catalogo. El nuevo miembro de la familia Vivo V es un ejemplo de lo que la marca ofrece, destacando por su equilibrio general, un atractivo diseño, buena autonomía y un conjunto fotográfico que de la mano de Zeiss nos recuerda por que este sello fue durante años sinónimo de las mejores cámaras en un móvil. Tras un tiempo probándolo, ahora os cuento lo bueno, pero también la parte menos amable de este terminal.
Vivo V40 5G, especificaciones: |
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Dimensiones: 164,16 × 74,93 × 7,58 mm
Peso: 190 gramos Colores disponibles: Nebula Purple y Stellar Silver |
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Sistema Operativo: Android 14
Capa de personalización: Funtouch OS 14 |
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OLED 6.78 pulgadas
Resolución FHD+ 2800 × 1260 píxeles Densidad de 452 ppp Tasa de refresco de 60 y 120 Hz Brillo máximo de 4.500 nits |
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Qualcomm Snapdragon 7 Gen 3 4 nm
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12GB
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512 GB UFS 2.2
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Cámara principal ZEISS de 50 MP con OIS
Cámara ultra gran angular ZEISS de 50 MP Aura Light con ajuste de temperatura de color automático |
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50 MP con AF
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5500 mAh
Carga rápida de 80W |
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5G
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Bluetooth 5.4
WiFi 6 IP68 Sensor de huellas bajo pantalla eSIM |
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599 € |
Unboxing
Fieles a nuestro ADN comenzamos este análisis repasando que es lo que nos vamos a llevar a casa cuando nos compramos un Vivo V40. Este nos llega en una caja que nos recuerda a otros dispositivos similares, con un aro de lux que rodea el nombre del dispositivo sobre un fondo oscuro. Este diseño es un guiño al sistema de iluminación Aura, el cual ya hemos visto en otros modelos y que Vivo también ha incluido en el V40.
Dentro de esta caja encontramos el Vivo V40 en el acabado Nebula Purple, una suerte de color morado que destella con la iluminación directa. Si esto no os gusta tenéis el acabado Stellar Silver, un gris más discreto.
Junto con el smartphone recibimos la habitual parafernalia de folletos, pero también un cable de carga USB C a USB C y una funda a juego con el color del dispositivo. Ojo, decimos a juego, pero en realidad es un color morado mate mucho menos llamativo, lo que mantiene protegido el dispositivo pero le quita mucha gracia a su diseño, algo por otro lado habitual cuando usamos fundas.
No, no lo busques porque no incluye cargador, por lo que si quieres aprovechar la carga rápida de la que es capaz este dispositivo, o cuentas con un cargado que te de hasta 80W o te tocará comprar uno nuevo.
Un diseño depurado con poco de lo que quejarse
Con el Vivo V40 tenemos un dispositivo con cuerpo de policarbonato de color morado, aunque como ya hemos mencionado también lo tenemos en color gris, de excelente acabado. Esto le permite lucir un certificado IP68 que nos asegura su protección contra polvo y agua.
Con una dimensiones comedidas, de 164.16 x 74.93 mm, este dispositivo tiene un grosor de 7.58 mm y un peso de 190 gramos. NI es el más ligero ni el más fino que hemos probado, pero si es uno de los que mas cómodamente puedes usar al tener un acabado que asegura un agarre cómodo y seguro.
Vivo es una compañía que no probar nuevos acabados en sus diseños, algo que ya vimos con el Vivo V23 que es capaz de cambiar de color según le de el sol. En este caso ha optado por algo menos vistoso, pero que da un excelente resultados.
En nuestro caso hemos podido probar el modelo en acabado purpura, el cual puede llegar a parecer algo anodino, pero que en realidad es todo lo contrario. Este acabado cuenta con un tacto ligeramente rugoso que delata que no estamos ante un color uniforme, sino que este resplandece cuando le da la luz en un ángulo determinado. Además este acabado hace que el agarre sea muy agradable, sin la molestia tendencia a resbalar que tienen muchos modelos que optan por acabados más brillantes. Por otro lado, tenemos una trasera que es realmente difícil de ensuciar, lo que hace que este siempre presentable y sin manchas que la afeen.
En la parte frontal tenemos una gran pantalla que sigue apostando por los lados curvados para hacer ver que su grosor es menor. Esto es algo que muchas marcas ya han dejado de usar ya que suelen ofrecer una pobre experiencia en esas zonas y una tendencia a «colorear al verde» los laterales. Aquí he de reconocer que al ser un curvatura muy suave, el resultado es mejor de lo esperado
En la parte superior del marco repetimos el acabado plano de otros modelos de la serie V de Vivo, con la leyenda de «Professional Portrait» que incide en su buen comportamiento a la hora de hacer retratos.
En la parte inferior del marco tenemos el puerto USB C de conexión y carga, un altavoz y la bandeja para la tarjeta micro SD. Mientras que los controles se sitúan en la parte derecha con un botón para el encendido y apagado junto al botón de control del volumen.
El tamaño del dispositivo y la buena situación de los botones invitan a su uso sin tener que esforzarse en alcanzarlos. Al sujetarlo estos botones quedan muy accesibles, con un buen recorrido para notar su accionamiento, pero con un acabado suavizado que nos hace más agradable su manejo.
El modelo trasero de la cámara del Vivo V40 es peculiar, con una parte circular en la zona superior de la que sale una especia de tronco que conecta con un «ovalo» situado debajo de esta. En este espacio encontramos una especie de anillo de luz, el cual es el sistema de iluminación Aura que ya hemos visto anteriormente.
El sistema de iluminación Aura usa un anillo LED que es capaz de cambiar su iluminación ofreciendo una luz más fría o más cálida, adaptándose tanto a la situación de iluminación del momento, como pudiendo usarlo para hacer que nuestras fotografías adopten un tono distinto aprovechando este flash.
Como ya hemos indicado, el Vivo V40 viene con una funda de color morado suave, mas apagado que su trasera y que permite compensar el hecho de que las cámaras sobresalen del cuerpo, de forma que no solo lo protegen sino que evitan que el teléfono «baile» cuando lo colocamos sobre la mesa.
Pantalla a 120 Hz con 4.500 nits de brillo
El Vivo V40 tiene en su frontal un panel OLED de 6.78 pulgadas con resolución Full HD+ de 2.800 x 1.260 píxeles, lo que nos arroja una densidad de 452 pixeles por pulgada. En este caso tenemos un panel que destaca por alcanzar un brillo de hasta 4.500 nits, lo que nos permite usarlo en exteriores sin mayores problemas.
Este panel se rodea de un marco que en la parte superior e inferior tienen un mayor grosor, mientras que en los laterales es menor, algo que se ve aún más disimulado gracias al acabado curvado de estos.
No voy a ocultar que el acabado curvado le da un aspecto más top, pero lo cierto es que ya hace tiempo que he decidido que prefiero utilidad a estética. Los lados curvados tienen más pegas que ventajas, ya que en este espacio el táctil no responde tan bien como en el resto de la pantalla, además de darle una ligera deformación a las imágenes en estas áreas.
El panel del Vivo V40 llega a alcanzar los 120 Hz de tasa de refresco, pero no se trata de una actualización progresiva sino que lo hace usando tres niveles de refresco: 60, 90 y 120 Hz. Puedes escoger usar un sistema automático que cambia entre ellos en función del uso, optar por dejarlo en 60 Hz para priorizar la autonomía, o escoger usar los 120 Hz a costa de la autonomía pero priorizando la experiencia.
Por defecto la pantalla del Vivo V40 tiene a venir algo saturada, lo que por otro lado es muy común en la gama media y las marcas asiáticas. Para que cada usuario pueda personalizar su experiencia Vivo nos permite escoger entre el modo de color estándar, que es el predeterminado o bien usar el modo profesional para poder personalizarla según nos sea más agradable a la vista. También cuenta con la opción de habilitar el sistema de mejora visual, el cual de forma automática optimiza color y contraste en las aplicaciones compatibles como Netflix o Youtube.
La pantalla del Vivo V40 es sin duda alguna uno de los aspectos que destacan de este dispositivo, algo que por otro lado ya hemos visto en esta gama de productos de la marca. Vivo tiene claro que la experiencia de uso pasa por como vemos todo en la pantalla, por lo que no quiere arriesgarse en este aspecto y se asegura de ofrecer unos paneles de colores vivos y un brillo que nos permita disfrutar de ella tanto en interiores como en exteriores.
Funtouch OS con Android 14
Lo cierto es que a excepción de algunas marcas, la mayoría de los fabricantes con capa propia han sabido adaptarse a las nuevas necesidades y gustos de los usuarios. Vivo lo hace con Funtouch OS 14, una capa que nos llega bajo Android 14 y con la que nos aseguran tres años de actualizaciones del sistema y cuatro de seguridad.
Por fortuna a pesar de buscar un precio comedido, Vivo no nos castiga con un exceso de bloatware, el cual está, pero se limita a unas pocas aplicaciones que podemos desinstalar si no nos interesan.
Funtouch OS muestra un diseño minimalista que se divide en secciones diferencias por una serie de iconos coloridos, dando como resultado una interfaz sencilla pero no aburrida que pudiese parecer poco trabajada.
Como es norma está capa cuenta con las funciones de Android 14, pero también nos ofrece funciones propias de Vivo como el pode ampliar la RAM de forma virtual o habilitar el modo eSport/ultra juego para los más gamers.
Rendimiento de la mano de Snapdragon 7 Gen 3
No estamos ante un terminal de gama alta, por lo que no esperábamos un procesador premium, sin embargo estamos solo un peldaño por debajo con un procesador Snapdragon 7 Gen 3 de Qualcomm. Se trata de un chip fabricado en 4 nanómetros que cuenta con ocho núcleos, entre ellos uno de alto rendimiento que alcanza los 2.63 GHz. Junto con este motor tenemos una memoria RAM de 12 GB y un almacenamiento UFS 2.2 de 512 GB.
El conjunto del hardware del Vivo V40 nos da un rendimiento realmente bueno, tanto a la hora de iniciar y manejar las aplicaciones, como a la hora de gestionar las temperaturas para que no se refleje en nuestra mano los momentos de alta exigencia en forma de calor. Puede que no estemos ante un gama alta, pero si estamos ante un terminal que demuestra que incluso en las gamas medias podemos tener una experiencia de uso plenamente satisfactoria.
Aunque la sensación de uso me ha convencido, no hemos dejado de lado las habituales pruebas de rendimiento que están pensadas para cuantificar la experiencia. En este modelo hemos usado GeekBench, consiguiendo unas puntuaciones de 1.145 y 3.177 puntos en single y multicore respectivamente. Con 3D Mark y Wild Life la puntuación ha alcanzado los 5.337 puntos, llegando a los 1.483 puntos con Wild Life Extreme. Finalmente lo hemos pasado por PC Mark, test donde nos ha arrojado una puntuación de 10.447 puntos.
Autonomía y carga
Mientras que Samsung y Google siguen anclados en sistemas de carga rápida que apenas llegan a los 45W (con suerte), marcas como Vivo te ofrecen sistemas de carga rápida que en el caso del Vivo V40 es de 80W. Sin embargo, como ya hemos visto, no siempre estas cifras se reflejan igual en los tiempos de carga.
Estamos ante un terminal con una batería de 5.500 mAh que ha sido capaz de ofrecernos una autonomía que llega a dos días con un uso normal, sin tener que andar limitando el uso ni haciendo nada especial. Esto es una cifra que no es tan común ver como nos gustaría, por lo que la autonomía es otro de los aspectos donde el Vivo V40 destaca.
Como ya hemos dicho el Vivo V40 no incluye el cargador, por lo que en lo que a carga se refiere la experiencia va a variar en función del cargador que tengamos disponible. En nuestro caso hemos usado un cargado que permite alcanzar la capacidad máxima teórica de este dispositivo, basando los resultados en la carga con él.
A la hora de cargar la batería del Vivo V40 completarla nos ha llevado unos 50 minutos, aunque en poco más de 20 ya llegamos al 50%.
Fotografía con Zeiss
El Vivo V40 cuenta con un conjunto fotográfico que no solo se apoya en el hardware, sino que va de la mano de Zeiss tanto en el diseño del conjunto fotográfico del dispositivo como a la hora de ofrecer distintos modos de fotografías. Esta compañía aporta la óptica, un aspecto donde ya ha demostrado que es todo un referente desde los tiempos de Nokia.
En cifras las lentes del Vivo V40 se compone en su trasera de una cámara principal ZEISS de 50 megapíxeles con OIS, apertura f/1.88 y una distancia focal equivalente a 24mm; una cámara ultra gran angular ZEISS también de 50 megapíxeles con apertura 2.0 y un campo de visión de 119º que ofrece una distancia focal equivalente a 14 mm, mientras que en el frontal tenemos una lente selfie de 50 MP autofucos con apertura f/2.0.
La cámara del Vivo V40 se controla con una aplicación tan completa como accesible a todas sus características. Con ella podemos escoger entre tres modos de fotografía automática: vivido, texturizado o ZEISS. Esta última la podemos traducir como realista, ya que es la que nos permite tener colores más naturales y cercanos a lo que vemos con nuestros ojos.
Esta aplicación nos da acceso a la configuración del sistema de iluminación Aura, pero también nos permite acceder a los distintos filtros bokeh de Zeiss.
Curiosamente la falta de lente telefoto no es óbice para que este conjunto fotográfico nos ofrezca un amplio abanico de opciones de retrato, con distintas focales equivalentes que la propia aplicación nos detalla: Retrato urbano (24 o 35 mm), Retrato natural (50 mm) o retrato clásico (50mm).
Gracias a ZEISS la cámara del Vivo V40 es capaz de ofrecer unas fotografías con una fidelidad de colores realmente destacada, eso sí, cuando pasamos a otro modo la cosa cambia bastante. Un ejemplo lo tenéis en la última imagen de la siguiente galería, donde el cielo estalla con un azul muy saturado.
En condiciones adecuadas tenemos unas fotografías con un muy buen manejo del rango dinámico y la iluminación, logrando un buen nivel de detalle en cada toma.
Si bien no tenemos telefoto, los 50 megapíxeles de su sensor principal nos permite obtener un zoom muy correcto usando recortes de la imagen principal. Si usamos un zoom hasta 3x los resultados son muy correctos, más aún cuando recordamos que no tenemos una lente dedicada. Cuando sobrepasamos los 3 aumentos la imagen sigue dando buenos resultados, aunque a medida que nos acercamos al tope de 20x vemos como el procesado pasa factura y perdemos detalle, texturas y fidelidad de colores.
La lente gran angular mantiene el tipo con respecto a su lente principal, sin apreciarse deformaciones en las esquinas y manteniendo una correcta colorimetría.
Me gusta el modo noche de Vivo y en el caso del Vivo V40 esto es algo que me ha seguido pasando. Si bien no tenemos ni el detalle ni la nitidez que obtenemos de día, obtenemos unas imágenes con una buena interpretación del calor y que controla de forma adecuada las fuentes de luz para que no resalten en exceso sobre las zonas menos iluminadas.
Si eres amante de la fotografía nocturna tenemos también los modos astro y superluna, los cuales nos permiten fotografiar el cielo y obtener resultados tan llamativos como los que os mostramos.
Vivo ofrece un trato preferente en lo que a retratos se refiere, algo que hace de forma muy pareja tanto con la cámara trasera como con la frontal. La combinación de un buen sensor, la óptica ZEISS y unos modos dedicados hacen que tengamos una amplia variedad de posibilidades para lucirnos a la hora de tomar retratos. Los retratos del Vivo V40 son capaces de reflejar de forma muy fiel los tonos de piel al tiempo que logran un buen recorte, lo hacen con una buena sensación de profundidad y un desenfoque muy conseguido.
Los aficionados a hacer fotos de tipo retrato van a disfrutar como niños, tanto por la calidad de los resultados como por la amplia variedad de efectos y modos con los que personalizar los retratos, haciendo bueno el lema de Vivo de «retratos profesionales».
Galería
Conclusiones y opinión
El Vivo V40 5G lo encontramos con un precio de lanzamiento de 599€ que ya podemos ver con interesantes descuentos. Con ello nos llevamos un dispositivo que sin tirar por exagerado, nos presenta un diseño con un acabado muy atractivo que mantiene alejadas las huellas y hace resaltar su sistema fotográfico. Esto hace que destaque también el sello de ZEISS, poniendo de relieve la gran importancia que tiene la fotografía en este terminal.
No hace falta un gama premium para lograr una buena experiencia de uso, algo que el Vivo V40 deja bien claro gracias un buen procesador y a una batería que nos permite estar hasta 2 días sin tener que cargarlo. Da gusto tener una autonomía de esta capacidad y luego saber que en menos de una hora tendremos nuevamente la batería completamente cargada.
Con estas armas el Vivo V40 es un gama media de garantías que no busca equilibrio, sino destacar en el segmento enfocándose en un conjunto fotográfico que solo una lente teleobjetivo redondearía, siendo un juguete con el que entretenerse sin fin para los amantes de los retratos, autentico protagonista del Vivo V40.