Mutant Year Zero: Road to Eden es un juego de rol, acción y estrategia desarrollado por The Bearded Ladies y publicado por Funcom para Xbox One, PS4 y PC.

Mutant Year Zero: Road to Eden es, en mi opinión, una mezcla de varios títulos que funciona perfectamente. Desde el sistema de combate al estilo XCOM, pasando por la ambientación post apocalíptica de Fallout, hasta los toques de sigilo del mítico Commandos.

Todo esto además, envuelto en una historia interesante y unos personajes excéntricos. Tanto a primera vista como una vez los conoces mejor, los protagonistas de este título tienen unas personalidades que no te dejarán indiferente.

Cómo sobrevivir durante el Apocalipsis

Mutant Year Zero: Road to Eden mezcla un combate por turnos con un sistema de exploración libre. Cuando estemos luchando, tus personajes y los enemigos se moverán por turnos, usando un sistema de cuadricula muy parecido al de XCOM.

Por un lado, podremos usar cobertura para atrincherarnos, o intentar flanquear a los enemigos que se esconden. Además, a la hora de disparar, la distancia y el tipo de arma que usemos afectará al daño y a la probabilidad de impacto.

Por otro lado, cuando no estemos en combate, nuestro movimiento por el mapa será libre. No aparecerá la cuadricula, y podremos mover a nuestros personajes en cualquier dirección y explorar a placer la zona donde nos encontremos.

El combate y la exploración se encuentran en otro aspecto de la jugabilidad, el sigilo. Si nos acercamos a los enemigos, veremos alrededor suyo una zona de detección, que se hará más grande o más pequeña dependiendo de diversos factores, como el ruido que hagamos o la luz que emitamos.

Si apagamos nuestra linterna, por ejemplo, la zona de detección se hace mucho más pequeña. Este sistema de sigilo añade otro nivel a la profundidad de la jugabilidad.

Gracias a esta, podemos identificar a todas las fuerzas enemigas y sus posiciones antes de atacar, y así poder colocar a nuestros soldados de la mejor forma posible.

Incluso se puede llegar más allá. Podemos evitar luchar por completo. Hay zonas llenas de enemigos que son completamente explorables sin necesidad de luchar si vamos con cuidado.

Con lo que se refiere al aspecto de rol, Mutant Year Zero: Road to Eden ofrece diversas opciones. Tenemos, por ejemplo, nuestra base, donde podremos usar los recursos que hemos obtenido durante las misiones para adquirir mejoras.

Con estas mejoras, podremos hacer que nuestras armas sean más poderosas, o que nuestras armaduras ofrezcan mejor protección. Otro aspecto son las mejoras propias de cada personaje.

Como muchos otros juegos de rol, cada vez que un personaje sube de nivel, se nos otorgan puntos de habilidad. Estos puntos se podrán usar para avanzar por el árbol de talentos.

Este árbol pondrá a nuestra disposición mejora genéricas, como de vida o resistencia al daño, así como nuevas habilidades, como poder avanzar más casillas un turno o sobrevolar una zona.

En general, la jugabilidad de Mutant Year Zero: Road to Eden es bastante completa. Mi única pega es que es demasiado corto. Es un juego que puedes terminar en veinte horas más o menos.

Eso sí, son unas buenas veinte horas. Sería genial que en un futuro se lanzara una expansión con más misiones y zonas o una segunda parte.

Un mundo destruido

Mutant Year Zero: Road to Eden ha mezclado dos estilos en uno. Tenemos escenarios, que en general, son realistas. Los bosques o los edificios por ejemplo, son actuales y ordinarios.

Una zona que me encantó es una sección de túnel, donde encontraremos una gran cantidad de vehículos abandonados y poca iluminación. Es una zona con una ambientación estupenda para este estilo de juego.

También tenemos a nuestros personajes y a los enemigos… que se alejan bastante de la realidad. Llevaremos a un hombre con cabeza de jabalí, a otro con cabeza de pato y a una chica con la piel endurecida y un cuerno de demonio.

Y los enemigos, perros mutantes rabiosos, personas medio muertas o fanáticos religiosos capaces de invocar rayos. Lo dicho, poco normal. Y todo esto junto crea una genial situación para este juego.

Además del estilo, la calidad gráfica no es para menos. Tanto los personajes como los escenarios han sido realizados con muchísimo detalle y que no desentonan en ninguna situación.

Por último, los efectos de partículas en general. La luz de la linterna o el fuego de los cócteles mólotov. Todos ellos interactúan con el escenario sin errores aparentes a primera vista.

Como dato final, el rendimiento en PC (Intel Core i7-6700K 4.00GHz, 16GB de RAM y NVIDIA GeForce RTX 2070 WindForce 8GB GDDR6) de este título es estupendo. No he tenido ningún problema gráfico o de rendimiento o con la aplicación en general.

La melodía del fin del mundo

Mutant Year Zero: Road to Eden tiene una banda sonora más centrada en generar tensión que en entretener, por decirlo de alguna manera. Durante el transcurso del juego escucharemos muy pocas piezas musicales tradicionales.

En su mayor parte, lo que nos acompañará será el ruido del viento atravesando los árboles, las conversaciones de los enemigos, que aún no saben que estamos ahí o los ruidos de las criaturas que acechan en la oscuridad.

Y poco más. Todo el departamento de sonido está ahí para acabar de perfilar la sensación de tensión que nos acompañará durante la aventura.

Como último punto, me encantaría darle una enhorabuena al equipo de voces. Los tres protagonistas son estupendos y sus voces tienen una personalidad que me ha encantado.

Conclusión

Pues para ser sinceros, Mutant Year Zero: Road to Eden es un juego que recomendaría, pero cuando esté de oferta. Por el precio oficial, me parece demasiado para lo que dura.

Aun así, esperad a una oferta y si tenéis curiosidad sobre el título, no lo dudéis. Es un juego estupendo.