Uber, el controvertido servicio de transporte que tanto que hablar ha dado, se enfrenta en los últimos tiempos a una mala noticia tras otra. Después de haber cosechado críticas por los problemas entre su plantilla, con acoso sexual de por medio, y el descubrimiento de la utilización de un software para burlar a las autoridades de ciertos países; ahora su presidente Jeff Jones ha presentado su renuncia después de solo seis meses en el cargo.
Jeff Jones ha afirmado que las actuales condiciones no son las que se daban cuando firmó su contrato, y que la dirección que se está tomando no es lo que el tenía en mente para dicha compañía. Es por ello que ha decidido dar un paso al lado y renunciar de su puesto, salvándose así probablemente de problemas cercanos de esta compañía que, cada paso que da hacia delante, parece que de dos hacia atrás.
Desde Uber han agradecido el trabajo de su ya ex-presidente, “Queremos dar las gracias a Jeff por estos 6 meses en la compañía y le deseamos lo mejor”, apuntaban desde la empresa californiana. Aún así, y como decimos, este se suma a una larga lista de problemas que han acontecido en las últimas semanas y meses, con diversos escándalos implicando a plantilla y usuarios, así como manifestaciones en diversas ciudades de Europa, como recientemente en Barcelona, donde los taxistas están en contra de compañías como Uber o Cabify.
Sin duda necesitan un gran líder que sepa maniobrar en este campo de minas que parecen tener delante y replantearse sus técnicas de entrada al viejo continente, donde ha dado tanto que hablar sobretodo en la mayoría de grandes ciudades europeas. En EEUU goza de gran reputación y uso, pero Europa parece atragantársele a Uber y no da la sensación que den con la tecla correcta para arreglarlo. Mientras tanto, siguen investigando exhaustivamente con los coches autónomos para realizar los trayectos de sus usuarios, pero si no tienen cuidado, se van a quedar antes sin lugar donde poder usar dichos coches.
