A principios de semana se comenzaron a escuchar rumores que apuntaban a que Huawei estaría pensando en vender sus marcas «P» y «Mate» de smartphones premium al mismo consorcio que adquirió Honor. Un rumor que se apuntalaba en que desde la salida de Honor esta ya ha comenzado a trabajar con empresas norteaméricanas, mientras que Huawei sigue inmersa en un veto feroz por parte de Estados Unidos. Con esta venta Huawei conseguiría una nueva inyección económica, la cual no le vendría mal dada su actual situación.

Al poco de salir este rumor, el mismo fue desmentido por la empresa con un comunicado en el que afirmaban que este no tenía ningún fundamento, al tiempo que afirmaban «Seguimos totalmente comprometidos con nuestro negocio de teléfonos inteligentes y continuaremos ofreciendo productos y experiencias líderes en el mundo para los consumidores de todo el mundo«.

Lo cierto es que el problema de Huawei no se va a solucionar por vender activos, si no por solucionar sus problemas con la administración norteamericana o encontrar alternativas viables, algo que los analistas especializados tienen muy claro. Tal y como afirma Will Wong, analista de investigación tecnológica de IDC en Singapur al medio chino South China Morning Post “Este tipo de acuerdo solo podría ser usado por Huawei como último recurso, especialmente cuando la compañía aún quiere mantener una presencia en el mercado [de los smartphones]”.

Desprenderse de Honor no habrá sido una decisión fácil, pero renunciar a sus marcas premium equivaldría a salir del mercado de los Smartphones, algo que se nos hace difícil de creer, máxime cuando el cambio de administración en EEUU podría abrir una puerta a un acuerdo que permitiera relajar las sanciones. Sea como fuere de momento habrá que esperar a ver como evoluciona la situación, tanto entre Huawei y la administración norteamericana, como sobre todo entre China y la nueva administración de Joe Biden.